Miranda miro todo su arrededor, era justo parecido a aquella vez en la que se entrego a Ricardo la primera vez, a excepción de la mesa...
Miranda: que es todo esto? -dijo sorprendía-
Ricardo: quiero que recordemos aquella noche...
Miranda: mi amor, gracias -dijo y lo beso, un beso tan dulce, tan lleno de amor, paso sus manos por el cuello de Ricardo y las enredo en su cabello. Ricardo pidió acceso para explorar con su lengua la boca de Miranda y ella se lo permitió al instante. Exploro cada rincón, percibiendo, degustando su sabor...
Ricardo: estas segura? -preguntó cuando dejo de besarla- si no quieres nos quedamos aquí y vemos el amanecer -dijo tiernamente mientras la extrechaba más a su cuerpo-
Miranda: está bien -lo besa- quiero ver el amanecer contigo, pero también quiero que me ames, que me ames para toda la vida
Ricardo: para siempre...
Se fundieron en un beso, esta vez menos delicado, con pasión, con deseó, ambos se extrañaban y la delicadeza no estaba en sus planes, pero Ricardo si quería hacerlo, si quería hacerla sentir con cada caricia, que se sienta plena, quería borrar de su mente todos esos feos recuerdo que el había provocado
Ricardo: te amo Miranda -dijo con la respiración agitada-
Miranda en cambio se quedo callada y empezó a soltar los botones de su camisa, ella quería sentirse y verse segura al igual quería lo mismo para Ricardo, que no tuviera miedo de tocarla, acaricio su pecho con la yema de sus dedos y luego dejo un reguero de besos
Ricardo sentía cada caricia de Miranda mientras iba bajando el cierre de su vestido
Miro como el pecho de Miranda subía y bajaba y eso encendió todo su cuerpo, la tomo por el cuello y la volvió a besar de una forma ansiosa, sensual, quería encargarse el de que mirada tuviera el mejor orgasmo de toda su vida, quería recuperar nuevamente toda su confianza siendo delicado, quería ir lento, disfrutar su piel, su aroma, su cuerpo sin rapidez
Empezaron a caminar hasta la cama sin dejar de besarse en ningún momento, la extrañaba tanto. Ricardo abandonó su boca en cuanto sintió que ella ya tenía su espalda sobre la cama, para empezar a besas su cuello, con tanta calma que estaba empezando a ser abrumador para Miranda, hizo que está elevara un poco su espalda para soltar su sujetado, lo término de sacar de un tirón y empezó a besar el camino entre sus senos.
Rodaba su pezón con su lengua de una manera vehemente mientras que con su otra mano masajeaba su otro seno.
Miranda estaba empezando a desesperarse con tanta delicadeza, pero se sentía tan feliz, plena, ese si era el Ricardo que conoció desde el primer día, su Ricardo, su amor...
Ricardo abandonó su senos y fue bajando lentamente, beso nuevamente el camino entre sus senos y así hasta llegar a su vientre, su pelvis, introdujo el dedo indise por el elástico de sus bragas jugueteando con ellas moviéndola de un lado a otro, Miranda en su desespero pegó un pequeño gritito de frutracion y Ricardo rio con aquello, quitó sus bragas rápidamente besando sus piernas, sus muslo, hasta que llego a ese valle sensible dispuesto a brindarle un enorme placer
Cuando Miranda sintió como Ricardo jugueteaba con su manos en su intimidad arqueó la espalda apretando las sábanas, Ricardo aún tenía su pantalón puesto y ella ya casi tendría su primer orgasmo de la noche
Miranda jadeó, suspiro con fuerza evitado un grito atroz al tener un increíble orgasmo. El continuo besando su vientres mientras hacía todas las maneobras para quitar su pantalo, estaban ansioso, necesitaba sentirla, necesitaba estar dentro de ella o si no enloquecería en cualquier momento.
Con dificultad quitó sus pantalones juntó a sus bóxer, estaba tan desesperado que estuvo a punto de caerse
Miranda apenas se había recuperado de aquel gran orgasmo cuando sintió una oleada de placer al tener a Ricardo entre sus muslo jugueteando con su erección en su intimidad, ni siquiera supo en que momento el había llegado hasta ahí
Miranda: hazlo ri..cardo -chillo deseperada-
Con todo gusto el hizo caso, fue entrando lentamente en ella, sin prisa, lo que menos quería era causarle daño otra vez. Miranda apretaba con fuerza las sábanas mientras hundía aún más su cabeza sobre la almohada
Ricardo: te Amo! Te amo! Te amo! -dijo cuando había entrado por completo en ella
Empezó con movimientos lentos, sintiéndose caer en un abismo, con ansias y despertó aumentó la velocidad de sus envestida, como pudo ser tan estúpido de perderse de esa increíble sensación por tanto tiempo, por su terquedad, por no confiar en el amor
Ambos llegaron al clímax, Ricardo se dejo caer sobre ella cuando sintió los espasmos por tanto placer, ambos se quedaron en silencio, el seguía sobre ella pero a Miranda no le resultaba molesto, el aún seguía dentro de ella y ninguno dijo nada; sólo se dedicaron a sentir, Ricardo tenía hundida su cabeza en su cuello mientras acariciaba su cabello, Miranda sin embargo sólo acariciaba su espalda, desde su trasero, hasta sus hombros...
Andrea: gracias -dijo luego de aquel largo silencio-
Ricardo empezó a recomponerse saliendo de ella, ambos gruñeron por la sensación de abandono que sentían, se aparto de ella e hizo que recostara su cabeza en su pecho. Miranda acariciaba ahora su pecho sin decir nada. Ricardo besaba su cabeza mientras acariciaba sus hombro...
Ricardo: las gracias debo yo dártelas a ti -dijo luego de aquel gran silencio- gracias por volver a confiar en mi, gracias por existir y llegar a mi vida, gracias por perdonarme y volver a confiar en mi amor...
••••••••••••••••••••••••••••••••••••
Hola, lamentó no haber publicado ayer que era cuando le correspondía a esta historia, pero mis sábados son algo intenso además de que pase todooooooo el día con el teléfono apagado 😒 pero acá esta, en un ratito público de mi otra historias, espero que les haya gustado 😊😁
YOU ARE READING
Confía En el Amor
RandomLa típica chica inocente e ingenua que toda la vida a creído que el amor todo lo sufre, pero la vida poco a poco le va mostrando que no es así de la peor manera posible, una chica que con el tiempo empieza a creer que llego a este mundo a sufrir, to...