Primera victoria

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*Miércoles 3 de septiembre*

João

En menos de veinte minutos ya habíamos llegado al estadio del Sadar, donde nos esperaba el Osasuna. Sabía que Xavi no me pondría de titular hoy, pero aún así estaba bastante nervioso.

Los que no íbamos de titulares, nos sentamos en el banquillo, que básicamente éramos Fermín, Ferran, Pedri y yo.

El locutor del estadio empezó a decir las alineaciónes para el partido. Como portero, obviamente estaba Ter Stegen, de defensas estaban Sergi, Kounde, Christensen y Balde. De mediocentros Frenkie, Oriol y Gundo, y como delanteros estaban Lamine, Lewan y Gavi.

Cuando todos empezaron a salir al campo me fijé en uno en concreto, en el número 6. Se me vino a la cabeza lo que había pasado en el hotel, las caricias, las miradas. Aparté esos pensamientos de mi cabeza cuando el árbitro dio los tres pitidos que indicaba que empezaba el partido y me concentre en verlo.

Casi había terminado la primera parte, habían añadido un minuto y nuestra única oportunidad de marcar antes del descanso era un corner que había señalado a nuestra favor. Efectivamente, Gundo sacó ese corner y Kounde remató de cabeza colando el balón en la portería y colocando el marcador uno arriba.

Nos fuimos contentos a los vestuarios y allí todos nos dimos ánimos para seguir con el juego.

En la segunda parte Xavi cambió a Balde por Cancelo. El partido siguió y en el minuto setenta y seis nos encajaron un gol, íbamos empate.

— João, Íñigo y Raphina a calentar— dijo Xavi dándonos los petos.

Me puse nervioso nada más escuchar mi nombre, pues era el primer partido que jugaba con el Barça.

Después de estar calentando un rato empezó a cambiarnos, el primero fue Oriol, que en su lugar entró Íñigo, el siguiente fue Lamine que se fue para dejarle su sitio a Rapha, y el último fue Gavi, que salió y cuando pasó por mi lado me dió una abrazo y me susurro.

— Buena suerte.

Yo sonreí y entré al campo con mucha energía.

Rondaba el minuto ochenta y seis y nos habían pitado un penalti a nuestra favor, lo tiraría Robert. Se preparo y... Entró, todos fuimos a celebrarlo hacía el corner y se terminó el partido con nuestra victoria.

Después de celebrar en el vestuario como locos volvimos al hotel, ya que esa noche dormiríamos en Pamplona porque se nos había hecho muy tarde para coger un avión ahora.

Subí a la habitación donde ya estaban Balde y Gavi.

— Eh tíos, me voy a dar una ducha ¿Vale?— dijo Balde.

Los dos asentimos y él se encerró en el baño, rebusqué en mi mochila y saqué un plátano para comérmelo para cenar, ya que tenía un poco de hambre.

Me tumbé en mi cama y lo abrí y le pegué un mordisco. Me puse a ver el móvil y de repente vi como Gavi se acercaba a mi, antes de reaccionar se había llevado un bocado de mi plátano.

— Eh tío— dije riendo.

Él rió mientras masticaba.

— Es que tengo hambre— dijo cuando tragó.

Partí el plátano y le di la mitad para que se lo comiera.

— Que bueno eres João tío.

Los dos reímos.

— ¿Quieres que sigamos viendo la serie?— le pregunté cuando acabé de comerme el plátano.

Él asintió cuando le dio el último bocado a su trozo. Nos acomodamos como antes y le di uno de mis auriculares, después de eso nos pusimos a verla tranquilamente.

A los pocos minutos Balde salió, se puso el pijama, se metió en la cama y apagó la luz, por lo que nos quedamos totalmente a oscuras, solo la luz de la luna y la del móvil iluminaban la habitación, por lo que le baje un poco el brillo a mi pantalla.

Después de un rato escuchamos los ronquidos de Balde y ambos reímos flojito.

— Creo que deberíamos acostarnos ya— dije cerrando mi móvil.

Gavi asintió y me devolvió el auricular, los guarde y puse el móvil a cargar. Después me puse el pijama que consistía solamente en un pantalón de chándal corto y me quedé sin camiseta ya que hacía un poco de calor.

Me tumbé en la cama y me arrope hasta la altura de mi cintura con la sábana.

— Buenas noches João— escuché decir a Gavi.

— Buenas noches Gavi.

Como cada noche me puse a mirar a la luna, por eso me gustaba coger las camas al lado de la ventana, observar la luna y las estrellas por la noche me calmaba mucho. Bastante rato después yo seguía despierto y noté como Gavi se acercaba hasta mi cama.

— ¿Que estás mirando?— preguntó por encima de mi hombro, metiéndose directamente en mi cama.

— ¿Que haces despierto?— contesté yo con otra pregunta.

— No puedo dormir, no me has contestado, ¿Que miras?

Me giré para mirarlo a los ojos, él puso su cabeza sobre mi hombro expectante a mi respuesta.

Volví a mirar al cielo y contesté.

— A la luna.

— ¿Por qué?— su aliento rozó mi cuello haciendo que un escalofrío me recorriese de arriba a abajo.

Lo miré de nuevo.

— ¿Alguna vez has visto la luna? Y has dicho, que hermosa se ve, entonces le tomas una foto, pero se ve pequeña, fea y borrosa— Él asintió muy atento a lo que decía— Y aunque se ve así en la foto, tu sabes que ella es preciosa. ¿Como le explicas a la luna su belleza si en la foto sale así? La luna no sabe que es hermosa, porque no se ha visto brillar. Por eso la miro todas las noches, para ver cómo se mueve, como cambia cada día, cada mes, cada año, y como todas las estrellas se mueven a su alrededor, sabiendo que ella es el centro de atención.

— No sabía que eras astrónomo— dijo sonriendo.

— No lo soy idiota, solo me gusta admirarla, me ayuda a dormirme— dije riendo.

Él asintió.

— Anda, duérmete ya— le dije mirándolo a los ojos.

— Es que no puedo, alomejor si me abrazas...— mi corazón dió un vuelco al oír sus palabras y no pude evitar sonreír.

Abrí mi brazo para que metiese su cabeza por debajo y la pusiese en mi pecho. Noté como me daba ligeras caricias del abdomen hacía mi pecho y sonreí un poco, y como poco a poco su respiración era más relajada y su agarre más suave hasta que por fin se durmió.

Antes de dormirme susurré algo.

— Y no estaba hablando de la luna— porque no había estado describiéndola a ella en nuestra charla, estaba describiendo a Gavi. Porque él no sabía lo mucho que brillaba, como la luna, y como yo era la estrella que giraba alrededor de él.

Después de esa confesión en solitario, donde solo me escuchaban las estrellas, me dormí.

——
¿João astrónomo? vaya monada jajaja, bueno, espero que os haya gustado este cap, ¿no os encanta el João pensativo y calmado? a mí me encanta, siento que al escribirlo así, es igual en la vida real, no se, me lo imagino así. Bueno, nos vemos en el próximo capítuloooo🫶🏼🫶🏼🫶🏼

El Último Partido (João Félix X Gavi)Where stories live. Discover now