Capitulo 20

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-¡Estoy en la función! - Jeremy corría hacia mi completamente ilusionado. -¡Mila! ¡Mila! -se me lanzó encima y me abrazó atrayendo las miradas de los alumnos que andaban por los corredores.

-¿Te has presentado? - pregunté cuando me soltó.

-Leo, mi leo... - suspiró - me ha hecho presentarme. ¡Estoy en la función! ¡Hacian la prueba a los chicos hoy! -me miró de arriba a abajo - ¿Vas a presentarte tú? Es esta tarde la de las chicas y... No he oído que digas nada de presentarte. - sonrió - ¿No sería maravilloso que participaramos juntos?

-No sé si quiero cantar... - dije. - Alice me medio pidió que bailase con los de la clase.

-No puedes hacer eso. Es pecado. - contestó firme. - Tú tienes que cantar.

-No lo sé... Además igual me presento y no me eligen.

-¿Qué tontería es esa? - preguntó sorprendido. - Ah! Ahi esta Leo! - me dio un besó en la mejilla y salió corriendo detrás de su pelirojo.

Por la tarde, al acabar historia, empecé a caminar hacia el salón de actos. No quería presentarme, solo observar las pruebas, ver quien se presentaba. Cuando abrí la puerta me encontré con una cola de chicas que querían audicionar. Vi que Ally me sonreía desde su posición y le devolví la sonrisa. Dinah estaba con ella y al verme también me saludo de algun modo. Me miraron las dos, interrogativas y yo negué con la cabeza. No quería formar parte de la función. Ellas se encogieron de hombros, vi como les brillaban los ojos emocionadas por todo lo que estaba sucediendo. Me escondí entre las butacas, a observar como subían chicas al escenario para la prueba.

-Siguiente... - dijo el director de la anterior función, que supuse que era el mismo que iba a dirigir esta. - Uh, Normani... - vi como Normani se dirigía al escenario sonriente, para ponerse frente al director - Okai, estas dentro. No hace falta que cantes. - entonces se giró a la cola y señalo a Ally y a Dinah - ¿Sois las coristas de Camila y Lauren? - preguntó refiriendose obviamente a la anterior función. Dinah y Ally asintieron. - Okai, vosotras también estais en la función. Y tú - señalo a una chica del final de la cola - Tú cantaste el año pasado, te recuerdo... - la niña sorió - Tengo papel para vosotras cuatro. - tachó algo en la lista. - Vale, quedan tres plazas y las suplentes.

-Señor Lewis - lo llamó Normani - Camila está ahí... - y entonces todos se giraron a verme, maldije a Normani con toda mi alma. Ella ni se dio cuenta.

-Oh, maravilloso - me miró, entre los asientos del publico. - ¿Qué hace ahí escondida?

-Yo... Sólo... He venido a mirar.- contesté completamente abrumada por tantos ojos puestos en mi.

-Tengo el papel perfecto para ti... - empezó el director. - Se llama María, de origen humilde, de sangre latina, pocos medios pero con grandes sueños... Es la protagonista - le brillaban los ojos, como si lo estuviese viendo. - Y huye de su país en busca de mejores condiciones de vida, lucha contra los obstaculos y... - me observó - ¿Y puedo poner tú nombre a ese personaje?

El silencio fue absoluto. Ally y Dinah me sonreían, intentando animarme a decir que sí. El resto de chicas de la cola me observaban, casi con admiración en sus ojos. Normani seguía en el escenario, también observandome. ¿le molestaría que yo tuviese el papel protagonista? El director me inquería con la mirada, con una sonrisa de esperanza. Supongo que nunca he sido buena actuando bajo presión y nunca me ha gustado defraudar a la gente.

-Supongo... - me acalré la garganta - Digo, sí. Sería genial eso.


Volví a mi casa pensando en la función. No quería participar, me hacía recordar las tardes que pasé ensayando con Lauren y esta ni siquiera se había presentado a la audición. Estaba un poco amargada con la situación y no sabía como contarle a Alices que iba a cantar en el musical y que nada de baile. Supuse que lo entendería, yo no soy bailarina. Caminaba por mi calle cuando vi que alguien estaba apoyado en la pared de mi edificio.

-Se te da bien aparecer por sorpresa - dije, sacando las llaves.

-¿Como tardaste tanto en volver a tu casa? - me preguntó Lauren.

-Fui a ver las audiciones para la función. Tenía curiosidad por ver quién se presentaba...

-Yo no me presenté - sonrió.

-Eh, lo sé, vengo de ahí... - dije medio confundida con sus palabras.

-Ah, sí. - me miraba y esa era la señal de que había algo luchando por salir de su interior.

-¿Qué sucede? - pregunté.

-George es un capullo. - declaró - Lo siento por lo que te dijo ayer...

-¿Quien te lo ha contado? - la observé, y pensé bien lo que iba a decir - ¿Quieres pasar?

-No... No. - contestó rapido. - Sólo quería pedirte perdón, me enteré porque estaba riendose con el idiota de su amigo. Siento lo que te dijo y lo que le dijo a tu amigo. - pude ver que hablaba sinceramente. - yo solo... Es un capullo. - repitió.

Lauren se pasó una mano por el pelo, aún apoyada en mi pared, de lado. Jugaba con un mechero pasandolo entre sus dedos, con agilidad. Me miraba, inquiriendo una respuesta, algo que le demostrara que aceptaba sus disculpas. Me pregunté por qué Lauren seguía con ese chico. Sentía que no tenían nada que ver, a pesar de lo que dijese Dinah, no creía que Lauren fuera mala persona. Pero no entendía por qué actuaba del modo en que lo hacía.

-Tú no hiciste nada - le dije finalmente - como tú dices, el capullo es él.

-Y yo. - respondió.

-¿y tú qué?

-También lo soy. - se miró las uñas, perfectamente arregladas. - Y mucho. - sus ojos se posaron en mí, sentí que algo conectaba entre las dos, en ese momento. - Lo siento, te juro que nunca quise... Yo sólo... Mierda. - se le cayó el mechero que tenía entre las manos. - Estoy idiota. - se agachó a recogerlo, y en lugar de levantarse, decidió sentarse en el suelo, con la espalda en la pared.

-¿Seguro que no quieres pasar? - me agaché a su lado. - No parece que estes bien...

-No lo estoy. Estoy intentando hacer las cosas bien, ¿Sabes? - suspiró - Parece que no, pero lo intento. No quiero hacerte daño. No quiero romperte el corazón.

-¿Te han roto a ti el corazón? - pregunté, sin saber muy bien por qué.

- Yo no tengo de eso... - se levantó de nuevo, y yo seguí su movimiento, poniendome de pie de nuevo, con ella. - Nunca he tenido.

La observé bien, me lo pensé demasiado, y aún así no lo pensé lo suficiente. Apoyé una mano a su lado en la pared, evitando que escapara de mi. Mi otra mano tomó su rostro y dos segundos después mis labios estaban pegados a los suyos. Lejos de alejarme, Lauren me atrajó a ella y me tomó entre sus brazos. Separé sus labios con los mios, y profundice ese beso que iba a servirme de argumento a continuación. Pasé mis manos por su cabello y juegué con mis dedos entrelazandolos a sus mechones mientras su lengua se encontraba con la mia. Note su respiración agitarse al mismo tiempo que me atraía más y nuestros cuerpos se juntaban. Aún através de la ropa notaba sus dedos fríos sobre mi cintura, mordí sus labios probocando un gemido por su parte. Pocos segundos después me aparté, para observarla, casi sin aliento. Apoyé mi cabeza en su pecho y ella tardó unos instantes en abarazarme. Aún hoy dudo que entendiese lo que estaba sucediendo.

-Camila... - casi sonó como si me estuviera riñendo. No iba a dejar que ahora me sermoneara por besarla, porque a la vista estaba que ella lo estaba deseando.

-Para no existir, tú corazón late muy fuerte - susurré, regalandole un ultimo beso en los labios y dirigiendome a mi portal de nuevo - Has perdido la oportunidad de entrar, lo siento.

Y la dejé ahí, con esa expresión confundida. Ni sonrisas extrañas ni frases filosoficas sobre fantasmas. Quedó de pie, enfrente de mi puerta, con los brazos a sus dos lados y sus ojitos tristes. Sé que ella estaba tan perdida como yo lo había estado con su juego, y aún así sentí que tenía mi objetivo más cerca que nunca. Iba a conseguir borrar del mapa a George y a descubrir qué era lo que atormentaba tanto a Lauren. No hay nada más interesante que una persona con historia, ni tampoco nada más complicado.

One Wish [Camren fic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora