Rosas en rojo carmesí

Biblioteca, una lectura al pasado.

—Buscando libros de romance ¿eh?, no sabía que tantas visitas aquí eran por leer historias de amor verdadero o príncipes rescatando damicelas en apuros —comentaba Blake con una risa burlona discreta para iniciar la conversación con el chico.
—Y-yo, sí me gustas, digo sí, sí m-me gustan las historias de romance... —respondía nerviosamente Geff quien quedó paralizado ante la repentina aparición de Blake.
—Jeje bueno, supongo que eres un romántico de esos que escriben cartas y así... De esos que ya no existen...
—R-romántico ¿y-yo? te equivocas jejeje y si un día escribo alguna carta creo saber para quien sería... —mencionaba el chico con una mirada que se iluminaba al posar sus ojos en la hermosa fauno. Blake se dio cuenta de la situación en la que se estaba metiendo y finalizó la conversación de la manera más cortés posible...
—Es bueno saber que aún no se pierde esa esencia en los chicos, no cambies nunca. Bueno seguiré buscando algún libro interesante, nos vemos Geff. Por cierto ¿Hay alguno que me puedas recomendar?
—Aamm, claro Blake, te recomendaría "Dos almas en Remnant", es muy buena historia, trata sobre dos faunos que se enamoran pero uno va cambiando debido a extrañas circunstancias y lo que una vez fue amor verdadero, evoluciona a un odio enfermizo...

Blake quedó atrapada en su mente por unos segundos, trayendo consigo recuerdos dolorosos al presente, recuerdos que alguna vez le provocaron satisfacción. Finalmente reaccionó y como si se tratará de un reflejo del cuerpo, ella dijo antes de huir del lugar...
—Es una historia interesante, bueno debo irme, adiós...

Blake abandonó el sitio perdida en tristes recuerdos y, antes de continuar su rumbo a la nada, escuchó una voz familiar...
—¡Hey Blake! ¿Por qué tanta prisa? ¿Estás bien? luces deprimida...
—No es nada, Sun —afirmaba Blake mientras frotaba sus manos con su rostro en lo que parecían ser pequeñas lágrimas.
—Estoy bien... ¿Quieres acompañarme a desayunar, Sun? —proponía, un poco más calmada, a su amigo.
—No hay algo que desee más —respondía Sun dándose cuenta que su amiga necesitaba distraerse un rato.

Ambos faunos se acompañaron y compartieron un agradable momento juntos en una pequeña cafetería localizada en los alrededores de Remnant.