Niñero ❀Dipwill❀

;Once❈

Esa misma noche, Will iba a estrenar la nueva habitación.

Dipper estaba ahí, viendo de reojo al menor mientras que este solo sonreía.

— ¿Estas bien aquí? —Pregunto por ultima vez el castaño.

— ¡Sí! Esto es mejor que allá abajo...

— Que bueno que te guste... Bien, que descanses. —Se dio la media vuelta apunto de salir de la habitación.

— ¡Espere! —Dipper se detuvo y volteo a verlo con una ceja alzada.

— ¿Qué ocurre...?

— ¿Puede leerme un cuento? —Pregunto con un puchero. No hubo respuesta alguna, pues el Gleeful había volteado hacía la salida.— ¡Por favor~!

— ¡Agh, bien! —Salió del cierto, pero pocos segundos después regreso con el diario.

Dipper se sentó a un lado de Will, abriendo el diario —en cualquier página al azar— y comenzar a leer.

— ¿Qué es eso? —Preguntó con curiosidad el menor.

— Un libro con muchos cuentos y secretos. —Respondió mientras aún buscaba que página seria recomendable.— ¡Aja! ¿Qué te parece esta? —Le mostró al menor la pagina, la cual hablaba sobre cómo invocar hadas.

Will lo miro serio mientras le sacaba la lengua al mayor y tomaba el libro y lo aventaba.

— ¡Oye! —Exclamó molesto el castaño.

— ¡Qué tal este! —El menor saco un pequeño libro de lectura extendiéndoselo al castaño, este lo tomo y observo el librito, el cual se titulaba como "Hansel y Gretel."

— ¿Este? —Cuestiono con duda el mayor viendo de reojo al menor. Will sólo asintió.— Bien... Había una vez...

Paso un poco de tiempo para que la historia casi terminara, Will ya estaba entrecerrando sus ojos, su cansancio se notaba.

— Los dos hermanos volvieron a casa con oro y joyas para su padre, y vivieron... Felices, para siempre... —Al terminar de leer, Dipper se quedo estático.

Un recuerdo paso por su mente.

— ¡Bien, es todo! —Exclamó despertando un poco al peliazul, cerrando el libro y dejándolo a un lado, mientras se paraba y se dirigía a su habitación.

— ¡P-pero...!

— ¿Qué? —Preguntó con cierto desprecio, con una gran mueca en cara viéndolo a ver.— ¡¿Qué quieres?!

— ... N-nada... —Respondió.

Dipper salio del cuarto del menor, pasando una mano en su rostro.
Sentía un horrible nudo en la garganta, pero tenía que abstenerse.

Dio un pesado suspiro y se encerró en su cuarto.

Mientras Will se quedo sentado en la cama, con algunas lágrimas en cara.

Se levantó de la cama, tomo su peluche, mochila con poca ropa que tenía ahí y una manta y bajo las escaleras.

Fue a la cocina y agarro algo de alimento y lo hecho en su pequeña mochila.

Fijo su vista por última vez a las escaleras para vigilar que nadie lo viera.

Y así salió de la mansión.