BAD GIRL, GOOD LIPS. Forever.

Capítulo 1.

-¡Scott! ¡Por el amor al cielo, rápido! -grito, por milésima vez.

¿Cómo es posible que mi novio dure más arreglandose que yo? Bueno, es posible si es Scott.

Divisó a Scott bajando las escaleras, por fin. Acabamos de salir de clases de la universidad, y como es temprano quisimos salir a comer un rato. Invitamos a Abby pero, por más que insistimos no quiso ir, aun no se siente bien porque termino su relación con Ethan, así que no quise insistir más, pero le prometí que iría en la noche y haríamos algo de chicas.

Como salimos temprano, quisimos venir a su casa y darnos y baño, y luego salir. Para estar más frescos.

-Dios, casi que no sales. -me quejo mientras me levanto de la silla.

El suelta una risa.

-Lo siento, preciosa. -me dice, se acerca a mi y me da un casto beso en los labios. -Tengo que verme sexy para ti.

-Solo eres sexy para mi sin nada de ropa. -le susurro al oído coqueta.

El abre la boca en asombro y me mira divertida.

-Picarona, debemos salir antes de que no querramos salir nunca. -dice divertido.

Suelto una carcajada y lo llevo hacia la puerta para poder salir, el tiene razón.

Entramos al auto y antes de irnos el se inclina para darme un beso, yo gustosa lo recibo y disfruto. Amo esto, amo besarlo, es mi segunda actividad favorita para hacer con el, la primera es y no me da vergüenza admitirlo, tener sexo. Scott en la cama es indescriptible.

Lo amo, lo amo demasiado.

Es lo mejor que me ha podido pasar. Estoy jodidamente enamorada y me encanta.

Scott pone a andar el auto y en menos de media hora llegamos a un pequeño restaurante.

Salimos de el auto y nos sentamos en una de las mesas que están al aire libre. Llega una mesera y pedimos algo ligero para comer.

-Hermosa, ¿como esta Abby? -pregunta Scott.

Suelto un suspiro.

-Muy triste. -le respondo. -No he hablado con Ethan aun, pero por lo que me contó Abby, la situación no es buena.

Abby y Ethan no terminaron por desamor, ambos están locos el uno por el otro, así que estoy más que segura que volverán.

Scott hace una mueca y le da un trago a su vaso de agua.

-No es sano que este sola. -opina Scott.

-Lo se, prometí ir a su casa en la noche.

El resto de el tiempo que la pasamos en el restaurante fue excelente. Como todo el tiempo que paso con Scott.

Las cosas con el no pueden ir mejor, estamos muy a gusto. El me ama, yo lo amo, así que no hay nada que no pueda pedir. Tenemos nuestros momentos, como cualquier pareja, pero no nos ha impedido ser completamente felices.

Exactamente llevamos dos años juntos. Dos maravillosos años. Dos calientes años.

Scott sigue siendo mi mejor amigo, jamás lo dejo de ser.

Scott no se fue lejos a su universidad soñada, esta estudiando en la ciudad en una de las mejores universidades de aquí, y yo, con una beca estoy estudiando en otra que queda a treinta minutos de la de Scott. El estudia medicina y yo criminalistica.

En parte me siento culpable porque prácticamente por mi Scott no fue a la universidad de sus sueños, pero el me ha dicho una y otra vez que no se arrepiente, porque yo soy su más grande sueño. Sus palabras, no las mías.