Narra Julian:
Comúnmente amo estar tirado mirando las estrellas por las noches, pero esta noche no logro amar eso. La cena que se había organizado para la novia de mi hermano había sido un desastre, ya que resultó ser que su novia no era nada más ni nada menos que la persona que me había echado de su casa días antes porque le hacía mal verme. En realidad no estoy enojado con ella ni nada por el estilo, porque en si no somos nada, pero si me siento desilusionado. Sé que ella no es ninguna ramera como la llamó mi padre, solo es que, todo esto es tan raro. Se supone que debería aborrecerla, pero me es imposible, cada vez la amo más y más. Cuando la vi allí sentada, tan incómoda, sentí pena por ella, y por eso mismo es que la ignoré o trate de hacerlo durante la cena. Sabía que si la miraba mucho o le hacía muchas preguntas se pondría mal, muy mal y no me sorprenderia que se pusiera a llorar. También lo hice por respeto a mi hermano, y para que no se crearan confusiones como su anterior novia, que se me tiró encima y como no caí en su trampa, fue y le contó a mi hermano que quise aprovecharme de ella en una fiesta. Mi hermano obviamente le creyó a ella y desde ese día me odia completamente. Traté de hablar con él de una y mil maneras, pero su carácter es tan difícil de llevar que la mayoría de veces tienen que separarlo de mi para que no me golpeé. También traté de hablar con Sabrina para que diga la verdad, pero ella se niega rotundamente porque le encanta ver a las personas peleadas.
Yo amo a mi hermano y debería decirle lo que en realidad pasa con Oriana, pero no quiero que aumente más razones para odiarme, ni tampoco quiero lastimar a Oriana.
Camine hasta mi habitación pero en la escalera me topé con mi hermano, que al parecer salía.
-Bruno, debemos hablar- dije una vez mas cerca de él. Quería arreglar todo de una vez y terminar con todos los malos entendidos.
-Vete a la mierda Julian- dijo al pasar y chocar mi hombro con el suyo -Ah Julian- se paró en seco una vez llegado a la puerta -Mantente alejado de Oriana, porque esta vez no te la perdonaré- cerró la puerta de un portazo. Pateé la puerta de mi habitación y la cerré haciendo un gran estruendo. No.podía soportar que mi hermano me odie por algo que en realidad no hice, necesitaba hablar con la ramera de Sabrina, y aunque la tuviera que traer de los pelos lo haría hablar.
Me tiré en la cama y tomé mi celular y escribí un mensaje a Sabrina para reunirnos lo antes posible, y al pasar por los contactos el nombre de Oriana apareció en mi pantalla. ¿Cómo estará? Seguramente fatal por todo lo ocurrido, y puedo apostar que siente miedo que hablé de ella y diga la verdad. Lo que no sabe es que nunca haría nada que la lastimara, por eso dije esas cosas de ella en la cena. La amaba, claro que la amaba y por ello mismo la protegeria. Pero ya no puedo mirarla con los mismos ojos, ella está con mi hermano y eso lo respetaria aunque me duela.
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Mi niñero preferido
Teen FictionEstaban enamorados. Se notaba por la forma en que se miraron entre si... como si tuvieran el secreto más maravilloso del mundo entre ellos...