El principio del fin (Día Uno)

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Tras el intento fallido de declararle su amor al pequeño Rivera, decidió dejar de hacer planes respecto a ese tema, simplemente va a dejar que las cosas surjan entre ellos, va a dejar de tratar controlar aquello que sale de sus manos, por lo que, decidió centrarse en lo que si controla, se deshizo de la ropa sucia (a lavarla, no crean que la destruyó ni nada), y se aseguró de preparar absolutamente todo lo necesario para que fuera perfecto. Llegada la hora, montó su motoneta, y se encaminó al hotel para recoger al Rivera.

Por su parte el pequeño latino se encontraba tratando de elegir  que cosas debía empacar en su pequeña maleta, básicamente sería, su pijama para esa noche, y un cambio de ropa para el día siguiente, iría con Hiro a la universidad de nuevo, y de ahí pasaría a dejarlo al hotel, sin embargo, como todo chiquillo enamorado, quería lucir bien para el nipón, así que no lograba decidir entre el pijama rojo con trenes que le había dado su mamá Elena en Navidad o el short azul marino de perritos que va con una playera blanca sin mangas con el mismo perro estampado, una muy fresca pero "aceptable" o una más protectora pero infantil... esa era su crisis existencial en ese momento, y dudoso de preguntar, finalmente se armó de valor y le pidió una opinión a Josué.

_...¿La roja o la azul? -le dijo al de ojos ámbar sosteniendo ambas pijamas.-

_...Depende... ¿Te lo quieres coger o sólo quieres que se ría de ti? No mames Miguel, llévate un puto pantalón, una playera cualquiera y ¡ámonos!, ósea, la roja parece de niño de seis años, y la azul parece de golfa de 17, ¡ninguna! -respondió el mayor haciendo un ademán de desaprobación con las manos.-

_...No se para que te pregunto... de todos modos tus respuestas nunca me ayudan -dijo fastidiado el Rivera mientras arrojaba ambos conjuntos sobre la cama.-

_...Como sea, yo ya te dije lo que pienso... -dijo caminando a la salida- pero si me lo preguntas... al chino parecen gustarle más los colores azul y morado... el rojo es más cosa tuya... ¡nos vemos! Tengo una cita con una chamaquilla muy linda que me encontré el otro día de camino a la feria... -el Rivera rodó los ojos.-

_...Ándale, ojalá y la cagues con ella para que luego Mamá Elena te jale de las orejas y te obligue a casarte por pendejo picaflor...

_...Existen unas cosas mágicas llamadas anticonceptivos, y bueno, además de embarazos también previenen el contagiadero de ve tu a saber cuantos bichos feos... tal vez quieras que te de un par ahora que vas con tu chino... -le sonrió burlón.-

_...Idiota, algunos sabemos pensar con la cabeza, no como otros que piensan con "la cabeza de abajo" -haciendo un marcado énfasis en el otros señalándole con la mirada acusadora.-

_...Eso dices ahora Miguel, perate tantito más... y verás que hasta tú, santo y puro Miguel Rivera, te conviertes en un ser hormonal y calenturiento, de tus bellas baladas pasarás al sacrilego reggaeton...

_... -gasp in mexican- ¡Que se te haga la boca chicharrón Josué Cruz! ¡Eso es demasiado bajo hasta para ti! -el otro se soltó a reír.-

_...Prioridades... te molesto más que te dijera reggatonero que golfa... ¿Será qué ya llevabas mucho tiempo en el closet y ahora sale tu verdadero tú?

_...Cada quien sabe que hace con su cuerpo, así como tú, pero escuchar reggaeton es calcinar el espíritu, y taladrar los oídos del prójimo, ni Satanás sería tan desgraciado para hacer algo así... -dijo llevándose las manos al pecho como si fuera a rezar.-

_...Seras mamón -"aunque no lo discuto" pensó- 'ta güeno, 'ta güeno, se te hace tarde y a mi también, te veo mañana Migue - lo pesca de la playera y lo jala hasta atraparlo en sus brazos y revolverle el cabello- portese bien, y se porta mal, no sea pendejo, que me lo cobran como nuevo... -lo libera- ¡chaito!

ArrestadosWhere stories live. Discover now