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Miércoles. Un día desde que Shawn despertó.

Sonó mi alarma a las 7:30 de la mañana como antes; «hora de volver a la rutina Juliana» me dije a mi misma. Me levanté de la cama y me dirigí al baño. Lavé mi cara y mis dientes, peiné mi cabello en una cola y salí para ir a mi pieza y abrir mi ropero. Elegí un una remera deportiva blanca y unos shorts junto a zapato deportivo marca 'Nike' ya que hoy tenía pensado ir a correr. Fui a la cocina y abrí la heladera. Me serví un vaso de agua y lo tomé. Escribí una nota para que los chicos no se preocuparan como la otra vez. Si, los chicos se quedaron a dormir anoche después de la noche de películas con la excusa de "es muy tarde y estamos cansados" y eso me dijeron a las 12:15 de la noche y ¿saben a que hora se terminaron durmiendo? ¡A LAS 5 DE LA MAÑANA!

Queridos simios:

Fui a correr así que no lloren por mí si no me encuentran. No quemen la casa y tampoco se acaben toda mi preciosa comida. No me esperen para desayunar, voy a hacerlo en el camino.

Con muchos besos la mejor del mundo,
Juliana.

Pegué la nota en la heladera y salí. Me puse mis auriculares y entré en mi propio mundo.

...If it all goes wrong, darling just hold on...

"Just Hold On" de Louis Tomlinson y Steve Aoki estaba sonando en mis oídos. Si todo va mal, cariño solo aguanta pero en estos momentos me es imposible aguantar. Lo único bueno que pasó fue que Shawn al fin despertó del coma, pero –como siempre hay un pero– perdió la memoria. Solo se acuerda de su madre, su padre –quién vino desde Canadá apenas se enteró que Shawn despertó– y Aaliyah. El doctor dijo que es posible que el recupere la memoria, pero también no. Y como ya lo dije varias veces «La esperanza es lo último que se pierde». No perdí las esperanzas cuando Shawn todavía no despertaba y no lo pienso hacer ahora.

Toco mis mejillas y las siento mojadas, a causa de las lágrimas que salían de mis ojos sin previo alguno.

Llegué a una pequeña cafetería llamada "Jitters"; «como la de The Flash» pensé, mi serie de superhéroes favorita. Y cabe destacar que Grant Gustin es hermoso y más vestido como Flash, pero no más que Shawn.
Me saqué mis auriculares; entré a la cafetería y busqué una mesa para sentarme.

Apenas me senté llegó una mesera– ¡hola! ¿Qué des... ¡Oh Dios eres Juli Dominguez! ¡La novia de Shawn!– gritó una chica apenas levantó su mirada de la libretita que tenía.

–Así es– sonreí– y no soy la novia de Shawn– aclaré y sentí que una lágrima bajaba de mis ojos y la limpié rápido.

–¿Estás bien?– preguntó la chica.

–Sí– mentí y sonreí sin mostrar mis dientes– ¿cómo te llamas?

–Diana, pero todas mis amigas me dicen Di, un gusto– estiró su mano y yo la estreché.

–Juliana Dominguez, aunque ya me conoces– dije riendo– ¿tienen chocolate caliente?– pregunté.

–¡Sí claro!– contestó.

–Pues dame uno por favor– pedí.

–Esta bien– anotó en su cuadernito– ¿algo más?– levantó su mirada.

–Una galleta grande.

Un Golpe Inesperado (Shawn Mendes) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora