Miradas Seductoras (Benedict Cumberbatch) [Completada]

Reunión familiar: Parte II

- Ahora la llevaré a casa señorita.

Dice Benedict a la chica que aún permanecía muda, como si no perteneciese a este mundo. Pero después ella reacciona y le responde.

- Gracias señor Cumberbatch.

- Lindura. Ya no tienes que decirme señor. Recuerda que ya te has convertido en mi novia. —La mira directamente a sus bellos ojos grises haciéndola intimidarse aún más.

- ¡Oh!... disculpe, por un momento se me había olvidado.

- Descuide, pero si no te sientes cómoda llamándome por mi nombre lo respetaré.

La joven asiente con la mirada. Entonces Benedict la toma de la mano y se dirige a los allí presentes.

- Me despido señores. Ha sido un verdadero gusto trabajar con ustedes, espero haya más sobre esta magnífica serie y poder haberles compartido este importante momento. Debo ahora llevar a mi 'Preciosa' a su hogar.
—Diciendo esto último con un ápice de ternura.
Todos exclaman con un ¡Awww! La chica con las mejillas coloradas no puede evitar sonreír formándole hoyuelos en las mejillas.

- Cuida bien de ella señor Casanova —Le dice Martin a su colega.

- Lo haré 'Pequeño Ladrón de las Sombras'
—Imitando la voz mítica y aterradora del dragón Smaug, el personaje ficticio de la saga El Hobbit; del director Peter Jackson. A lo que la señora Amanda y la chica ríen.

- Señorita Rowling, me despido de usted y ojalá la veamos pronto.
—Besando los nudillos de ella como caballero. Benedict carraspeo molesto, a lo que Martin se separa de la muchacha con las mejillas enrojecidas.

- Gracias señor Freeman. Yo también espero verlos de nuevo.

Amanda la recibe con un fuerte abrazo.

- Me ha gustado nuestra charla. Me gustaría que nos visitaras a mi y a mi esposo algún día.

- Eso me encantaría mi señora Abbington. —Dice ella alegremente.

- Excelente. —Entonces toma de su bolso un pequeño papel y una pluma de punto fino, anotando así su número celular.

- Por si deseas comunicarte conmigo. Para poder charlar e ir de paseo los cuatro.

De nuevo muchas gracias señorita Amanda.
Todo esto suena maravilloso.

- Aw... Oíste querido, me llamó señorita.
—Mirando a su esposo con picardía a lo que él se ríe con inocencia.

- Me creerá si le digo que no aparenta tener más edad. Usted luce bellísima y radiante.

- Te lo agradezco de mil amores mi niña. —Le sonríe.

Entonces los vuelvo a abrazar por última vez para así volver con Benedict a su lado.