Not a Kidnapper's Hands~Yoonmin

Capítulo 26

JIMIN POV

Fuimos al hospital en la ambulancia que habíamos llamado. Las sangre de Yoongi estaba por toda mi ropa gracias a que yo había ayudado a cargarlo a la camilla. Estaba demasiado preocupado para poder hablar bien, así que sólo escuchaba lo que los paramédicos decían a sus compañeros y parecían tranquilos. Al parecer, no estaba en riesgo y su cráneo permanecía intacto. Eso me traía algo de paz, aunque me dejaba de aterrarme el  hecho de que seguía perdiendo mucha sangre.

Llegamos al hospital y desde un punto en adelante me prohibieron seguir con el. Miré por la pequeña ventana de la puerta hasta que lo perdí la vista y está se nubló de inmediato.

Esto era muy injusto, no puede ser que el destino nos odie tanto para no dejarnos estar junto a después de todo. Me senté en la silla y me rendí ante el llanto. No podía dejar de recordar la sonrisa que regalo antes de salir.

Porque mi padre le golpeó? Yoongi no sería irrespetuoso sin razón alguna como para haber irrespetado a papá sin razón. Ademas, el no era del tipo que arreglaba las cosas a golpes.

Yoongi POV

Fui abriendo los ojos luchando contra la sensibilidad a la luz y permanecí perdido en lo blanco del techo. el dolor de la cabeza era realmente irritante, pero sin duda era mejor que haber muerto. sentí algo pesado mi hombro, y mi primer pensamiento fue que tal vez se encontraba dormido, pero no fue así. Había una cabecita arrecostada a mi hombro con delicadeza, como si me fuera a lastimar si se dejaba caer por completo. sonreí cuando se removio hasta finalmente despertarse, frotando sus ojitos como un pequeño niño. Si el dolor de cabeza no fuera tan grave, ya me abría levantado y lo hubiera besado.

-Buenos días, principito-reí y el me miró. Se quedó unos minutos mirándome como idiota y comenzó un llanto muy infantil. Como puede ser aún niño luego de todo lo que le ha sucedido?

-Yoongi...-Sollozó escondiendose en la curvatura de mi cuello y balbuseaba cosas sin ser coherente.

-No te endiento-reí y acaricié su cabello.

-p-perdiste m-mucha sangre y pensé... y pensé... que habías...- tartamudeó él casi llorando de nuevo.

-tranquilo... estaré bien-lo acerqué hasta mis labios- no puedo dejar solo a mi rehén-y lo besé con ternura, feliz de estar a su lado... bueno... feliz de que el este a mi lado... sosteniendo mi mano y mostrandome que me ama con cada lagrima y sonrisa.

-buenos días... oh! es un placer verlo despierto-dijo el doctor- Soy el Doctor Shin y  venia a revisar que estuviera bien, sin embargo, noto que está más que bien- nos dio una mirada incomodamente pícara y continuó- No ha sufrido ningún daño cerebral permanente. Tendrá dolores de cabeza, pero no será nada grave y se irán eventualmente. Se le dará de alta en unas horas, hasta entonces, por favor no se pare ni mueva su cabeza de forma brusca. se podría desmayar o iniciar una jaqueca.

-gracias, doctor...-asentí y sonrei. Apenas el doctor se retiró, Jimin subio a la camilla y se acostó junto a mi. Acarició mis mejillas y facciones de mi cara, sin lograr ocultar sus lagrimás.

-ya deja de llorar-susurre cerrando los ojos y disfrutando de las caricias.

-has pasado dos días inconsciente, estaba asustado-se justificó haciendo un pucherito.

-Te amo, mocoso-confesé mirándolo con el rabillo del unico ojo abierto, y encontrándome con la sonrisa mas linda que he visto. Pasé un brazo por su cintura y me volví a mirarlo-mucho.

-yo tambien te amo-correspondió abrazándome fuerte.

Nos quedamos así por varias horas, hasta que nos quedamos dormidos, bueno, jimin se quedó dormido. Yo solo me dediqué a verlo dormir, debido a que era mucho mejor que dormir o soñar. Escuché pasos por el pasillo, lo cual significaban que venían a la habitacion. Supuse que sería el doctor a decirnos que ya era hora de irnos, asi que removí en cuerpecito perfecto de Jimin hasta lograr despertarlo.

-Ya tenemos que irnos-dije con delicadeza.

-okay... pero cuando lleguemos a casa, durmamos en mi cuarto de nuevo, si?-reí y asentí. El sonido de la puerta llamo mi atención y luego un estruendo.. uno que conocia más que a mi mismo. Un mortífero sonido que inundó la habitación y mi corazón se aceleró del miedo de que haya sido dirigido a Jimin.

Me volteé a la puerta y un hombre con un arma sonreia cínico. Sus ojos eran nos miraban con diversion y entonces lo sentí.

-Te dijimos que no te acercaras a par, Min YoonGi.

Sentí el dolor en mi vientre de la bala finalmente haciendo efecto y suspiré aliviando de que no había sido él. el hombre en la puerta se fue jugando con su arma y me volví hacia Jimin de nuevo. Su rostro de panico apuntó a mi herida, y luego a.... la suya. La bala me atravesó y se enterró en él.

Todo se volvió más oscuro y más frío, evitando que mi vista fuera util.

-gracias, hyung... por todo-escuché la voz de jimin antes de caer inconsciente. Así sería el final? Porqué la vida me odió tanto para no dejarme ser feliz por si quiera una maldita semana? Porque no solo matarme a mi y no a Jimin? Porqué no me dejó la vida poder despertar con Jimin a mi lado, en nuestra propia cama, en nuestra propia casa? porqué cuando intento ser bueno por primera vez, matan a los que amo? matan al único que importa?

-Perdón por haberte conocido...-dije con mi último aliento.

Pero graciar por hacerme feliz mientras pudiste, Jiminnie

FIN