#2 en Terror 24/06/2017
Aprovechando que sus controladores padres están de vacaciones, Thanya Mason organiza una fiesta en su lujosa casa junto a sus mejores amigos. Entre alcohol y drogas, llevarán a cabo un oscuro ritual, despertando a un peligros...
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Eve se levantó y una vez de pie, se colocó en el centro del círculo y comenzó a dar vueltas dentro de él , mirando uno a uno a todos a los ojos.
Al poner sus ojos sobre ellos, todos notaban un profundo temor. Notaban al cambiapieles mirándole directamente a los ojos. A escasos metros.
Eve se acercó a Thanya y le cogió de la mano. La joven Mason hizo un amago de resistirse pero enseguida Eve le dirigió una fulminante mirada inclinando su cabeza. Thanya cedió mientras miraba hacia un lado.
Eve cogió la mano derecha de Thanya y inspeccionó su reciente muñón, lo miró durante algunos segundos y finalmente soltó la mano de Thanya, para justo después esbozar una siniestra sonrisa.
Nadie era capaz de articular palabra o hacer algo. Las horas anteriores, todos sabían que alguien en todo momento tenía al cambiapieles dentro, pero tenerlo allí delante sabiendo en que cuerpo estaba, daba demasiado respeto.
Eve se giró y puso su mirada sobre Connor, el cual mantuvo sus ojos sobre ella apenas unos segundos, pero enseguida bajo la mirada.
Se acercó lentamente a él y le miró su malherida mano. Connor tenía una gran vendaje que cubría la mayor parte de su mano, a causa del terrible mordisco que le dio Hayden cuando estaba poseída.
Eve se quedó mirando a Connor un breve tiempo y después, se agachó junto a Hayden, mirándole a los ojos a escasos centímetros de distancia.
Hayden tenía un angustioso y insoportable miedo, que crecía cada segundo que pasaba. No podía ni siquiera mantener la respiración con aquel ser tan cerca y tampoco pudo evitar que una lágrima deslizara por su mejilla.
Ante esto, el cambiapieles sonrió y agarró de la melena de Hayden y estiró de ella, colocando su cara mirando hacia el techo.
Todos miraban asustados aquella escena, sin poder reaccionar.
- No... por favor, no...- suplicaba Hayden.
Eve volvió a reir y segundos después, deslizó su lengua por el rostro entero de Hayden, desde la barbilla hasta la frente. Todos quedaron sorprendidos ante esto.
Eve volvió a levantarse y se puso en el centro de todos. Sin girar la cabeza, señaló a John con su mano derecha y dijo en voz alta.
- Suelta la pistola. Ya...
La voz de Eve sonaba totalmente distinta. Sonaba mucho más grave y afonica.
John abrió los ojos como platos. Nadie le había visto guardarse la pistola en su pantalón y no entendía como el cambiapieles podía saberlo.
John se puso de rodillas y sacó la pistola de su entrepierna, para luego dejarla caer a los pies de Eve.
Todos clavaron su mirada sobre el padre de los Mason. Al parecer tenía más armas aparte de la escopeta y no lo había comunicado. Las reservaba para él.
