Componiendo Al Amor (Camren)

Capitulo 4: Creando Havana.

Omnisciente.

Como Lauren había prometido hace un par días a Camila, estaba en el club Havana, un bar donde las personas disfrutaban de un buen trago, conversaciones agradables e incluso si el animo estaba bueno de Karaoke por parte de los presentes.

Havana estaba inspirado en Habana, la capital de Cuba, Lauren lo eligió con su propósito tambien, sabía que Camila era cubana y por su parte ella también tenía raíces cubanas, por lo que llevarla ahí podría sacar las emociones mas profundas en la cantante y las mejores canciones, ademas de conocerla mejor y no solo como alguien de la industria, Camila llamaba su atención, demasiada a decir verdad. ¿Quien no tendría un Crush con Camila Cabello? ¿Existiría alguien que no lo tuviera? Esa era su mayor duda en ese momento porque esos ojos color marrones junto con esa sonrisa la estaba volviendo loca a alguien que nadie nunca había podido domar.

Esperaba sentada en una de las mesas junto con un vaso de mojito en su mano, había llegado hace una hora de Inglaterra, su viaje había sido mas largo de lo previsto al tener que ver mas profundamente lo del álbum de Niall e incluso algunas canciones de Rita Ora. Estaba agotada, exhausta, mas de 10 horas de vuelo para llegar donde Camila, solo esperaba que la chica no la dejara plantada y llegara.

-Traeme una tabla de aceitunas, palmitos, quesos y carnes.- Lauren le sonríe amable al mesero, mientras su vista luchaba por mantenerse abierta. -Y una Red Bull, por favor.-

-¡Lauren!- la voz suave de Camila la hizo dar un pequeño salto en su asiento, giro su rostro mirando a la radiante chica que se veía absolutamente hermosa, insistía en que la morena se vería perfecta aunque llevara un mantel puesto.

-Camila.- se pone de pie, casi boto el mojito por su torpeza. -Por un momento creí que no lo habías olvidado.- besa su mejilla invitandola a tomar asiento a su lado.

-Claro que no.- se sienta sonriendo. -Pero tu llegaste antes al parecer.- mira sus ojeras. -Veo que estas bastante agotada.-

-Llegue recién de Inglaterra y no he dormido nada desde Ayer por la mañana.- dice tomando su cabeza.

-Deberías descansar entonces.- le aconseja, Lauren niega.

-Tenemos cosas que hacer, además estoy bastante acostumbrada.- le guiña el ojo, mirando de reojo como el chico ponía la tabla y su Red Bull bien helada.

-¿Algo mas?- pregunta amablemente.

-¿Que quieres beber Camila?-

-No lo se...- mira la carta de bebestibles.

-Te sugiero el primavera, es exquisito.- le sonríe.

-Si tu lo dices señorita.- bromea la morena. -Quiero un primavera.- le dice al chico quien fue de inmediato por su pedido.

-Te va a encantar, es dulce y no tiene tanto alcohol como los otros tragos.- el sonido de la lata sonó lo suficiente para que ambas escucharan, llevo la lata a su boca dandole un gran sorbo.

-¿Por que no dormiste en el avión?- cuestiona la mujer, sacando un cuadrado de queso.

-Viaje con Morrison, y nos pusimos a componer, grabar.- sonríe al recordar la inspiración que tuvieron en el avión. -Cuando fui a dormir nos quedaba una hora para aterrizar asi que fue lo que dormi.- Camila niega.

-Deberías descansar mas Lauren, no debes sobre exigir tanto a ti misma.- hace una mueca.

-Era necesario esta vez, pero acostumbro a no dormir en los viajes.- mira como el chico le dejo el primavera a Camila para luego retirarse. -Pero fue bueno escribir con el otra vez.-