13: Bar

72 7 0
                                    

Al llegar al bar, inmediatamente noté que no era mi tipo de lugar. El ruido era ensordecedor, la música a todo volumen y el ambiente lleno de gente, el olor a tabaco impregnaba el aire, lo cual no era agradable para mí, usualmente lo tolero, pero no estoy acostumbrada a oler tanto en un ambiente pequeño y cerrado como este. 

— ¿Cuánto? — Pregunté caminado a su lado — ¿Cuánto tiempo estaremos aquí?

— Tres horas máximo. — Contesta mientras íbamos donde sus amigas 

— Okey ... — Dije sin muchos ánimos

En pocos pasos, llegamos a la mesa donde se encontraban las amigas de Leah, eran seis chicas que parecían estar un poco tomadas, riendo y charlando, Leah las saludó a todas con un beso en la mejilla, mientras tanto, yo, manteniendo cierta distancia, las saludé tímidamente desde lejos con un gesto de la mano.

— ¿Te traigo algo? — Le pregunté antes que se sentara — Iré a la barra a tomar algo.

— No, no te preocupes. — Contestó sentándose — Recuerda que no puedes beber, estás tomando medicamentos.

— Lo sé, iré solo por una gaseosa. — Contesté — Me avisas para irnos, ¿si? Te dejo con tus amigas.

Comencé a caminar entre la multitud, esquivando a las personas que se encontraban en mi camino, hasta llegar a la barra donde me senté en unos de asientos libres.

— Una coca - cola helada. — Le pedí al bartender mientras sacaba mi celular

— Y una cerveza. — Agrego una chica

Mientras esperaba a que me sirvieran la gaseosa, aproveché para revisar mi celular y responder algunos correos pendientes y mensajes de WhatsApp, estaba concentrada en responder cuando sentí una mirada encima de mí, no le di importancia, aunque llego a un punto que me sentí incómoda.

Levanté la mirada y vi a Victoria con una sonrisa amplia observándome.

— Nunca me dijiste tu nombre. — Dijo, manteniendo su sonrisa — Eso si puedes darme, ¿no?

Asentí con una sonrisa — Me llamo Kayla.

— Bonito nombre, Kayla. — Comentó — ¿Qué te trae a un bar un sábado por la noche?

— Perdí una apuesta con mi esposa. — Conteste — ¿Y tú?

— Quedé en encontrarme con unos amigos del trabajo, pero cancelaron de último momento. — Explicó — ¿Qué tipo de apuestas perdiste con tu esposa?

— Bueno, hace unos días me enfermé, yo pensaba que era cansancio, pero resulto ser un virus, lo que creyó ella.

— Oh, ¿ya te sientes mejor? — Asentí — ¿Te puedo invitar una cerveza?

— Estoy tomando medicamentos, pero con gusto puedo invitarte yo una. — Dije con una sonrisa

El bartender nos trajo nuestras bebidas, colocó frente a mí una Coca - cola bien fría y frente a Victoria una cerveza bien espumosa.

— ¿A qué te dedicas, Kayla? — Preguntó con curiosidad mientras probaba su cerveza

— Soy ingeniera. — Respondí — ¿Y tú?

— Abogada, trabajo para uno de los mejores bufetes del país. — Contestó con una sonrisa — Si alguna vez necesitas los servicios de una abogada o cualquier cosa, no dudes en llamarme. — Dijo dejando una tarjeta de presentación en la barra

Mentira de amorWhere stories live. Discover now