Mi niñero preferido

Capitulo 12

Narra Julian:

No tenía ganas de salir con mis amigos, ni siquiera a tomar una cerveza. Pero eso cambió al enterarme que Orian saldría con Francisco al club.

Muchos considerarían esta reacción como un acto masoquista, el hecho de ir a ver a la chica que te gusta coquetear con otro que no seas tú y más cuando si ese otro no es nada más ni nada menos que tu amigo de hace años.

Podría decirse que esta situación me la cree y busqué yo mismo al no hablar como prometí con Oriana acerca del beso. No fue por cobardía ni nada por el estilo, me había surgido un problema familiar y tuve que marchar sin antes avisarle a Alex que me iría.

Cuando volví a la casa de Oriana acompañado de mi prima y el recibimiento de Oriana haya sido con una grata indiferencia, supe que aunque dijera y tratara de explicar lo sucedido, de nada me serviría porque Ori no tendría ganas de escucharme.

Traté de ignorar a la pareja que estaba cerca mío pero me fue imposible. Y tengo que confesar que ver a Francisco junto a mi chica me causó celos, y muchísimos. Desde mi lugar podía ver a Frann tratando de ganarse a Oriana a toda costa, pero amigo 'Yo no permitiría eso' y aunque Oriana no quiera escucharme, lo haría de todas formas, yo no voy a renunciar a mi chica.

Después que Francisco viniera a hacer acto de presencia en mi mesa, Oriana tuvó un accidente y tuvo que salir corriendo al baño.

Yo sin dudar, me levanté del asiento y me dirigí por el camino el cual JOriana había recorrido. Esta era mi posibilidad de hablar con ella a solas y complicarle el galanterio a Francisco.

Esperé a Oriana en el pasillo que dividia el baño entre hombres y mujeres. Muchas de las últimas trataron de ligar conmigo pero no lo consiguieron, lamentablemente para ellas, mi corazón tenía dueña aunque ella no quisiera hacerse cargo.

-Mierda- masculló alguien a mi costado. Era Oriana tratando de arreglar su vestido manchado.

-Te queda bien- su mirada palideció al verme allí, estaba seguro que no me esperaba en lo absoluto. Quiso pasar por mi lado y seguir ignorandome pero mi mano agarró fuerte su brazo haciendo que detenga su caminar.

-Tenemos que hablar- dije cerca de su rostro. Los ojos de ella miraban fijos a los míos.

-No hay de que hablar- respondió seca sin dejar de mirarme.

-Tenemos que hablar sobre el beso- respiré pesadamente.

-¿Del beso?- suspiró -Ese beso no fue nada. Superalo Julian- dijo firme zafandose de mi agarre y dejándome solo en el pasillo.

Reí por su reciente actitud ¿Realmente creyó que me creeria esa estupidez? Sé que ese beso significó algo para ella, sino no actuaría de forma tan infantil.

¿En serio cree que me alejaré de ella? Ay Oriana, que ilusa eres.

Francisco, preparate para perder. Desde ahora las cosas serán muy diferentes.

Robaré el corazón de Oriana cueste lo que cueste.