Loca por el Nerd ||Jelsa||

20 AHORA SÍ

Mijos... ¿bonita broma? 😂

Lo sé, soy mala... me arrepiento tanto...

Nop, mentira. Me reì hasta cansarme. Sorry not sorry >:D

Aún así los quiero♡

N o q u i t o m á s e l t i e m p o 😉

Canción: Halo - Beyoncé.
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Al separarme de él, unió nuestras frentes con una mirada de ternura. Sonreí cuando sus dedos acariciaron unos cuantos mechones de cabello platinado antes de colocarlo tras mi oreja, besando la punta de mi nariz, párpados y finalmente mis labios otra vez. Suspiré, mis brazos abrazándolo por el cuello; los suyos, abrazando mi cintura.

Acaricié los mechones blancos de su nuca, como siempre lo hago cada vez que nos besamos. Entonces, mi mano derecha baja por sus hombros deslizandose hasta el borde de su camisa. Me separé, viendo sus ojos. Primero le quité los lentes, dejándolo sobre la mesa antes de volver a lo que estabamos. Otro beso, y le ayudo a quitarse la camisa. Al instante siento que enrojecí. Su piel es pálida, delgado con la músculatura de un chico de diecisiete años.
Noté como él tragó con nerviosidad, sus manos se dirigieron a los tirantes de mi vestido azul para deslizarlos por mis hombros, la prenda cedía debido a que no tenía cierre. El vestido cayó, dejandome en mi ropa interior morada.

Le besé la mejilla, y con el corazón latente a mil, caminé tomados de la mano hasta la cama. Sin dejar de mirarnos a los ojos, me recosté con la cabeza sobre las blancas almohadas mientras Jack subía apoyado de sus rodillas y manos con los que mantenía su peso sobre mi cuerpo. Noté como entrecerró los ojos, observando mi rostro. Cuando apretó los labios, suspiré.

-No sé que debo hacer... -confesé cerrando mis ojos, avergonzada.

-Yo tampoco... -sentí como su cara estaba más cerca de la mía. Abrí mis ojos, y así era.

Jack dejó caer un poco más su peso apoyandose de sus antebrazos. Besó mi frente con dulzura. Decidí ser valiente en vez de una momia, porque quiero esto. Mis manos rozaron sus brazos, acariciandolos con la yema de mis dedos. De sus hombros pasé a su clavícula, de ahí, a su pecho. Jack se estremeció, ocultando su cara en mi cuello.
Me atreví a rozar mis labios desde el lóbulo de su oreja y cuello. Sentí besos húmedos en mi hombro mientras sus dedos retiraban mi sujetador desabrochándolo de atrás; me sonrojé el doble.

Me quedó mirando al haber retirado la prenda, luego una tímida sonrisa apareció por su cara. Relamí mis labios, tomando una de sus manos para llevarla a mis pechos. Nuestras respiraciones se aceleraron en jadeos; los dedos de Jack rozaron mis pezones enviando una descarga que nunca antes había sentido. Se dejó caer, teniendo cuidado en no aplastarme, y timidamente besó mis pechos, justo donde hace un segundo tocaban sus dedos.
No aguanté más y gemí.
Jack me dio una mirada antes de repetir lo que había hecho, esta vez sin detenerse.

-J-Jack... -susurré.

E

l calor que estaba sintiendo se hacía insoportable. Jack le regalaba besos húmedos a mis pezones mientras gemía de vez en cuando. Tomé su cabeza, hundiendo los dedos en su cabello plateado, acercándolo más a mi. Sentía como sus manos parecían estar en todas partes, dudosamente seguras, conociéndome.

-Te quiero... -logré pronunciar cuando nuestros ojos se encontraron.

-Te quiero -dijo él, su voz siendo más ronca.

Se tendió a mi lado, besándonos nuevamente. Mis manos fueron hasta su pecho para comenzar a explorarlo, deslizándolas por su piel.
Bajé la mano por un costado y con las yemas de mis dedos continué trazando una línea hasta el borde de sus pantalones. Jack reaccionó ante esto. Acaricié la zona cerca de sus pantalones sonriendo cuando contuvo el aliento. Lo hacía de manera lenta, como creo que debo hacerlo, sintiendome poderosa.

Apreté mis labios, decidida. Mis dedos desabrocharon el botón de sus pantalones cuando un movimiento brusco me hizo gritar de la impresión para luego reír.
Mi novio me besaba el cuello haciendo un camino a mi mandíbula.

-¡Jack! -mi risa poco a poco disminuyó, correspondiendo el beso que me acaba de dar-. ¿Qué pasó con tímido Frost?

-En esta noche... -susurró-, ni idea.

Nos miramos por unos segundos más. Lo besé con dulzura y pasión, entonces me separé para susurrarle al oído: "Hazlo".
Besé su mejilla cuando apenas asintió. Se alejó por momentos, y escuché su cremallera bajar. Me mordí el labio mientras miraba el techo, ahora más nerviosa que nunca.
Va a doler, de eso estoy segura.

Oí como una bolsa de algún paquete se rompía y me cubrí los ojos con las manos por un segundo. Ya sabía que era eso.
Sólo reaccioné cuando sentí unos dedos tomar los bordes de mis bragas para deslizarlas. Me sonrojé nuevamente. Jack me besó la frente con ternura como si intentara calmarme. Se posicionó entre mis piernas que las abrí un poco más para que estuviera cómodo.

Gemí cuando su pulgar rozó la piel sencible de esa zona. Luego lo sentí.
Era como si mis carnes se separaran para dejarlo pasar, me quejé intentando separarme.
Mala idea.
Mala idea.
Sin embargo, Jack continuaba. Y llegó el momento en que grité al sentir como algo se rompía dentro de mi. El peliblanco besó mi cabeza repetidas veces quedándose quieto.

-Shhh... -decía quitando la lágrima que solté- Tranquila, bonita.

Moví mis caderas como señal de que siguiera, parecía que si se quedaba quieto era peor. Jack entendió, moviendose lentamente mientras lo abrazaba por el cuello.

Mi respiración era acelerada, la de él también. Le susurré que fuera mas rápido una vez el dolor disminuía. Obedeció. Y ambos soltamos un gemido de placer.

-J-Jack... -por instinto, mis piernas también lo abrazaron. Besé sus labios fugazmente- M-Más...

Nunca en mi vida pensé que pediría esto.

Siempre me entraban ganas de reirme cada vez que una mujer pedía más en un libro; la vez en la biblioteca que leía ese libro no apto para mi edad pero que estaba a mi alcance (mientras Jack hacía su investigación), me mordía los labios para evitar reír en esos momentos.
Ahora entendía porqué lo hacían.
No empezamos bien, me dolió, sin embargo, Jack fue cuidadoso durante ese momento. Se movía más rápido, luego disminuía para luego volver a aumentar la velocidad sólo un poco.

Finalmente, llegó un momento en que el calor me recorrió entera. Un momento en que el aliento se me iba para después sentirme liberada tras un gemido de lo más profundo de mi garganta. Sonrojada seguí abrazando a Jack hasta que le pasó lo mismo.

Su cara estaba en mi cuello respirando agitadamente, ambos lo estabamos. Se alejó para tenderse a mi lado, nuestros ojos en el blanco techo de la habitación.
Mis manos fueron a mi estómago cuando -después de unos minutos- lo escuché rugir. La risa suave de Jack me avergonzó. Me cubrí con la sábana cuando él se sentó en la cama para colocarse su boxer e ir a la mesa.
En una bandeja, colocó nuestra cena antes de regresar. Me acomodé para comer mejor, todo se veía delicioso.
Bebí del jugo de fresas y comí un poco del spaguetti, uno de mis platos favoritos.

-Está muy bueno -admití-. ¿No estás emocionado por el campamento?

-No mucho -respondió en un murmuro-. Sólo espero que no sea como el año pasado.

-En cambio yo si lo estoy -confesé sonriente-. Es primera vez que voy a uno, y además estás tu por lo que estoy muy feliz.

Sonrió tiernamente, besando mi mejilla.

Continuamos con la cena hablando de varias cosas. En su mayoría, burlándonos de los chicos...
En fin, aquella fue la mejor noche de mi vida. Y no puedo esperar porque sea mañana.

Campamento, allá vamos

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Créditos pa' mi prima, que me ayudó en este capítulo porque me tocó estar a cargo de mis sobrinos 😒