-20©-

695 109 9
                                    

Capítulo dedicado a @perysarratia. Seguid votando y comentando para seguir dedicando y publicando.

-¿Y nunca te has llamado cobarde por lo que hiciste?

Su susurro me llega cuando estamos a una manzana de casa. Mientras caminábamos, la oscuridad ya había caído sobre nosotras.

-No. Lo hice por algo.

Aunque me vino algo peor.

¿Que ya no quieres ayudar a espíritus? ¡Pues venga, toma al mismísimo Diablo!

Digamos que me tomo bastante tiempo el que no se riera de mi, intentando hacerle creer que en realidad podía ver fantasmas. Dejó de tomárselo con guasa cuando le dije que podía ver a su hermano.

-¿Y no puedes enfrentarte a tu madre? Lo digo porque fue tu hermano, deberías de haberle defendido.

-¡Lo hice! Pero cuando nos mudamos, no me quedó otra que acatar sus órdenes. Era menor de edad, ¿qué querías que hiciera?- dice con un hilo de voz.

No se porqué, pero una ira indescriptible surge de mi pecho con cada uno que pudo defender a Stephen y no lo hizo aquella noche.

-No siento decirte el hecho de que eres una cobarde.

Se queda callada. Porque sabe que tengo razón.

Claro que tuve que callarme cuando me dijo que si lo que dije era cierto, que si solo yo podia ver a los fantasmas y no lo demás, cómo iba a ver ella a su hermana. Omití el hecho de decirle que era el mismísimo hijo del diablo.

La paro cuando estamos a metros de casa. Le levanto la barbilla, ya que se avergonzó y bajó la cabeza.

-Si nunca dices lo que piensas. Si no proteges a los débiles. Si nunca haces lo que quieres. Si no defiendes tus ideas. Si siempre le ríes las gracias al que manda. Si te inclinas ante el rico. Si andas todo el día de rodillas. Si nunca das la cara. Si siempre tienes miedo. ¿Te extraña que te digan que eres una cobarde?- aprieta los labios y yo ahueco su cara entre mis manos- Prométeme que cambiarás.

No solía pedirle esto a la gente.

Nunca les pedía que cambiasen. Pero veo un gran futuro en ella, y lo va a mandar al carajo si sigue cerrando su boca. Temerosa de todos, de toda cosa. 

Cuando asiente, sonrío y la agarro del brazo cuando entramos al vestíbulo de mi casa. Hay silencio, cosa que no es normal. Ya que supuse que estaría enfadado, ya que dije que saldría en busca de trabajo, y no volví hasta entrada la madrugada.

Noto el miedo en los ojos de Sally, que mira alrededor, encogida. Y entiendo el porqué. La negatividad, la maldad, aún vacila en el aire. Pero ella no nota la diferencia, yo sí. Ésta vez no es tan fuerte.

Normalmente sentía su presencia fuerte, imponente, pero ésta vez la noto débil. Me olvido incluso de Sally cuando un miedo por que algo le haya pasado al diablo que me aterroriza y a la vez me... ¿Qué, Tessa, por el amor de dios? ¿Qué mierda ibas a decir?

Trago saliva y doy un paso hacia delante.

-Stephen. Ya he llegado.

Noto el escalofrío que le da a Sally de reojo, pero cuando la veo estirar la mano para encender la luz, le sujeto el brazo, firme.

Niego.

-No le gusta la luz. No lo hagas.

Me mira con el ceño fruncido y por un segundo creo que saldrá corriendo, pero me sorprende asintiendo y apretando los labios.

DIABLO✓Where stories live. Discover now