Boys Next Door ● Luhan, Kai, Sehun.

CAPÍTULO 4

Luhan y yo estábamos en la parada de autobuses. Me contaba que este era su último año en la escuela. Sehun y Kai eran de mi edad pero Luhan era mayor y pronto se iría.

Eso me deprimió un poco, me molestaba que por creer que todos los chicos de la escuela eran malos había rechazado la idea de ser cercana a otras personas de diferentes rangos. Y ahora que encontraba a una persona que me agradaba se iba.

-Pero vendré regularmente, tengo que hacer prácticas aquí –explicó.

-¡Eso es genial! –exclamé emocionada pero creo que exageré un poco –bueno, supongo que es genial –él me miró de manera tierna -¿seguirás viviendo con los chicos?

-Siempre, bueno, hasta que ellos quieran –me sonrió.

-¿Son tus mejores amigos? –pregunté, quería conocer más sobre él.

-Sí, es que ellos siempre han estado para mí. Nos conocemos casi de toda la vida y nuestra amistad ha durado todo este tiempo –explicó –aunque soy chino he vivido en Corea siempre y a pesar de que soy mayor hemos sido siempre los tres y bueno, la novia de Kai.

-¿Jin Ah?

-Sí, ella es nuestra amiga de la infancia –su semblante cambió un poco –ella es nuestra amiga también.

-Es sorprendente, como es que Kai sigue con ella, si se conocen desde siempre –jamás había conocido una relación tan larga, creo que Kim Jong In tal vez podía ser un buen chico, si tan sólo no fuera tan gruñón.

-No es así –Luhan pasó su manos por detrás de su cabeza –Kai y Jin Ah apenas llevan saliendo dos años. Sólo éramos amigos pero supongo que se gustaban –parecía un poco incómodo al hablar de eso.

-Nunca he tenido amigos así, de tanto tiempo –cambié de platica –Sólo Min pero a ella la conocí al ingresar a la escuela.

-Se ven unidas.

-Sí, lo somos, ella es mi mejor amiga –él me asintió.

La verdad es que nunca me había importado mucho ese asunto de convivir con la gente, prefería estar sola, era mejor, así no habían decepciones ni malos momentos, porque nadie te afectaba.

Luhan iba a decir algo pero en ese instante una chica se acercó a nosotros. Parecía menor que yo, usaba lentes y venía con una coleta. Su mirada estaba baja y sólo se quedó ahí.

Miré a Luhan y este a mí, luego ambos regresamos la vista a la chica.

-Hola –hablé pero ella me ignoró. Luhan tomó su hombro haciendo que ella levantara la vista.

-¿Necesitas algo? –le preguntó, la chica extendió sus manos hacia él con una carta. ¿Era una confesión?

Miré de reojo a Luhan que la soltaba lentamente, esto era incómodo.

-Soy del rango 3 y de primer año. Cuando entré me gustaste al instante, por favor lee mis sentimientos –casi gritó y volvió a bajar la mirada.

Sonriendo Luhan le alzó la cabeza para que lo mirara, agarró su mano y la puso hacia abajo.

-Lo siento pero no puedo aceptar la carta –respondió más amable de costumbre.

-No... no estoy pidiendo que aceptes mis sentimientos... solo léelos y piénsalo.

-No hay nada que pensar, no puedo aceptarla –ella puso una cara de asombro, creo que yo estaba igual, jamás había presenciado una confesión, menos un rechazo.

Aunque Luhan estaba hablando de lo más lindo pude sentir como la chica lo sentía horrible.

-La escribí para ti, por favor –insistió, Luhan le negó lentamente.