Cold. Nuevas Especies. Libro 1

EPÍLOGO

Narrado por Cold

Siempre pensé que la vida era un solo color. Que las casa no corrian mas alla de los cotidiano o lo que se nos obligo a creer. Que solo había oscuridad en ella y que lo demás solo eran sueños que nunca deberíamos soñar. Entonces llegó ella. Y su olor hipnotizó mis sentido.

Cuando tus piernas dejen de ser lo que solían ser...

La veo salir del agua con esfuerzo. Aun no puedo creer que insista en seguir nadando cada mañana. Me esfuerzo por no reírme de su pelea con la toalla que apenas y cubre parte de su cuerpo. Esta hermosa. Más hermosa de lo que alguna vez la he visto. Cada mañana es como un milagro verla recostada a mi lado.

Y ya no pueda hacer que te enamores de mi...

En ocasiones tengo pesadillas con mis manos en su cuello y me aterro al verme a mí mismo perdido en un mundo donde tu olor no llene mis días. Uno en el que cada vez quiera dar lo mejor de mi solo porque tu existes.

¿Tu boca seguirá recordando el sabor de mi amor?...

Me encanta verle hablar con su hermano o con las demás hembras. Verle sonreír de esa forma tan distintas en la que me sonríe a mi. De esa forma en la que pienso que aun entre tanta gente..., me llevas siempre contigo y eso me hace sonreir a mi también.

¿Tus ojos seguirán sonriendo desde tus mejillas?...

Es todo tan distintos cuando tu sonrisa es para mi. El rojez en tu rostro. La forma en que tus labios rojos me saborean como un fantasma mientras estoy lejos.

Cariño, te seguiré amando hasta que tenga 70 años... Cariño, mi corazón te seguirá amando como ahora a los 23...

Te ame en el instantes en que mi piel toco la tuya y tu olor llegó a mis fosas nasales. No puedes pedir nada mas hermoso que esto y nunca lo pedí.

Y estoy pensando cómo las personas se enamoran de forma tan mística... y quizás sea por solo tocar sus manos...

Al final logras con dificultad secarse por completa mientras te observo desde la ventana. Tus paso son patosos e inseguros. Quiero ir tras de ti y llevarte en brazos hasta que el tiempo pase y vuelva a empezar. Bajo las escaleras y te veo luchando con un trozo de carne que posiblemente termine de un color carbón intenso. Te abrazo y te retiras de enfrente a la estufa ya que tu eres un peligro para ambas. Sonríes y es como si se abriera el cielo. Sabes que no puedo evitar protegerte.

Cada dia me enamoro mas de ti... y quiero decirte que aun estoy...

Te veo devorar la carne con rapidez y rio. Tu te detienes y tus ojos se llenan de lágrimas. Quisiera golpearme porque se que te he lastimado. Me levanto y te acuno en mis brazos y beso tu rostro con ternura. Te digo que eres lo mas hermoso que hay en mi vida y vuelve a sonreír. Ahora me estas besando y no puedo evitar que mi cuerpo reaccione al tuyo. Es como respirar. No lo puedo evitar. Esos momentos en los que me entierro en ti y arañas mi piel entre un gemido y otro. En ocasiones quisiera tenerte fundida a mi por siempre... entonces ocurre... ese instante, ese milagro cuando tu cuerpo cede al mio, es cuando te abrazo y se que no hay lugar en el que me gustaría estar mas que en este.

Así que cariño... llévame entre tus labios amorosos... dejame un beso bajo la luz de miles de estrellas... coloca tu cabeza en mi corazón latente...

Me encanta esas ocasiones cuando siento que no quieres soltarme. Qué necesitas tanto como yo tenerme atado a tu vida... esos que son tan frecuentes. Te siento respirar sobre mi pecho, cierro los ojos y dejo que mis sueños vayan al compás de la música que resuena de tu respiración y mi corazón latiendo. Se que el solo late por ti.