Capítulo 71

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—Todo Lo Bueno Se Acaba—

Eran las dos de la madrugada, y Hesper había estado ahí hablando con su abuelo, conociéndolo mejor tal y como era él, y dejando que él la conociese a ella. Le contó cosas y anécdotas, y Hesper le contó acerca de los profesores con más detalle, y también aprovechó para despotricar contra Denaux, quien viendo el rostro de su abuelo mientras hablaban, le dio a entender que ese hombre no era fiable en absoluto. Ni siquiera un poquitín.

—Hesper, te lo diré y te lo repetiré: no te acerques a Denaux. Sé que tiene preferencias, pero créeme, esas preferencias van más allá de lo estudiantil. No lo parece, pero en estos momentos el Ministerio es el cuerpo menos inestable en el Mundo Mágico, y Denaux no es de los que se posicionan en un bando solo por hacer el bien. Él va con los ganadores, Hesper, y por el momento, Voldemort está ganando. Os tiene a vosotros tres en su punto de mira y os cambió el examen porque está evaluándoos de otra forma que le de a entender a él el nivel de vuestra capacidad mágica. —Julius miró el reloj de muñeca de la mano de Hesper que tenía entre las suyas, distrayéndose.— Vosotros lucharéis en esta guerra, Hesper. Vosotros sois la generación que va a luchar junto con los que os protejamos las espaldas. Denaux sabe eso con certeza, y posiblemente intente inclinaros al bando de Lord Voldemort. Evítalo, Hesper, evítalo por favor. Tú no eres igual que el chico que defendiste o que el chico que lee las Artes Oscuras. Tú eres completamente diferente. Eres lo que él quiere.

Hesper suspiró mirando hacia la mano de su abuelo, sin saber que pensar. En esos últimos días solo había llorado sin más, siendo que ella nunca lloraba. Jamás. Pero Gus era un caso diferente, era algo totalmente diferente a cualquiera. Y Lily empezaba a serlo también, Hesper le había cogido un cariño enorme a su mejor amiga, y después de lo que hubo sucedido esa tarde, para ella todo se acabó. Intentó disculparse con Gus, pero éste la evitó como si fuera la peste. Y la frase que repetía una y otra vez le resonó en la cabeza aumentada de volumen: «Todo lo bueno se acaba.»

—No me acercaré a ese chalado. —Dijo Hesper con voz neutra, para alguien como gente fuera de su círculo íntimo inexistente ya, porque todos su componentes se habían suelto, excepto Remus, él aún pendía de un hilo, y ella no sabía si simplemente ayudarlo a caer o dejarlo ahí colgando. Él no le había hecho nada, tampoco la había ayudado, aunque no le culpaba. Ella había sido reacia a dejar que la ayudasen, y alguien que no se dejaba ayudar, no se podía hacer nada con él.

En esa voz, que aunque Hesper sabía camuflar de maravilla, Julius pudo fijarse con claridad en la tristeza que la embargaba. Hesper le recordaba a él, a sus tiempos como estudiante. También tuvo un mejor amigo, uno con el que vivió toda su infancia y casi toda su adolescencia, hasta el año definitivo, donde todo acabó entre ellos por una pelea que se montó de algo sin sentido. De algo que su mejor amigo no comprendió, como le sucedía en ese momento a su nieta. Él no quería que Hesper fuera por su camino. Intentaba destrozar ese camino para que ni ella ni nadie lo consiguiera tomar. Y por el momento, veía a Hesper en la mitad ya, y la cosa se le estaba haciendo difícil siendo Jude, pero en ese momento que sabía que la tenía en cuerpo y alma presente y no solo en otras, la ayudaría. La apartaría de ese camino de un placaje si era necesario.

—No estés triste por ellos, por simples personas que no te entienden. Hesper, siempre te he dicho que eres especial, y eso ellos no lo ven y es lo que envidian. Ves el mundo con otra lente, con una más clara. No merecen que llores por ellos, no merecen la atención que reciben por tu parte. Sí, te decían que eras superior, y realmente lo eres. No te rebajaste al nivel de ver como humillaban a alguien y tu quedarte mirando. Lo ayudaste, Hesper. Lo defendiste cuando nadie más salió en su defensa. Él está agradecido contigo, ese chico está más que agradecido contigo aunque no lo demuestre. —Le dijo él con ternura al ver que esa niña era más inocente que él a su edad. Que Imogen había hecho un excelente trabajo criándola.— Siéntete orgullosa de lo que has hecho, siéntete orgullosa de saber que sí eres superior a ellos. Afróntalos. Afrontémoslos. Yo te ayudaré.

Oblivion |Época De Los Merodeadores|Where stories live. Discover now