Una verdad oculta.

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Friday 3th 2017.

Alice había asistido aquella mañana a la residencia Cumberbatch, donde actualmente viven los padres de Benedict. La joven estaba bastante angustiada porque no sabía de él desde hace un mes. Bueno, Ben estaba de viaje en Nueva York para una nueva propuesta, pero le prometió estar a su lado en cuanto terminara de firmar un contrato con la casa productora donde filmaría su próxima película, además... tenían una cena especial.

Trató de comunicarse con Benedict, pero su celular se encontraba apagado. Preocupada, le dejó un mensaje automático con la esperanza de oír su anhelante voz:

—Mi amor, estuve llamándote seis veces, espero estés bien. Tu madre y tu padre me preguntaron si estaba contigo pero les respondí que desde anoche no apareciste. Así que fui a buscarte, en este momento estoy con la señora Magdalena, ya que me insistió en que me quedase a esperarte.
Por favor ¿Dime donde estás?

- ¿Qué le ocurre señorita?
—Pregunta Magdalena acercándose y mirándola con preocupación.

- Benedict no me ha respondido las llamadas. Mi corazón no puede dejar de pensar si algo malo le sucedió.

- ¿Le dijo que iría el señor Cumberbatch a un sitio en especial?

- No, es que nuestra cita que habíamos reservado para celebrar nuestro primer mes como novios es esta noche.

- Es maravilloso lo que me ha dicho mi niña. Pero me apena verla en ese estado de ánimo tan  bajo.
—Dijo ella con pesar.

- No se preocupe. Todo está bien.
—Le sonríe, pero su rostro vuelve a tornarse melancólico.
- No hay minuto en que no piense en él, es como si...

En ese momento el celular de la chica suena con su típico tono de llamada "Stayin' Alive" del grupo Bee Gees. Pide permiso para contestar en privado, a lo que la señora Middleton se retira a la cocina.

Alice no dudó ni un segundo para responder y con alegría dijo;

- ¿Ben? Mi cielo, estuve marcando a tu celular seis veces pero no respondías, ni si quiera los buzones de voz ¿estas bien?

Pero ella claramente pudo escuchar que alguien lloraba con amargura a través del teléfono.

- ¿Estás bien bebé? No me asustes por favor cariño.
—Le preguntaba su amada con los nervios a flor de piel.

- Alice...mi cielo...si si estoy bien, es sólo que...
—Su voz se quebró en ese instante y rompió en llanto.

- ¿Que tienes amor? ¿Donde estás? Necesito verte.

- Me encuentro en la clínica. En unas horas estoy contigo. Porque... Una persona quiere conocerte.

- ¿Que sucedió? ¿Te lastimaron? ¡De inmediato voy!  —Dice alterada la muchacha.

- No no no cariño... Pronto te veré en casa. Te lo explicaré cuando esté allí. Quedate con Vladislav y con la señora Middleton. Por ningún motivo te vayas de la mansión mi amor.

- Okay. No me moveré de aquí cariño. Te amo.

- Yo también cariño.
—Cuelga la llamada y acto seguido la muchacha guarda el celular en su bolso. Magdalena se dirige a ella de prisa para preguntarle lo que estaba pasando.

- ¿Qué pasó señorita? ¿El joven se encuentra bien?

Ella, no muy segura de sus palabras le responde.

- Si si, no te preocupes, es sólo que ya viene en camino, tardará un poco pero no es nada.

La mujer respira aliviada, rápidamente va hacia la cocina para prepararle un té de canela. Alice agradece con amabilidad.

Miradas Seductoras (Benedict Cumberbatch) [Completada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora