O3.

55.1K 5.6K 2.2K
                                    

El pelirrubio fue abriendo de poco a poco sus párpados, sentía un dolor de cabeza insoportable. De pronto se percató que se encontraba acostado boca arriba, visualizando el techo

-¿Donde estoy?-Se pegunto así mismo parpadeando varias veces

Observó el lugar detalladamente, sabía que no se encontraba en casa, estaba en un cuarto ajeno oscuro. En ese momento, recordó haber sido tomado por sorpresa por alguien y luego dormirlo, supuso que lo habían raptado, sin embargo no estaba atado a nada.

-¡¿Hola?!-gritó al vacío-¡¿Que diablos hago aquí?!- este comenzó a desesperarse.

Estaba frustrado, con ganas de desaparecer de la faz de la tierra, las cosas estaban valiendo mierda en su vida, o al menos eso pensaba. Oyó un ruido que lo hizo retroceder al momento que abren la puerta, el pánico se apoderó de él.

-Park Jimin-dijo un hombre con una voz grave que lo hizo estremecer-Venga conmigo por favor

-Dígame donde estoy primero-trató de sonar lo más sereno posible

-Venga conmigo-repitió-Prometo que recibirá respuestas si me acompaña-este se giro dandole la espalda al rubio empezando a caminar.

Jimin por obvias razones estaba dudoso, lamentablemente no tenía otro opción más que seguir aquel misterioso hombre, preferiría eso a quedarse en ese lugar tan tétrico y vacío. Sin decir nada fue detrás del del traje, manteniendo una distancia adecuada entre ambos, y sobre todo estaba alerta ante todo, temía por su vida.

Se detuvieron a lo que relativamente era una oficina, sin embargo para Jimin lucia como de esos lugares donde interrogaban a la gente ante un asesinato o desaparición, lo cual lo puso más nervioso. Todo ese sentimiento desapareció cuando el pelirrubio se dio cuenta que su mejor amigo se encontraba allí, sentado en una de las sillas, mirando a la nada.

Este al verlo sonrió de oreja a oreja y se abalanzó sobre el, sintiéndose mucho más calmado y aliviado. Lamentablemente antes de que pudieran decir otra cosa, el hombre los obligó a sentarse, con la condición de permanecer en silencio. Después de unos treinta minutos que para Jimin fueron una eternidad un nuevo chico apareció en la escena, era joven, tal vez un poco más grande que el rubio y el castaño, tenía cara de pocos amigos

-Vaya vaya-Se sentó frente a los dos chicos, quedando del otro lado de la mesa-Pero que tenemos aquí-sonrió maliciosamente

Los dos amigos voltearon a verse, ninguno se atrevía a decir nada por el miedo a cagarla

-Jimin y...-miro al castaño

-T-taehyung-Tartamudeó

-¿Saben quien soy yo?-preguntó el de cabellera celeste. Los chicos negaron rápidamente con la cabeza-Yoongi, mucho gusto-dijo sarcástico

-¿Como sabes mi nombre?-El rubio trago duro, temiendo por la respuesta

-Por partes Jimin, Primero lo primero-La voz de Yoongi sonaba bastante tranquila- ¿quieres respuestas cierto?-Jimin asintió-Bien, entonces, calladito te vez más bonito

Tae no pudo evitar sacar una risa burlona ante aquel comentario, haciendo que el pelirrubio lo mirara amenazante.

-Park, de seguro has escuchado acerca de Jeon Wick ¿no es así?-Apoyo sus codos contra la mesa. Jimin volvió a asentir-Ese bastardo a matado a cientos de mis hombres, al igual que a otros cientos de personas distintas.

-¿Que tiene que ver ese tal Jeon aquí?-El pelirrubio se quedó perplejo al recordar aquel nombre

"Lo único que puedo te pudo decir es que Jeon está en problemas"

Jeon Wick (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora