Boys Next Door ● Luhan, Kai, Sehun.

CAPÍTULO 25

-Me siento como un estúpido –se quejó Sehun mientras cruzaba el árbol que unía la habitación de Kai con la mía.

-Perdiste en piedra, papel o tijera, no te puedes quejar –le recordó Kai.

-No es verdad, Linn perdió.

-Pero Linn le tiene miedo a ese árbol –Kai me miró de reojo, divertido. Y pues era verdad.

-Sólo lo hago por ti bebé –suspiró y continúo su camino.

La razón por la que Sehun cruzaba hacia mi casa en este momento era por mi ropa y alguna cosa que necesitara.

Kai me había ofrecido quedarme con ellos mientras se aplacaban las cosas con mi madre y pues inmediatamente dije que no.

Pero después me explicó que era la mejor opción. Mi madre necesitaba aclarase ella antes de enfrentarse conmigo.

Ambas teníamos problemas pero ella estaba salida un poco de control, estaba segura que si llegaba ahora y hablaba con ella no me tomaría en cuenta y seguiría con esa mala vida que no quería en mi mamá.

Además me recordó que su casa estaba a lado de la mía por si me sentía nerviosa y que sólo era para darle una lección a mi mamá, para que se despejara y supiera cuales eran las consecuencias de sus acciones.

El problema era que no tenía llave para entrar a mi casa y pues tocarle a mi mamá después de todo lo que le dijeron los chicos no era lo más inteligente.

Por eso Sehun estaba cruzando por mi cuarto, para abrirnos desde adentro. Esperaba que ella no estuviera en casa.

-¿Estás segura de querer vivir con nosotros? –preguntó Luhan sacándome de mis pensamientos.

-Supongo –bufé. No, no estaba segura.

Los quería y mucho pero era chicos y no terminaba de acostumbrarme. Era muy diferente dormir en la misma habitación sólo con Kai a vivir todos los días con los tres.

-Es decir, por mi está bien. Prefiero que andes cerca de nosotros pero no quiero que sea una incomodidad para ti.

-No es por eso. No quería terminar así con mi mamá. Estoy segura que cuando vea que no vuelvo a casa se enfurecerá y todo empeorará.

-Pero justo ahora no es seguro que estés con ella –recordó Kai –prácticamente nos tendrías las 24 horas en tu casa, por cualquier cosa.

Lo miré un poco dudosa.

-¿Tú crees que ella al ver que no esté entienda que estuvo mal? –Kai suspiró.

-Ella te ama Linn, es tu mamá. Alejada un tiempo lograras que ella recuerde que tú eres su hija y única familia, que no necesita a nadie más.

-Creo que está bien. Sólo un tiempo –él asintió.

-Además, tendrás una habitación para ti sola –agregó Luhan que se había mantenido en silencio un rato.

-O puedes dormir conmigo, no te lo impediré –habló Sehun. Estaba en la puerta de mi casa. Ya nos había abierto y no me había dado cuenta.

-Eso no pasará –respondió por mi Luhan y entrando a la casa.

Sólo lo seguimos mientras Sehun reía y pasaba un brazo por mi hombro.

-No tiene por qué enterarse –me susurró.

-Pero no pasará –me reí y me alejé hacia donde iban los chicos.

Por una enorme suerte no habían luces de mi mamá así que fuimos directo a mi habitación por mi ropa y alguna que otra cosa.