The Broken Omega (Terminada)

22 Presents

Capítulo 22

Narra Aiden

Saber que Noah sentía algo por mí fue lo mejor que me ha pasado, después de besarnos como por varios minutos bajamos del techo.   Al llegar a la habitación ambos nos cambiamos de ropa y nos acostamos a dormir, realmente eran como las 2:00 am, pero igual teníamos que dormir un poco.   Yo quería que Noah durmiera conmigo, me sentía listo para estar tan cerca de él, pero sentía algo de vergüenza, no quería pedirle como un niño pequeño que duerma conmigo.

—¿Noah" —pregunté, él me miró y sentí como mis mejillas se calentaron, debían estar muy rojas.

—¿Dime? —preguntó.

—Yo... quiero que duermas aquí, conmigo, por favor —dije en voz baja, él me miró por unos segundos y camino hacia la cama.

—Claro que si —respondió con una pacífica sonrisa.   Una vez que nos acostamos completamente él me abrazó con suavidad, hasta que me quede dormido.

Estaba en el sótano de los Fierce sentía frío como siempre y también miedo.  ¿Que estaba haciendo allí?  ¿Porque no estaba con Noah?.

Baje las gradas y me acerqué resignado a mi rincón, pero ahí había algo.   Estaba bajo las sábanas, lo que fuera era pequeño.    Tragué saliva y me acerqué a el bulto sobre el suelo, quite la sabana, era un niño rubio, estaba sucio y mal vestido.   Se despertó apenas me vio, estaba asustado, al igual que yo.

Me miró con temor y lagrimas. Era invierno y lo supe por el intenso frío.

—¿Qué haces aquí pequeño? —pregunté murmurando.

El miró y se levanto cojeando, camino hacia una minúscula ventana, subió a una silla y puso su minúsculo dedito en el vidrio.

Es Navidad —dije en voz baja, él se bajó de la silla y regreso a su rincón.   Se cubrió con las mantas rotas y sostuvo si tobillo con cuidado, estaba lastimado evidentemente.

Yo lo seguí y me agaché a su altura, lo mire tratando de pedir permiso para ver de donde provenía su dolor. El extendió su piernita, pero debajo de la tela había vendaje sucio y probablemente infectado, me dispuse a soltarlo para ver qué era, entonces escuche la voz de Noah gritar mi nombre a lo lejos.

—Aiden, Aiden, despierta —abrí los ojos y lo primero que vi fue la cara de Noah muy de cerca, me aleje por instinto y note que yo estaba temblando y llorando.

—¿Tuviste una pesadilla? —yo asentí aunque no fue así, simplemente fue un sueño extraño.

Noah me abrazo y yo me seque las lágrimas, unos diez minutos después ya todo estaba bien, me sentía relajado.

—Bien ahora que te has levantado temprano porque no te duchas para ir a ver los presentes de Navidad —yo me levante y fui al baño.

Narra Noah

Aiden despertó llorando en silencio, no se veía asustado, pero sus lágrimas corrían sin ningún control.   Lo desperté con cuidado y después de que se calmo, se fue a duchar al igual que yo.

—Noah —dijo Jayden abriendo mi puerta, pero para de golpe cuando vio que ya estaba listo.

—¿Qué haces despierto, son las 9am? —pregunto sorprendido.

—Aiden tuvo un mal sueño y estaba llorando, después de eso comenzamos a alistarnos —expliqué.

—Ya veo y ¿Dónde está Aiden?  Todavía tienes que encargarte de lo que le queda de heridas —dijo sentándose en mi cama.