XXIV

11.1K 712 70
                                    

"Tell me if you need a loving hand

To help you fall asleep tonight."

Cold Coffee - Ed Sheeran.

Sin duda la sonrisa de los padres de Stefan, al ver a el moreno junto a Lauren, era la que el propio moreno se imaginaba solo de pensar que los únicos juicios de sus padres serían "Son pareja." Lejos de la realidad, por supuesto.

El viaje en coche fue tenso, como una cazuela con agua hirviendo a punto de reventar porque la tapa está puesta, pero claro, ninguno de los dos podría decir nada al respecto. Eran una pareja falsa...

La casa de Stefan era amplia, pero Lauren no se fijó en aquello. La única parada que le interesaba a la chica de ojos verdes era la de la habitación donde dormiría. Estaba agotada física y mentalmente, y necesitaba una almohada y unas cuantas sábanas para dormir, donde fuese. El chico era mucho más atento de lo que Lauren creía, por lo que se dio cuenta de que a la chica lo que menos le apetecía era dar vueltas por la casa de sus padres junto a los guías de turismo, que en este caso eran sus padres.

Se libró en cuanto pudo de sus padres y la dirigió a su habitación, que era mucho más grande que la de su piso compartido en Miami.

— Puedes dormir en la cama, yo dormiré en el sofá. — Musitó el de rizos.

— Podemos dormir los dos en la cama, Stefan, el sofá será muy cómodo, pero seguro que tu cama lo es más. No hace falta que te sacrifiques por mí. — Y esas fueron las primeras palabras que soltó Lauren desde que había pisado la gran ciudad que era Nueva York.

Dejó la maleta a un lado y sacó su teléfono. Observó la foto del fondo del pantalla que tenía con Camila, acarició varias veces el rostro de su chica y bloqueó de nuevo el teléfono. Mientras movía las sábanas de la cama de Stefan, miró por la ventana y observó la gran ciudad a sus pies.

— ¿Por qué pudiendo estar aquí, acabaste en Miami? — Preguntó Lauren mirando al chico el cual dejó sus cosas sobre su amplia mesa de madera, la cual estaba rigurosamente recogida.

Stefan suspiro, y Lauren se sentó sobre la cama para mirar al chico el cual también se sentó.

— ¿Nunca has querido huir de todo y ser independiente? Desde que vivo aquí con mis padres, nunca había tenido ningún minuto para mi. Siempre era un, ayuda a tu padre con la empresa, ayúdame a mi a hacer mis cosas, pero nunca era un "Haz lo que quieras". Por eso me fui... Mis padres no saben que dejé la universidad de Miami para dedicarme única y exclusivamente a la música. Solo espero que si lo descubren no me maten... —

Lauren asintió. Al menos ya sabía qué no debía decir. Recostó su cuerpo hacia atrás y Stefan se levantó para encender su ordenador. Lauren echándole un ojo a la habitación se dio cuenta de que era parecida a la de Miami. Tenía muchos instrumentos por las paredes, un micrófono tapado por una especie de sábana y unos cuantos vinilos, y auriculares ordenados meticulosamente.

— Stef... —

Stefan giró la cabeza y miró a la chica de ojos verdes.

— Gracias... — Susurró recibiendo una pequeña sonrisa del chico que claramente decía "No pasa nada."

Lauren se abrazó a una de las dos almohadas de la amplia cama del chico y cerró los ojos. De nuevo, no pudo dormir hasta haber pensado un buen rato. Aquello le venía pasando desde que Camila abandonó su casa para irse a recorrer Europa... A Camila, también le ocurría aquello. Estaban conectadas a miles de kilómetros de distancia.

Pero las dos semanas pasaron. Y Camila volvió a casa, o eso creyó. Awesomeness se encargó de su maleta, la cual dejaría en su casa ya que hubo un pequeño retraso entre maletas y el avión, por lo que ella y Jack llegaron con apenas una mochila.

Save. [Camren]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora