Dime Que Si

Capítulo 41

Llegamos  le di las llaves a Ashley para qué abra la puerta de la casa. Estoy nervioso como siempre que le voy a proponer algo. Ella siempre reacciona diferente y es difícil saber que está pensando o sintiendo. Ash se acostó en el sofá y cerró los ojos, se ve tan hermosa, tan angelical así me da tanta paz. Abrió los ojos me vio y comenzó a reírse también me reí, pero no pude evitar mirarla con fascinación. Porque desde el primer día que la vi supe que terminaríamos así.  Salí de mis pensamientos al escuchar su voz.

—Ya deja de mirarme así y mejor dime ¿Cuál es tu plan? — pregunto entusiasmada

—Acompáñame y lo veras— le extendí la mano se paró y la tomo.

La guie hacia la escalera, seguimos caminado por todo el pasillo. Luego subimos otras escaleras las que llevan al tejado de la casa. 

— ¿Qué hacemos aquí? —pregunto mientras me sigue

—Ya lo veras—dije con una sonrisa.

Seguimos caminado hasta que nos sentamos, Ash mira con fascinación el cielo y con esa misma fascinación la miro yo a ella.

—La noche esta hermosa, solo mira como se ve el cielo— dijo sin dejar de mirar hacia el cielo

—Si, aunque no se compara con tu belleza—dije y note como sonrojo, luego soltó una risita nerviosa.

—Ahí está el romántico de Mark de nuevo—sonrió y asentí, se acercó a mí y unió sus labios con los míos en un beso corto.

— ¿Qué piensas hacer ahora? — pregunte en cuanto sus labios abandonaron los míos, Ash me miro extrañada.

—Si es lo que creo que me estas preguntado, creo que ya lo habíamos hablado trabajare en el hospital donde hice las prácticas y viviré feliz hasta que dure— dijo

— ¿Feliz hasta que dure? Espero que no sea lo que estoy pensando. Y eso ya lo sé, me refiero a ahora que terminaste la universidad.

— ¡Ah! Eso, bueno pues no se asumo que vacacionar, no estoy muy segura ¿Por qué lo preguntas?

—Pues digamos que quiero aprovechar todo el tiempo que estemos juntos, antes de que comience en el hospital y pues...—hice una pausa, para contemplarla esta tan concentrada en lo que digo— Me atreví a planificar nuestras vacaciones ya.

—Así que ese era el plan, bueno me gusta ese plan— dije

Me sonrió y me volvió a besar, luego me abrazo y nos quedamos así abrazados y hablando sobre nuestros planes.