Un Golpe Inesperado (Shawn Mendes)

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Sonó mi alarma avisándome que era hora de prepararme y me levanté de mi cómoda cama. Me dirigí a mi ropero para ver que me pondría y ¡no encontraba mi único vestido elegante que tenía!

–¡Mierda! Dónde dejé el vestido– dije furiosa en español.

Después de estar rebuscando y rebuscando al fin encontré. Mi vestido rojo que tenía una parte de la pierna abierta. Lo planché porque estaba un poco arrugado y lo dejé en mi cama. Entré a mi baño y me bañé, duh. Lavé mi cabello y luego de unos 7 minutos salí. Me puse mi ropa interior, me sequé mi cabello y me hice unas ondas, no me maquillé porque como ya les dije, soy alérgica a todo tipo de maquillaje. Me puse mi vestido y un tacón negro que al parecer tenía.

Desconecté mi celular del cargador ya que lo conecté antes de bañarme y ví la hora, 8:10 de la noche, «justito» pensé y en eso me llega un mensaje de Shawn.

Shawn ♡: Jul siento arruinar nuestra cita pero no voy a poder pasarte a buscar como acordamos, te pasó la dirección y nos vemos allá a la misma hora que acordamos

Yo: está bien, no te preocupes :)

Respiré hondo unos segundos y salí de mi departamento y llaveé la puerta. Bajé por las escaleras hasta el garage y subí a mi auto y antes de encender el motor me llegó otro mensaje de Shawn.

Shawn ♡: esta es la dirección 📍dirección cualquier cosa si el señor de la entrada te pregunta si tenes una reserva, dile que sí y para dos al nombre de "Shawn Mendes". Nos vemos allá

Le dejé en visto y prendí el motor del auto, abrí la dirección y fui hasta el restaurante.

Rattatuil era el nombre del lujoso restaurante, «igual que una película de Disney» pensé. Desabroché el cinturón de seguridad y bajé del auto. Acomodé mi vestido y entré al lugoso restaurante; y como dijo Shawn, había un señor en la entrada.

–Buenas noches señorita, ¿tiene una reservación?-– me preguntó el señor.

–Sí, una mesa para dos al nombre de Shawn Mendes– contesté.

–Sígame– he hice lo que señor me indicó.

«Espero que Shawn ya esté sentado» pensé y miré la hora; 20:25. Seguro que ya está. Llegamos a una mesa un poco apartada de las demás y ¡wow! Si que era hermosa. Tenía una vela en el centro y también flores, específicamente tulipanes, pero podría ser más hermosa con Shawn ahí y si, él todavía no había llegado.

–Que disfrute de su cena– me sacó de mis pensamientos el señor y se fue dejandome sola frente a la mesa. Me senté y me puse a esperar. 20:30 y volvió otro moso y me dejó el menú.

La comida se veía rica según las fotos pero muy cara.

–¿Desea ordenar algo?– me preguntó amablemente el mozo.

–Solo agua por favor– respondí.

–Enseguida se la traigo– y salió por donde vino. 20:40 y ningún rastro de Shawn aún, ni siquiera un mensaje, pero vale la pena esperar un poco más.

–Aquí está su agua– el mozo me sirvió agua en un vaso– disfrute– sonrió y se fue otra vez.

Los minutos pasaban y pasaban y Shawn aún no aparecía.

–¿Desea ordenar algo?– apareció el mozo otra vez.

–Aún no, gracias– respondí y el mozo se alejó.

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21:15. Una hora pasó desde que acordamos para encontrarnos. Una hora sentada como estúpida tomando mi agua a que Shawn aparezca o me mande algún mensaje. Una hora que veo a parejas felices entrar y salir del restaurante. «Me dejó plantada» fue lo primero que pensé, sabía que alguien como Shawn, famoso, no saldría con alguien como yo, una chica normal. Con mi dignidad por los suelos y las lágrimas a punto de salir disparadas de mis ojos llamé al mozo y pedí la cuenta.

–Que tenga una buena noche– se despidió el mozo de mí.

–Igualmente– dejé el dinero sobre la mesa y me levanté.

Caminé rápidamente hasta la salida y choqué contra alguien. Lo último que me faltaba, recordar cómo conocí a Shawn.

–Lo siento– me disculpé rápidamente con la mirada baja y con un nudo en la garganta.

–¿Juli?– preguntó la voz que menos quería escuchar.

–Shawn– dije fría y cortante.

–Lo siento– bajó su mirada.

–¡¿Qué lo sientes?! ¿¡Eso es lo único que me dirás después de dejarme una hora plantada?! ¡UNA HORA!– le grité furiosa y con lágrimas cayendo sobre mis mejillas– ¿sabes lo que se siente que te dejen platanda? ¿Qué no te escriban un puto mensaje diciendo "no voy a poder ir"?– respiré ondo tratando de calmarme.

–No, no lo sé– contestó– y en serio lo si...– y no pudo seguir porque lo interrumpí:

–Claro que no lo sabrás, si eres "Shawn Mendes" nadie te deja plantado. No quiero escuchar nada de lo que digas– me dí la vuelta para cruzar la calle e ir a mi auto.

–¡CUIDADO!– gritó alguien y sentí como me empujaban fuera de la calle.

Sentí un dolor en la cabeza y la toqué; sangre. Me había cortado la cabeza pero no importaba. Me levanté de golpe provocando un pequeño mareo y miré la calle. Shawn se encontraba tirado ahí con los ojos cerrados.

–¡NO SHAWN!– grité; corrí y me arrodillé en la calle al lado de él– ¡LLAMEN A UNA AMBULANCIA RÁPIDO!– volví a gritar desesperada– no Shawn, no me dejes por favor– enrollé mis brazos sobre su torso, lleno de sangre pero no importaba– no me dejes ahora– susurré hecha un mar de lágrimas.

–Sepárese– sentí que alguien me alejó de Shawn.

–¡No!– forjé– no me alejaré de él– volví a forjear y logré salir del brazo que me sujetaba– ¡Shawn!– grité esperanzada de que me responda y llegué a él y vi como lo subían en una camilla a la ambulancia y le conectaban cables.

–Nunca te dejaré– dijo en un susurro casi inaudible Shawn y se escuchó el "piiii..." de la máquina a la que Shawn estaba conectado.

–¡No! Lo perdemos– escuché que gritaba un médico en la ambulancia y eso fue lo último que oí antes de ver todo borroso y caer al suelo.

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¡Suspenso time! Les dejaré con el suspenso para que vean lo que se siente porque me gusta hacer sufrir a los demás. Disfruten el sufrimiento y les traeré el próximo cap lo más pronto posible. No olviden que los amooo. Besooooooos.
—ro

Editado.