Abrí un poco la bolsa y quedé con mi boca abierta.
__: ¿Enserio? -fruncí mi ceño- ¿qué estás tramando?
Suga: Solo vístete, te espero en la mesa número 10, no te demores mucho, que yo igual muero de hambre, no literalmente.
Se bajó y le entregó las llaves a un joven, que por obvia razones, era el encargado de aparcar y cuidar los coches. Yo salí, confundida, con la bolsa en mis manos. Fui a un baño, cerca del restaurante y me vestí. Me veía completamente diferente y era muy distinto a mis vestidos que comúnmente usaba. Para evitar explicaciones del vestuario, aquí adjunto una foto:
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Quedaba perfecto a mi figura, mi pelo por suerte, estaba lacio, y como no tenía maquillaje para salir, solo pinté un poco mis labios color cereza. ¿Qué rayos estaba haciendo? Negué, me miré mi rostro en el espejo y sonreí, pero aquella sonrisa no me duró demasiado. No estaba bien, ahora estaba comenzando una relación y Suga...no debería estar saliendo con él. Cerré mis ojos, suspiré, y me dije a mi misma "Solo comerás, te cambiarás de ropa y nos iremos a la casa, eso y nada más". Salí del baño y fui, entré al restaurante y luego de preguntarle a una señorita sobre la ubicación de la mesa 10, vi a Suga, estaba asombrado al verme.
Suga: Te vez mejor de lo que imaginé.
__: No es para tanto -me sonrojé-.
Estaba a punto de sentarme pero él se paró velozmente y movió mi silla. Le dí una reverencia en respuesta a su generosa y caballerosa acción. Me senté y él hizo lo mismos, estábamos frente a frente, pero sin mirarnos ya que admirábamos la carta de los platillos.
__: ¿Me recomiendas algo? -no sabía que pedir- ¡Maldición! -me espanté, esto era mucho-.
Suga: ¿Sucede algo?
__: Esto es demasiado caro, Suga -fruncí el ceño-.
Suga: Deberías dejar de preocuparte por todo, de vez en cuando.
__: Tu me darás un infarto en cualquier minuto, tenlo por seguro.
Llegó el mesero a nuestra mesa con un lápiz y una pequeña agenda en sus manos.
XX: ¿Puedo tomar su orden?
Suga: Tráiganos su mejor vino -sonrío- además, quiero Gimbap, para ambos, me han dicho que éste lugar es el mejor en prepararlos.
XX: ¿Algo más, joven?
Suga: De postre...¿qué tiene?
XX: Tenemos "Kkultarae" hecho de finos hilos de miel y maltosa, lleno con un dulce de nuez, y "Patbingsu", coronado con helado, leche condensada, diversas frutas, trocitos de tteok, trozos de gelatina y cereales en copos.
Suga: ¿Cuál quieres? -me miró-.
__: Jamás había escuchado esos nombres, pero escogeré la segunda opción, Patbingsu.