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TAYLOR

¿Cuánto días de mierda puede tener una persona a lo largo de su vida? Por que yo llevaba esta semana unos cuantos y me empezaba a cabrear bastante.

Tenía varios motivos para estar en este momento fuera del estudio, y mira que yo nunca estaba fuera del estudio. Era mi lugar favorito y uno de mis refugios cuando las cosas no marchaban bien. Pero es que simplemente hoy, no quería estar allí.

El principal motivo y sinceramente el único era ese chico. Nicholas.

Nicholas.

Nicholas y su voz.

Y otra vez Nicholas y su voz.

Todas las noches como un bucle en mi cabeza. No podía dejar de pensar en su voz. De verlo en aquel escenario tocando el piano o la guitarra.
Su voz se había quedado tan clavada en mi mente que podía reconocerla con los ojos cerrados en cualquier lugar.
Y bueno, el motivo era que el chico no me había llamado.

Ni una sola llamada. Nada de nada.

Y podía llegar a entenderlo. A veces o casi siempre daba la impresión de ser un tío frío y distante. Sin sentimientos. Y quizás el chico se asustó, pensó que era una puta broma y decidió seguir con su vida.

¿Pero cómo iba yo a seguir con la mia después de escuchar esa voz y no tenerla en mi discográfica?

- Rachel por favor ¿puedes encangarte tu hoy? - le dije por teléfono - no tengo ánimo para estar en el estudio.

- ¡No soy un maldito productor musical Taylor! - me gritó desde el otro lado.

- Bueno, tómate el día de descanso. Que todos descansen - abrí la puerta de una cafetería. Necesitaba urgentemente un café - nos merecemos un descanso.

- No se que coño te pasa últimamente Taylor.

Ese chico y su voz me pasa todo el maldito tiempo.

- Estoy estresado. Cansado. Otra vez estresado y cansado Nora...

- Ya hablaremos de esto cuando nos veamos.

Rachel colgó el teléfono dejándome como otras muchas veces con la palabra en la boca.

- Siempre tan simpática - susurré.

Me senté en una de las mesas más alejadas de la cafetería y saqué mi ordenador portátil. Obviamente no tenía ni las más mínimas ganas de trabajar, pero debía de terminar una canción y sinceramente hoy no era el día para hacerlo. Pero debía de intentarlo.

- Buenos días ¿qué desea tomar?

- Un café solo, pero que sea doble - contesté sin mirar al camarero.

- Ahora mismo se lo traigo.

Espera. Esa voz me resultaba tan familiar.

Subí la mirada, encontrandome con un chico que lo único que hacia era mirar un blog de notas. No miraba nada más. Solo ese blog.

Tuve que mirarlo mejor por que no podía ser. Estaba usando gafas y no podía reconocerlo bien.

- ¿Nicholas?

COMFORT || TAYNICK || TAYLOR ZAKHAR & NICK GALITZINE ||Where stories live. Discover now