Cortejo [Pausada para edición]

V

Hacía una semana que Hizashi había vuelto de su salida familiar, no fueron nada más que dos días, pero estar en aquel lugar le dio tiempo de hablar con su padre, cosa que no hacía mucho desde que había audicionado a Yuuei, razón principal por la que su madre había organizado todo eso, ya que pensaba que lo más indispensable en una buena familia era una excelente comunicación, pero después de la charla que tuvieron la distancia había aumentado considerablemente ¿La razón? Bueno, el padre de Hizashi había notado algo en sus relatos escolares que ni él mismo sabía que estaba ahí... Pero que ahora le acosaba con cierta culpa.

***

Midori y Takeshi Yamada, dos personas que se amaban mucho y que habían traído al mundo al alegre Hizashi se encontraban conversando amenamente mientras su hijo hablaba con alguien por celular, la mujer se había fijado mucho en lo absorto que estaba su hijo en esa conversación completamente ajena al propósito de ese viaje, así que con la autoridad que su rol de madre le ofrecía decidió que lo mejor era confiscar el móvil hasta nuevo aviso- Pero mamá...

- Nada, si quieres hablar con alguien ¿Porque no lo haces con tu padre? Aprovecha.

El chico hizo un puchero infantil para luego mirar a su padre por el rabillo del ojo... Hablar con él no sería igual a hacerlo con Yagi o con Shota... Pero bueno, siempre podía intentar avivar una pequeña charla entre ellos que terminaba casi todo el tiempo en un "Seré un héroe, no un doctor ¿Ok? Ok"- ...

- ...

- ... ¿Que tal la escuela?

- Es genial, los maestros son super cools, y mis compañeros son divertidisimos... He hecho muy buenos amigos - Lo dijo recordando a Shota recostado en una mesa mientras Yagi se reía a todo pulmón.

- Me alegra... Pero... ¿No es un poco... Peligroso? Digo... Los están preparando para luchar en un futuro.

- Bueno, los maestros están para evitar accidentes, y en caso de que ocurran Recovery Girl lo solucionara con un beso.

- Ya veo... Tu madre dice que hablas mucho de alguien en particular.

- ¿Yagi?¿Shota? Hablo mucho de ambos... Son mis mejores amigos, sobre todo Shota.

- ¿Shota?

- Un chico de mi clase, es el mejor de todos, muy inteligente y hábil ¡Su Singularidad es genial!

- ¿Cual es?

- Puede borrar otras Singularidades mirándolas fijamente sin parpadear.

- ¿Las borra de manera permanente?

- No, cuando parpadea se pierde el efecto.

- Oh, suena útil para un héroe.

- Lo es, y la domina de forma genial.

Takeshi suavizo un poco su expresión mientras Hizashi ampliaba su sonrisa, ambos eran muy diferentes en cuanto a físico y personalidad, ya que el chico era muy parecido a su madre, físicamente hablando, mientras su personalidad era quizás la más alegre de ambas familias, era el alma de todas las reuniones familiares, y nadie se explicaba del todo a que se debía esa pasión desmedida por animar a la gente- Se escucha como un gran alfa.

- ¿Alfa?

- Shota ¿No es un alfa?¿Es beta?

- Omega.

- ¿Un omega en el mejor curso de héroes de Japón?

- Tenemos cinco omegas en nuestra aula, desde el año pasado los están admitiendo, en la academia hay como treinta y ocho.

La cara del hombre se tornó confusa, como si acabaran de decir que la gasolina había aumentado mucho dinero, Hizashi se esperaba una reacción así de su padre, el hombre era un alfa conservador, no le agradaban ese tipo de inclusiones, pero no opinaba nada al respecto, cosa que su hijo agradecia con el alma, ya que si su padre llegara a decir algo ofensivo hacía su mejor amigo ni todas las pinches deidades de la humanidad impedirían que Hizashi hiciera sangrar los tímpanos de su progenitor- ¿Es el mejor de tu clase?¿En todo?

- Si, pelea muy bien y es inteligentisimo... Le cuesta un poco socializar, pero de resto es bueno en todo.

- ¿En todo... Todo?

- No se preocupa en nada por su apariencia y se duerme en todo momento, también tiene ojeras y es pálido, pero se ve genial así.

- ¿Tan desarreglado?

- Es como su marca personal, ya sabes, le luce solo a él.

- ¿Pasan mucho tiempo juntos?

- Pasamos todo el tiempo juntos, a donde voy yo va él, y viceversa... ¡Somos los mejores amigos!

- Mejores amigos...

- Si, también quería que se llevará con Yagi, pero dice que prefiere estar conmigo... Ja.

- ¿Enserio?

- Si... Me agrada.

- Te gusta.

- ¿Shota?

- Si.

- No.

- Midori tiene razón ¡Te fascina! Semejantes gustos tienes.

- No, él solo es mi amig...

- Aunque no me sorprende viniendo de ti.

- No te hagas ideas que no s...

- ¿Has pensado en cortejarlo? Digo, se te pueden adelantar si es tan genial como dices.

- Yo no haría eso n...

- Deberías traerlo a casa, ya sabes, para darle el buen visto... Oh mejor deberías ir tú a su casa ¿Como son sus padres?

- Lo estas malinter...

- ¿Lo has invitado a salir ya? Sería el colmo que no lo hubieras hecho.

- ¿Quieres escuchar lo que di...

- ¡Tengo que conocerlo! Mi instinto me habla, creo que me agradara.

- ¡No me gusta Shota!

- ¡Claro que si!

- ¿¡Quien te crees para decir eso!?

- ¡Tu padre!

- ¿¡Con qué pruebas!?

- ¡Te brillan los ojos cuando hablas de él!

- ¿¡Y eso que!?

- ¡No me creas tonto! Cuando tú ibas ya yo venía.

- Yo sé lo que siento.

- No me saldrás ahora con que te gusta alguien mas.

- No pero...

- ¡Etapa de negación! También la tuve con tu madre, y mira, menos mal se me paso a tiempo.

Lo que debió ser un buen tiempo de padre-hijo terminó en una de las discusiones más largas jamás sostenidas por Takeshi y Hizashi, tanto la alargaron que Midori tuvo que intervenir cuando la Singularidad de su hijo empezaba a salirse de control haciendo sangrar levemente los oídos de su padre que ignoraba la sangre mientras respondía cada vez más seguro sobre los sentimientos de su hijo, que al irse a dormir esa noche terminó entrando en una especie de etapa rebelde, en la que para contradecir a su padre dejó de hablarle a Shota por toda una semana, tiempo en el que socializo con otros compañeros de su salón, entre ellos una omega llamada Uwabami que era muy hermosa, por no decir que terriblemente coqueta, casi como la versión rubia omega de primer año de la diosa Nemuri Kayama de segundo.

El tiempo que Hizashi se mantuvo alejado de Shota terminó un viernes cuando de la nada aquella chica con tres serpientes en la cabeza le había besado en el salón cuando se habían quedado solos, la sensación de sus labios contra los de Uwabami consiguieron que sus tripas se estrujaran en su interior, luego de eso no volvió a dirigirle la palabra a la omega y el lunes a primera hora se dispuso a buscar a su mejor amigo con desesperación... Llevaba mucho tiempo sin sentir ese tranquilizante olor a lavanda que tanto amaba... Espera ¿Que?