-¿Por qué?
-No piensas hacen ninguna pregunta, ¿verdad?
-¿Sobre qué? -preguntó ella, con su expresión mas ingenua.
La sonrisa de Jimin se convirtió en una carcajada. Extendió una mano sobre la mesa y estrecho la de Jeongyeon.
-Cualquiera ya me habría agobiado a preguntas -dijo--. Sin duda ya habría creído tener derecho de averiguar algo. Pero tú... no preguntas nada -su sonrisa se apagó un poco-. ¿Es obstinación o simple desinterés?
-Ni una cosa ni otra -declaró Jeongyeon.-. Dijiste que no querías que te hicieran ninguna pregunta, y lo comprendo -se obligó a comer un poco más de arroz-. Dos de las secretarias me han arrinconado en el tocador y me han preguntado si el bebé es tuyo. La gente es demasiado curiosa, Jimin... me he alegrado de no saber nada; así no he tenido que mentir.
-Son terribles ¿verdad? -comentó él-. Qué montón de gallinas.
-No son sólo las mujeres -protestó Jeongyeon con lealtad feminista-. Estoy segura de que muchos de tus colegas son igual de entrometidos.
Jimin movió la cabeza.
-A los compañeros les ha importado un bledo lo del bebé. Todos los chismes que he oído han provenido de las mujeres. Por ejemplo, nunca he oído a ninguno de los compañeros hablar de Hoseok, pero todas las secretarias han hablado de él.
-¿De HoSeok? - Jeongyeon dio un respingo.
-No sabía que su vida sentimental fuera una cuestión de público conocimiento en la oficina-.
Ella nunca había hablado con nadie de HoSeok, ni siquiera con los compañeros o compañeras con quienes mantenía una amistad más estrecha.
A Jeongyeon no le gustaba hablar con nadie de sus asuntos personales. Se desconcertó al oír que Jimin mencionaba a HoSeok y tardó casi un minuto en recobrar el aplomo.
- ¿Qué sabes sobre Hoseok?
-Sé que te mandaba rosas rojas el día de San Valentín y rosas blancas el día de tu cumpleaños -dijo Jimin con voz apacible-. Que te llamaba a través del ordenador en vez de hacerlo por teléfono. Parece que vuestras relaciones terminaron hacia el final de la primavera, pues dejó de enviar flores y llamar por esas fechas.
-¿Dónde has oído todo eso? -preguntó Jeongyeon en un murmullo
-Chismes.
Ella le dirigió una mirada cautelosa.
-Si no te gustan los chismes, ¿por qué los oyes? - Jimin jugó con su tenedor un momento.
-Por curiosidad -admitió.
-¿Sentías curiosidad respecto a mí?
-¿Por qué no? -preguntó Jimin, guiñándole un ojo con expresión astuta-. Hay que conocer al enemigo, como suele decirse.
-¡Vaya! -masculló Jeongyeon fastidiada por haber sido objeto de las murmuraciones oficinescas-. Bien merecido te tienes el ser ahora víctima de las habladurías. Las grandes inquisidoras en el tocador para damas parecían dispuestas a aplicarme tormento para que les revelara lo que supiera sobre ti.
Jimin arqueó ligeramente las cejas
-¿Qué te han preguntado?
-Que si el bebé es tuyo.
Al parecer, Jimin esperaba tal suposición. Su actitud juguetona desapareció mientras estudiaba a Jeongyeon, con los ojos entornados.
-¿Tú qué crees?
DU LIEST GERADE
•It Was Not A Plan• // pjm+yjy
FanfictionLa joven ejecutiva Yoo Jeong Yeon no sentía la menor simpatía por Park Jimin, su atractivo compañero de trabajo, ya que su actitud condescendiente con ella la exasperaba. Debido a ello, no supo si explotar o echarse a reír cuando él le pidió consejo...