Capítulo 31💔

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Capítulo 31:
           
       En el entierro de mi madre solo estaba abrazada a mi hermana. El cementerio estaba desierto, ella ni siquiera tenía amigos. Sus antiguos compañeros de trabajo solo nos dieron el pésame y un par de excusas estúpidas para ausentarte. Pablo me observaba un poco distante. Camilo se me acercó dejándolo solo. Abrazó a mi hermana y después a mí. Fernanda y su novio se unieron. Todos pusimos un par de flores antes de que la tierra ocultara el cuerpo de mi madre.

No podía dejar de mirarlo, quería que estuviera a mi lado diciendo que todo va a estar bien. Yo quisiera huir con él y no con Sofía. Sé que encontré a alguien que puede cuidarme para toda la vida.

—¿Por qué Pablo se quedó allí?—susurré a Camilo.

—Tiene vergüenza, dice que tu hermana quizás se sienta incomoda. Pero, él no quería estar ausente en un día tan triste para ti— comentó Camilo dándome la mano— . ¿Qué vas a hacer ahora?

—¿A qué te refieres?— pregunté algo confusa.

—Ibas a huir de tu madre, ahora te puedes quedar— habló sin quitarle la vista al ataúd.

— No, lo más jodido es que me voy antes. Ni siquiera el próximo catorce de febrero lo pasaré con compañía— mi tono era triste. Honestamente, yo solo quería estar con Pablo ese día.

—Deberías hablar con él…

—No, nunca le había comentado y no quiero perderle estos últimos días aquí— confesé casi llorosa.

—Aun así, lo vas a perder— tomó mis manos y solo miró mis ojos— .Opino que deberías ser honesta con él. No vas a perderlo o eso no lo sabes.

Cuando el padre leía la oración, solté el agarre de mi mejor amigo e iba decidida a seguir su consejo. Pablo estaba con las manos metidas en su bolsillo y su rostro había dibujado una leve sonrisilla. Estando cerca me abrazó fuerte, podía sentir su delicioso perfume. Rompí en llanto, no estaba tan decidida como creía. Sentí por dentro que me quebraba en miles de pedazos.

—¿Te sientes mal?—preguntó tomando mi mandíbula— .Yo sé lo que es ver a un ser querido muerto.

—Eso no es lo que me tiene así— respondí sentándome en el mojado pasto.

—¿Entonces? ¿Por qué estás tan triste?— imitó mi acción y puso su brazo por encima de mi hombro— .Dímelo todo. Quiero que te abras conmigo.

—Hace un tiempo supiste que mi madre me golpeaba— hice una pausa y tragué un amargo buche, las palabras se escondían en mi boca— .Mi hermana me propuso huir con ella y teníamos fecha para irnos en febrero. Entonces, ahora me quedo sola en este lugar porque no quiero intervenir en la vida de mi papá.

—Quédate conmigo— propuso él velozmente— .Si te quedas conmigo podemos iniciar una relación.

—Lo mejor será que no. Esta vez yo no me quiero quedar— sentía que espinas salían de mi boca, pero solo me estaban haciendo daño—.Te dejo el camino libre, si yo me quedo seré otra complicación para Carolina.

—Prefieres irte, no te culpo. No vas a ser la única que va a elegir así— dijo parándose del suelo— .Espero que ames tu nueva vida en ¿Dónde?

—Los Ángeles— escupí abrazando mis rodillas.

—Cerca…queda muy cerca— ironizó—. Tanto que te iré a ver todos los días— hizo una pausa apretando sus puños—. Cuando me veas en la calle solo imagina que no me conoces— dijo señalándome con su índice.

El mundo se me vino encima. Mi visión comenzó a ser borrosa por las lagrimas que se apoderaban de mis ojos. Mi vida se estaba marchando con él, sin ni siquiera mirar para atrás. Él buscaba soluciones y yo me negaba rotundamente, pero solo no quiero ser una carga.

Volví junto a mi hermana y amigos. Esta vez mi papá estaba ahí. Me abrazó fuerte, creían que mi llanto era solo por el velorio. Pero, lo que nadie sabía es que mi corazón se había roto doblemente.

Al llegar a casa solo quería hundir mi cuerpo en la cama. Necesitaba descansar por horas y mi colchón me brindaba todo lo que necesitaba. Quería además que la tierra me tragara, debí alejarme desde un principio. Quizás no hubiese sentido nada por él y todo entre nosotros fuese una simple amistad. Pero, no deseas alejarte de alguien que te brinda seguridad.
Necesitaba una maquina del tiempo, iba a valer la pena recibir nuevamente los golpes. Mi hermana abrió sin avisar. Yo no tenía las fuerzas suficientes como para levantar mi cabeza y mirarle, solo dejé mi cara hundida en mi cama.

—No sabía que te dolía tanto perder a mamá—dijo acariciando mi cabeza despeinada.

—No fue a la única que perdí. Pablo también se fue, pero de mi vida—confensé sentándome con las piernas cruzadas— .Le dije que nos íbamos pronto. Buscó soluciones para que yo me quedara y solo puse excusas— sollocé—. Me dijo antes de irse que si lo veía en la calle me imaginara que él no existe.

—Quizas lo hizo porque estaba molesto. Si de verdad te quiere no sentía ni la mitad de lo que dijo— comentó mi hermana—. Ademas, así te será mas fácil olvidarlo. Yo me encargué de hacer tus tramites para el cambio de escuela y el hospital me confirmó que me aceptan como miembro de su personal.

— Me alegra escuchar eso— dije acercándome a mi hermana— .Quiero que me des un abrazo.

Sofía me dio un abrazo y hundí mi nariz en su cuello. No le molestó que llenara toda esa zona de mocos, a mi me hubiese dado un poco de asco.

…Narra Pablo…

Estaba en la entrada del cementerio. Si Victoria supiera que yo si la quiero de verdad, que para mi ya no es solo "la niña que quiero cuidar”. En poco tiempo me di cuenta que me estoy enamorando. Su decisión fue irse, no soy un barco y no es ella un ancla. Es como cuando tienes un ave en una jaula, ahí no es feliz.

Monté en mi bicicleta, aunque me sentía las piernas pesadas. La irá se estaba apoderando de mí, pero he aprendido tanto que ya puedo controlarme. Puedo controlarla solo por mi respiración y pensamientos.

Una sola pregunta invade mi cabeza ¿Cuál de los dos fue el jardín destruido? ¿le dolió perderme?.

Un mensaje llegó a mi teléfono. Era ella, no lo dudé dos veces y dejé de andar. Solo me puse a leer aquel extenso texto acostado en el césped.

Victoria 2:30pm :Pablo, quizás no fui la mejor persona en tu vida. No han pasado dos horas y ya necesito desahogarme porque no quiero acumular sentimientos. Cuando te dije que me gustabas, no te mentí. No tienes ni idea de lo bien que se sintió que fueras el primer hombre en tocarme. Aunque, yo sabía que no sentías por mí. Lograste eliminar los complejos que atormentaban mi mente. Se que no fui la mejor porque mereces a alguien que se atreva a dar todo sin querer huir. Pero, si me quedo tanto tu vida como la de tu mamá va a ser complicada. Yo solo te quiero y juro que quiero un futuro contigo, ahora no es el momento indicado. Espero que algún día puedas perdonarme.

¿Cómo odiar a alguien que amas? Desde el fondo de mi alma, yo solo espero que la vida vuelva a juntarnos.

…Nota de la autora…❤️
Bueno, espero que les haya gustado el capítulo… Besos.

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No hay diferencias en el amor©️ [COMPLETO]✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora