Arrestados

3 y 13 Horas de arresto

El genio se encontraba de nuevo solo en la celda tres para menores de edad, habían pasado un par de minutos desde que los oficiales de policía se habían llevado al joven músico, pero para Hiro se había hecho ya una eternidad, después de todo tenia desde las 12 PM del día anterior en el mismo lugar, literalmente había pasado la noche en la estación de policía, estaba tumbado bocarriba en el catre del lado izquierdo, por aburrimiento ya había contado más de 10 veces todas y cada una de las grietas en el techo al mismo tiempo que sacaba las distintas variables posibles en un tiempo finito de 2 horas, desde ser finalmente sacado por su tía de detención, que algún sismo dañara aún más la estructura del departamento de policía haciendo que el techo sobre él se derrumbara, en tal caso debía moverse al lado contrario de la celda para protegerse en la esquina interior derecha ya que se formaría una especie de triángulo de vida entre las dos paredes y una buena fracción del techo, y muchos otros escenarios más que iban desde lo medianamente posible, hasta lo más maniático, obsesivo y simplemente improbable. Pero esa es la personalidad del mitad nipon, siempre pensando las cosas demasiado, y aún así, había terminado arrestado de todos modos la noche anterior, ¡Vaya ironía!

Cinco minutos después, Miguel regresó con un gesto sereno y una sonrisa de satisfacción caminando con las manos en los bolsillos de su chaqueta roja, con un oficial sosteniéndole del brazo para hacerlo entrar, esta vez sin resistencia a la celda.

              -Hola Hiro, ya regresé -el mencionado ni se inmuto ante el regreso del chico, simplemente giro el rostro para verle desplomarse sobre la otra cama imitándole- Mi amiga dijo que venia para sacarme.

              -Me alegro, te irás pronto supongo, suertudo -soltó mirando al techo el genio-

              -¿Qué hay de ti? ¿Crees que tu tía venga a sacarte pronto? -respondió el mexicano girándose sobre el catre para quedar de frente al otro chico, recostándose sobre su brazo-

              -No lo sé -dijo en un suspiro de fastidio- estoy aquí desde las 12 de ayer, te trajeron a las 10 el día de hoy y ella aún no me ha dado señales de vida, tía Cass es un amor de persona, pero también tiene su carácter, llevo aquí casi 11 horas, así que sólo espero que venga pronto antes de que mi cerebro colapse por aburrimiento -dramatizó el Hamada llevándose el brazo a los ojos como un pésimo actor de telenovela, el joven músico sólo se rió ante la interpretación del chico-

              -Apuesto a que no debe tardar, sabes, no conozco a tu tía, pero apuesto a que esta haciendo esto porque le preocupas y trata de hacerte entrar en razón, así que debes importarle mucho -sonrió el mexicano dejando ver ese hoyuelo en su mejilla-

              -Eso creo, bueno soy lo único que tiene -el genio se giró para adoptar la misma posición del contrario quedando de frente a él, pero sin mirarlo directamente- sabes, mi hermano y yo quedamos huérfanos cuando teníamos 3 y 10 años, y ella fue quien se hizo cargo de nosotros, a decir verdad siempre hizo lo mejor que pudo, digo, de la noche a la mañana tenia que lidiar con dos niños genios y debo admitirlo, quizás algo revoltosos, yo más que Tadashi, pero a pesar de todo, no puedo negar que fuimos felices en aquel entonces -una ligera sonrisa llena de nostalgia lejana se escapó del Hamada-

              -¿Fuimos? ¿A que viene eso? -dijo algo confundido el muchacho de ojos avellana-

Aquella expresión de nostalgia fue rápidamente remplazada por una que mostraba un dolor aún punzante en los ojos oscuros del nipon, los recuerdos de 3 años en el pasado aún seguían tan nítidos como en su entonces, aunque claro, había continuado con su vida, estaba a un par de semanas de graduarse con honores de la universidad, ya tenia prácticamente segura una plaza como catedrático en la universidad, y varias ofertas de trabajo como director creativo en "Krei tech industries", y más empresas por el estilo, a decir verdad la vida le estaba brindando grandes oportunidades, y siempre que estaba por rendirse, recordaba a su hermano, sin embargo, eso no quita el dolor de su perdida, y es que ¿Cuánto tiempo necesita un corazón para recuperarse de una perdida tan grande? Ciertamente nadie podía entender lo que significaba para el genio perder a su único hermano- Hace tres años... mi Hermano Tadashi falleció... -el genio le dio la espalda al músico para continuar- Sabes, las cosas pasan, y no me quejo, a pesar de todo, me he esforzado por seguir adelante, me va bien en la escuela, tengo una tía que me adora a pesar de ser un cabeza dura, amigos que me apoyan a pesar de todo, y un porvenir prometedor en varios aspectos, no tengo una mala vida, pero a decir verdad, no estoy seguro de si soy feliz, aún duele algunas veces...