Capitulo 19

5K 501 100
                                    


Sabía perfectamente que lo que había dicho Tiziano tenía más de mentira que de verdad y sabía que yo había hablado de más porque realmente había dolido todo lo que salió de su boca. Pero qué podía hacer, lo hecho, hecho está.

Rocco me llamó unos minutos después que llegué a casa. Me contó que las cosas no estaban bien y que al día siguiente se mudarían con Fidel y Lucy a otro lugar; le dije que si había algún problema o algo en lo que podía ayudarlo él podía avisarme, pero no me dijo nada de eso, a cambio pregunto si todo iba bien. Supongo que podía notar mi voz extraña o mi tono cortante, la verdad es que no me sentía para nada bien luego de lo que el idiota de Tiziano me había dicho.

Pero claro que no podía decirle eso, tampoco podía decirle que le había confesado que nos habíamos besado porque era evidente que Rocco era muy reservado con el tema de su sexualidad. Así que opté por cerrar la boca y le aseguré que todo iba bien.

–Así que... ¿Cómo va todo? –consultó Rocco mientras juntábamos nuestras cosas la última hora del viernes. Él me había preguntado si quería que estudiáramos juntos y yo había inventado que tenía algunas cosas que resolver con mi familia, una excusa tan tonta como las otras que le había dado esa semana. Me conformaba con saber que todo iba bien en su nueva casa y él no tenía problemas en responder a eso cada vez que indagaba.

–Bien.

–¿Así de bien?

–Ajá.

–Ya veo... -tomo mis cosas y me retiro sin esperarlo. El solo hecho de pensar que él podría haber sugerido que yo no le agradaba demasiado me oprimía el pecho, no quería confirmarlo. –Oye... –lo miro sobre mi hombro avanzar con rapidez hasta llegar a mi lado. –Con Fidel tenemos un acuerdo en el que yo puedo salir dos veces al mes, debo hacer buena letra ahora que estamos viviendo solos ¿Sabes?

–Oh... ¿Y ya hiciste planes con los muchachos? –quiero saber desinteresadamente y él guarda silencio hasta que llegamos a mi vehículo, lo miro y tiene la cabeza baja. –¿Y? ¿Hicieron planes?

–Pensaba en hacer algo contigo –susurra sin siquiera mirarme. Trago saliva, por supuesto que yo quería hacer algo con él, muchas cosas se cruzaban por mi cabeza, pero qué podía decirle, me dolía pensar que yo podía llegar a ser una molestia. –Pero resulta que no pareces tener interés en pasar tiempo conmigo... ¿Es por...? –se detiene y me mira con sus mejillas coloradas –¿Es por el beso que te di?

–¿Qué? –consulto con sorpresa.

–Desde ese día tú estás tan raro que yo... lo lamento, si tú estabas jugando, yo

–Rocco, métete al vehículo –ordeno apretando mis manos. Quería besarlo en ese momento, pero había muchos testigos y no quería que se metiera en problemas.

Él obedeció inmediatamente y pronto estuvimos en movimiento. No sé cuánto maneje, ni hacia dónde, mi cabeza estaba en cualquier lugar menos en esa ruta. ¿Rocco realmente creía que yo me estaba comportando como un idiota porque él había iniciado un beso? Dios... las cosas no podían estar peor.

–¿Dónde vamos? –interrumpe en un susurro. Lo miro de reojo y me encojo de hombros aparcando de inmediato y prendiendo un cigarrillo. –¿Dónde estamos?

–No lo sé.

–¿Qué quieres que hagamos?

–No me preguntes algo que no quieres que te responda –me apresuro a decir completamente en serio. De reojo observé que también se prendió un cigarrillo. –El beso que me diste fue algo lindo.

–Cierra la boca –me reta descendiendo del vehículo. Lo sigo, por supuesto, y lo alcanzo en el bosque; a lo lejos se podía oír el río. No paramos hasta llegar a una playa que seguramente nunca nadie la había visitado, no parecía muy fácil de llegar y seguramente estábamos bastante lejos de la ciudad.

1. Permanece a mi ladoWhere stories live. Discover now