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19 » Explicaciones y disculpas.

N/A: Antes de leer este capítulo, regresa a leer el anterior. Se ha cortado la parte final y he vuelto a subir el capítulo 18 ahora sí completo (:

C H R I S

Kate finalmente aceptó hablar con nosotros, pude sentir alivio en mi ser por la respuesta, pero ahora siento nerviosismo y miedo por la actitud que ella puede tomar. Y ese chico Hudson estaba ahí, metiéndole ideas que me complicaban todo aún más, como si le faltara complejidad al asunto.

Para alguien más en mi situación, quizá le resultaría más fácil conseguir una renuncia o un cambio de escuela e irse de ahí para olvidar a la chica, pero yo no podía hacer eso. Me había encariñado con Kate en lo que va del curso escolar, intenté ignorarla, sacarla de la mente, pero no podía, tenía algo en ella que me hacía buscarla de una u otra manera.

Y ahora no podía dejarla ir, no después de que ya he probado como es estar con ella en un ambiente que no sea profesor-alumna.

Nos hemos separado de momento en el pasillo, Kate está hablando con sus dos amigos, mientras Sebastian y yo estamos en el otro extremo.

—Creo que tú debes hablar primero con ella —dice Sebastian atrayendo mi atención— a fin de cuentas ella es tu chica, no mía.

Regreso la vista a Kate, ella mira a sus amigos, pero aun así lanza miradas furtivas hacia nosotros; cuando hace conexión con alguno de los dos, ella desvía la suya.

—Hey, concéntrate —me regaña Stan—. Si quieres recuperarla, deberás convencerla de que en verdad tú te preocupas por ella.

—Y ¿si no me habla después de contarle todo?

—Al menos lo habrás intentado.

Sebastian trató de sonreírme, me dio palmadas amistosas en los hombros, pero sé de sobra que él está igual de nervioso que yo. Ha vuelto a ver a Kate después de haberle destrozado el corazón meses atrás. Conozco demasiado bien al tipo como para detectar aquella expresión de torpeza que tuvo al verla de nuevo.

¿Por qué Kate tuvo que conocerle a él también?

Vuelvo una vez más la vista a Kate, dispuesto a llamarle para que iniciáramos la conversación, pero me topé con sus ojos fijos en Sebastian. Él la veía también, intentó sonreírle, pero él solo logró una sonrisa torcida. Ella me notó así que desvió la vista a sus amigos, a pesar de eso, ella permaneció con las miradas furtivas para con Sebastian.

Sentí celos de ello. Los hice a un lado y me enfoqué en los hechos. Ella quería explicaciones por parte de mi amigo, deseaba quizá cerrar aquel ciclo que él dejó abierto meses atrás. Por lo que deduzco que él debe hablar primero con ella. Yo podría esperar.

—Hablarás primero con ella —le digo a Stan, quien niega rápidamente.

—Ni hablar, ella te está esperando a ti —ruedo los ojos.

—Sebastian, mírala —él hizo lo que pedí—. Ella te busca con la mirada. Quiere explicaciones de por qué actuaste así, ahora ve y dáselas.

Sebastian dudoso miró a Kate otra vez. Yo lo hice también y efectivamente Kate lo miraba. Stan el asintió.

—Kate —habló con voz baja pero audible— sé que quieres hablar con él primero, así que, adelante.

Ella nos mira a ambos, sus ojos verdosos se pasean de uno a otro. Asiente.

—Adelante Kate —indica Sebastian, señalando la puerta del apartamento.

—No se vayan de aquí —pide ella a sus amigos, ellos asienten y aprietan sus manos para darle ánimos.