VII

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Un lunes como cualquier otro se había transformado rápidamente en uno de los peores días jamás vividos por Aizawa Shota, al llegar a Yuuei se había quedado dormido esperando a Hizashi, pero lo que lo despertó no fue uno de los gritos del alfa, no, fue el profesor que había golpeado su cabeza, inmediatamente los cansados ojos de Shota se abrieron de par en par para recorrer el salón con la vista en busca de su amigo, él cual estaba muy lejos de él en la primera fila hablando animadamente con un chico de super velocidad... ¿Porque se había hecho allá?... Quizás había llegado demasiado tarde... Si... Seguro era eso.

Las clases fueron incómodas para el omega que se sentía fuera de lugar sin el rubio a su lado comentando cosas, todos a su alrededor le evitaban y él no lo había notado jamás, siempre había estado demasiado absorto en la compañía de Hizashi como para hacer caso a las palabras de su madre sobre hacer muchos amigos... No los necesitaba, solo necesitaba a Hizashi... Con él era más que suficiente... De todos modos no era como si de la nada Yamada ya no fuera a querer ser su amigo... Eso no pasaría jamás.

***

El almuerzo siempre era un momento ajetreado en Yuuei, todos se apretujaban entre si para agarrarlas mejores mesas, excepto Shota, él solo debía hacerse en un lugar apartado junto a Hizashi, un lugar tranquilo donde de vez en cuando interrumpia Yagi, pero que normalmente era solo de ellos dos... Aunque ese día fue diferente, Hizashi no llegó con su almuerzo y se sentó frente a él, este giro entre las mesas más abarrotadas y se hizo lugar con algunos de los populares de su salón, Shota lo había seguido con la mirada incapaz de ir tras él ¿Porque no se había sentado en la misma mesa?¿Porque no le había hablado en todo el día?¿Había hecho algo malo?¿No le había visto?¿Lo estaba ignorando a propósito?... ¿Ya no quería pasar tiempo a su lado?¿Le había empezado a molestar su actitud?... Si era eso solo debía decírselo, Shota lo cambiaría... Haría lo que fuera para no volver a estar solo... Pero Hizashi no le dirigió la palabra en lo que sobró de ese día... Ni en el siguiente.

Aizawa había adoptado su estado ermitaño, ese en el que ni siquiera hablaba, solo dormía y pensaba en su madre, en cómo debería estar y esas cosas que normalmente le deprimían cuando estaba solo, pero igual no tenía nada mejor que hacer, nadie le buscaba conversación y él, personalmente, prefería mantenerse al margen, de antemano sabía que no encajaba ni un poco con los demás grupos, así que no iría a hacer el ridiculo... Se limitaba a ver como Hizashi se relacionaba con el resto de su clase, sobre todo con una omega llamada Uwabami, de cabello rubio muy bien arreglado, ojos grandes y brillantes, piel de bonito color, con un sutil lápiz labial que resaltaba sus labios, accesorios a juego y una radiante sonrisa que acompañada de su suave risa hacían la combinación perfecta que como resultado daba a al mejor estereotipo de omega normal que la sociedad aprobaba... Ese tipo de omega que él nunca había sido... Y nunca sería... Por alguna razón desconocida para Shota, esa noche lloró de frustración en silencio dentro del armario.

***

El jueves era caluroso, tal como Shota odiaba... Fascinante... Estaba tan deprimido que simplemente se limitaba a arrastrarse por ahí con cara de muerto, incluso a la hora del almuerzo había caído rendido en la mesa sin inmutarse en saludar a la persona que se sentaba frente a él con una sonrisa de oreja a oreja- ¡Shota!

El omega levantó la cabeza de golpe con los ojos completamente abiertos, su corazón dio un vuelco esperanzado, pero cayó de golpe al ver que el alfa rubio frente a él no era Hizashi, sus párpados se entrecerraron mientras su cabeza giraba permitiendo a sus ojos enfocar la silueta de quien le había abandonado riendo estruendosamente junto a la bonita omega que últimamente no se separaba de él... ¿Estarían saliendo?- Ey ¿Shota?¿Estas bien?

- ...

- ¿Porque Hizashi no está aquí? Desde el lunes no les veo juntos ¿Se han peleado?

- ... No.

- ¿Entonces?¿Por que esta allá y no aquí?

- ... No lo se... A lo mejor ya no le agrado.

Yagi levantó una ceja, eso no podía ser posible ¡Hizashi adoraba a Shota! Solo hablaba de él y de lo genial que era... Si su intuición no fallaba podía jurar que Yamada sentía algo por el omega, y que esté, efectivamente, le correspondía al cien por ciento, pero he aquí la pregunta ¿Qué diantres había pasado que no estaban juntos?- Puedo ir y traerlo del pelo para que te explique lo que pasa.

- ... No... No quiero molestarlo.

- Pero yo si ¿Como osa dejarte solo?

- Ella es más agradable que yo.

- ¿La de las serpientes?

- Si.

- Patrañas, tú eres mejor, Hizashi lo sabe.

Yagi empezaba a pararse listo para traer del pelo al chico de primer año que estaba como si nada en una mesa lejana con una omega ordinaria colgando de su brazo ¿Qué clase de expectaculo era ese? Hizashi debía estar ahí hablándole a Shota ¡No con aquella extraña! O eso pensaba Toshinori que era correcto, pero una temblorosa mano le sujeto débilmente de la parte trasera de su saco deteniendo su marcha haciéndole girar para encarar los melancólicos ojos del omega que parecía sufrir en el más grande de los silencios- No... Dejalo... Yo estoy bien.

- No lo estás.

- Creeme.

- ... ¿Necesitas algo?

- ... No.

- ... ¿Sabes? Hoy he hecho muchas cosas, creo que te las contaré.

Y así fue como durante todo lo que restó de la hora del almuerzo Yagi se dispuso a hablarle a Shota de la misma manera que normalmente lo hacía Hizashi, el omega estaba internamente muy agradecido con el mayor, Hizashi era la única persona que tenía ese tipo de detalles con él... Y por haberse comportado tan a su manera lo había alejado... Debía ser amable... Debía ser otra persona... No quería volver a fingir que era invisible en medio de una comunidad cualquiera, quería tener al menos una persona para escuchar... Y aparentemente Yagi quería ser esa persona.

Al finalizar las clases el mayor había aparecido de la nada con la idea de acompañar a Aizawa a la estación de tren que esté siempre tomaba, su intuición de alfa le había dicho que Hizashi ya no acompañaba al omega después de clases, y efectivamente así era, Shota no le dijo nada, solo le susurro una palabra rara que casi podía interpretarse como una especie de "Gracias" forzado. Por el camino Aizawa observó a un gato por unos minutos para luego seguir su camino y despedirse de Yagi cuando su tren estaba por salir.

Al día siguiente el alfa se metió en su salón antes de que llegaran los demás y le hizo compañía un rato hasta que tuvo que irse a cumplir con sus clases antes de que su maestro le castigará, Shota estaba tan agradecido con él que a la hora del almuerzo se había esforzado por no hacerse el dormido, y durante la ida a la estación no se había detenido a ver al gato. El fin de semana había sido arrastrado por Toshinori a una especie de partido que sus amigos habían montado, el omega se mantuvo debajo de la sombra de una sombrilla todo el tiempo mientras Yagi le hablaba a la distancia de como transcurría el juego, al omega le incomodaba horrores estar rodeado de tantos desconocidos en un lugar público, pero ya le había rechazado muchas invitaciones de ese tipo a Hizashi... No lo echaría a perder de nuevo.

***

La nueva semana empezaba mejor que la anterior, Yagi sonreía como siempre mientras le hablaba a un silencioso Shota que se sentía genial por no estar solo durante el almuerzo, pero su instinto omega le decía que alguien a la distancia los observaba con furia... No sabía quién era... Pero podía joderse.

***Notas***

- Las canciones que pongo son las que escucho para inspirarme mientras escribo :v

Cortejo [Pausada para edición]Место, где живут истории. Откройте их для себя