Prefacio.

107K 4.7K 113
                                    

Melody Grace Thompson
Dejó este mundo a los 43 años, tus hijos y demás familiares te recordarán por siempre jamás.
D.E.P

Eso y una solitaria rosa marchita eran lo que completaban la tumba de mi amada madre. Cuatro meses habían pasado desde su partida y mi único escape era el alcohol. Sé que mi padre y mi tía estaban preocupados pero no había nada que yo pudiera hacer, dejé una rosa nueva y retiré la marchita, lanzándola con desprecio al suelo. Agarré la botella de vodka con manos temblorosas y tras darle un último trago la estrellé con fuerza contra la lápida de mi madre, haciendo que se quebrara en mil pedazos.

-¡Por qué me dejaste!-grité con agonía. Sentí un nudo horrible en mi garganta y las lágrimas no tardaron en salir. Saqué un cigarro y ebria y llorando, me encaminé a casa, donde seguro que tía Rose y papá estarían esperándome.

Efectivamente estaban esperándome, pero no de la manera que yo esperaba. Papá sostenía un par de maletas en sus manos, y con ojos llorosos, me indicó que me sentara. Caminé al salón y esperé el discurso.

-Heather cielo, creo que es hora de cambiar.-tía Rose me tendió una taza de té. Suspiró con fuerza y añadió. -Tienes que irte a un centro de rehabilitación.

De eso hace ya dos años, dos malditos años entre gente inútil, mientras yo sólo necesitaba un par de meses. Pero fue mi comportamiento agresivo lo que impidió que saliera de allí, y bueno, fue alargándose hasta convertirse en en dos largos años. Echo de menos a papá, a tía Rose y a Kelsey. Pero desde luego que esto no va a volver a ser lo mismo. He cambiado, no soy la misma chiquilla temblorosa que entró aquí. Mi carácter es frío, y he aprendido a construir muros que no permiten pasar a nadie, no pienso salir herida de nuevo.

Lo que no esperaba Heather era que volver a Phoenix suponía volver a sufrir, pero de una nueva manera.
¿Realmente está dispuesta a aguantar?¿A aguantar sin explotar?

Miro al tío de los ojos verdes, Rude se hace llamar, con curiosidad, la verdad es que para parecer un capullo no está mal. Entonces se gira y me mira mal.

-¿Qué mierda miras?-espeta el tal Rude con su mirada fija en la mía.

Remuevo el piercing de mi lengua antes de contestar.

-¿Acaso te importa imbécil?

Gran error.

Orgullo, agresividad y odio. Una mezcla explosiva para dos personas tan inestables.

***

POS HOLA CARACOLAS, BUENO, ESTO ES UNA PROPUESTA ASÍ QUE ESPERO QUE OS GUSTE Y TODO ESO, LA E HECHO CON TODO EL LOVE DE MY HEART Y TODO ESO (CHISTACO) ASÍ QUE BUENO, COMENTAD Y VOTAD Y MANTENDRÉIS A MY LITTLE GINGER CONTENTA, ¿SI?

OS QUIERO, MUCHO.

CAMBIO Y CORTO.

Rude (punk h.s)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora