Secreto Sucio → j.b (+16)

veintiocho

"...Si entiendes lo que digo."

Narrador Omnisciente

Dejando escapar una respiración profunda, Kylie sintió las miradas en ella mientras lentamente caminaba por el pasillo, los susurros eran apenas audibles y sin embargo el sonido le consumió la mente, sabiendo que en cuestión de días se habría convertido en el tema de todas las conversaciones. Había corrido la voz como reguero de pólvora, la risa de incredulidad y los rumores exagerados era a lo que se podía enfrentar, ni una sola alma entendía por qué lo hizo, culpándola de todo, aunque sabían Justin era el adulto en la situación, él tenía que ponerle fin a ésto.

Incluso Amber se había puesto del lado de los que estaban juzgando, ahora que sabía la magnitud de la situación, cómo Samantha se había sentido completamente desgarrada.

Kylie no tenía a nadie.

Todo el mundo estaba en contra de ella.

Y no ayudó que al salir de su dormitorio por la mañana, fue recibida con un anillo de compromiso que se le arrojó, golpeando en la cara, seguido de las palabras hostiles que se pueden decir en ésta situación.

-Ahi tienes, ya que te gusta coger lo que es mío.-Habia dicho Samantha llorando.

-Tienes que estar bromeando.-Dijo Jacinta entre dientes mientras se giraba en la esquina, miró a Kylie que estaba junto a su taquilla.-¡Kylie!-Gritó ella, cogiendo un bien ritmo al andar hacia ella.

Tragando saliva, Kylie cautelosamente cerró la puerta de su casillero, sabiendo que si Jacinta no la despreciaba lo suficiente antes, ella definitivamente lo haría ahora, después de enterarse.-Acabas de destruir una relación, arruinaste por completo la relación que mi hermano tenía con nuestros padres, pero tu estás aquí, en la escuela, como si nada hubiera sucedido.-Dijo Jaz levantando la voz, y por supuesto atrayendo la atención de todo el mundo en el pasillo.-¿Estás completamente loca? O, ¿realmente crees que no has hecho nada malo?-Su enfado era evidente.

Sosteniendo sus libros cerca de su pecho, Kylie frunció los labios.-Que yo sepa, que toda la escuela sepa mis asuntos no es motivo para que deje de recibir una educación.-Su intención no era ser sarcástica, sin embargo, sus palabras salieron de su boca, de tal manera que tenía los ojos al instante en ella.

-¿Tus asuntos?-Jacinta me miró asombrada, se rió en estado de shock.-Tu asunto consiste en follarte a mi hermano. El hecho de que mis padres no estén de acuerdo con lo que ha hecho, ha causado que él les deje de hablar. Él está pagando también y tu, ¿afirmas que es sólo tu asunto?-Sintiendo su cuerpo tenso, Kylie dio un paso hacia atrás.-Dios, vosotros dos realmente no tenéis cerebro, incluso él, pero...Eres repugnante. No tienes respeto por tí misma, y claramente no tienes moral. Me tenéis enferma.

Por un momento, Jacinta pareció darse cuenta que sus opiniones no significaban nada para Kylie. Nunca han tenido una amistad, ¿por qué iba a preocuparse por la opinión de alguien a quien odiaba?

-Tu no tienes cerebro por pensar que tu opinión me importa lo más mínimo.-Se hizo a un lado, al darse cuenta de que si iba a intentar terminar el día, tenía que al menos mantenerse firme.

Jacinta necesitaba encontrar una salida para la ira que estaba sintiendo, una ira que sólo existía porque había estado sentada en la casa durante los últimos días, escuchando a sus padres discutir sobre lo que había hecho Justin.-Manténte alejada de mi hermano, Kylie.-Levantó la mano, apretando los dedos juntos antes de poner una cantidad innumerables de fuerza en la bofetada que impactó en la mejilla pálida de Kylie.-Ya has causado más problemas de los que vales la pena, y tarde o temprano te darás cuenta de eso.