Durante toda su estadía en la secundaria Beth era opacada y comparada con su hermana mayor, la "perfecta" Hellen Cooper, quien había causado sensación en el pasado debido a su gran inteligencia. Es por eso que sus ganas por entrar al periódico escol...
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Una vez que terminó la clase y pude salir huyendo del aula de matemática, le mandé un mensaje a mi mamá avisando que supuestamente me iba a ir a casa de Cassandra después de la escuela para arreglar algunas cosas de un proyecto de biología, pero en realidad todo solo se trataba de una mentira de mi parte, ya que lo que realmente iba a hacer era intentar mantener algún tipo de conversación con Tyler, hoy necesitaba sacarle información sobre el caso. Pero conseguir esto era más complicado de lo que parecía, Tyler no me conocía y, si no me equivocaba, nunca nos habíamos cruzado en la secundaria ni por casualidad, por lo que intentar hablar con él como si fuera su amiga era imposible, debía buscar otra manera de acercarme sin que pareciera raro. Además, no podía contar con la ayuda de Cassie en estos momentos, ya que si bien ella era bastante popular en la secundaria, no me ayudaría en nada que involucrara una posible expulsión y tampoco era como si quisiera involucrarla en mis problemas, iba a tener que encontrar la solución por mi propia cuenta. Si veía el lado positivo, esto iba a ser que resolver el caso fuera inclusive mucho más satisfactorio.
—Adiós, Cassie —me despedí con una sonrisa una vez que llegamos a la puerta de la secundaria.
—¿Ya te marchas? Espera un poco y con mi papá podemos llevarte hasta tu casa, hoy me viene a buscar en el auto —dijo haciendo un movimiento con sus hombros bastante raro, era su baile de la felicidad.
—No, descuida, tengo que hacer una parada en un lugar antes de ir —avisé intentando escucharme convincente, dudaba muchísimo que Cassandra intentara interrogarme al respecto.
—¿Segura? Ahí está mi papá en el coche, deja que le pregunte y seguro te podemos alcanzar aunque sea un par de cuadras, así no tienes que caminar —dijo amablemente, pero negué con la cabeza.
No calculé el hecho de que insistiera, no quería que supiera lo de Tyler, recién salíamos de una discusión por culpa de este tema y no tenía intenciones de pelearme con ella otra vez.
—No, está bien Cass, solo ve y yo me las arreglo —le aseguré, pero ella no lucía muy convencida, tal vez sospechaba lo que iba a hacer y por eso estaba tan insistente.
—Pero...
En lo único que podía pensar en estos momentos era en que mientras más se alargara esta discusión sin sentido, más lejos iba a estar Tyler.
—Tu padre debe estar cansado por esperar tanto, será mejor que vayas antes de que comience a tocar bocina como loco —le advertí intentando deshacerme de ella con sutileza.
—Luego escríbeme cómo te fue —pidió animadamente—. No te olvides, tonta.
Era obvio que no le iba a decir lo que en verdad iba a pasar, al menos por el momento, pero no comenté nada al respecto, solo me limite a asentir para darle la razón y ella se fue corriendo hacia el auto de su padre antes de que la castigara de por vida por hacerlo esperar tanto tiempo.
