Que hable nuestra piel

Capítulo 33- LA

Aitana
-No me voy tranquilo-me dice Luis acariciandome la mejilla-
-Luis tiene una orden de alejamiento y creo que ya tiene las cosas claritas, además que me quedo en casa de Emily
-Te llamo cuando llegue ¿vale?
-Vale, te quiero
-Y yo mi amor, una semana
-Una semana

Nuestros labios se unen en un largo e intenso beso, dando paso a un abrazo de esos que no querrías que acabara nunca, y mientras aprovecha para acariciar mi barriga, cada vez un poquito más abultada. Mi sitio preferido del mundo.

Me da un beso en la frente, o mejor dicho en el flequillo y coge la maleta mirándome con los ojitos brillantes

Me dice adiós con la mano cuando se gira para ver si me he ido. Le mando un beso intentando contener mis ganas de llorar. Voy a estar bien, echo muchísimo de menos a Emily. Pero se que él no va a estar tranquilo y joder le voy a echar mucho de menos, no me gusta esto, quedarme aquí, el allí, me da cierto miedo.

-Uy cariño, pareces un zombie-me dice Emily pasándome una taza de café-
-Estoy embarazada, mejor colacao
-¿Estas bien?
-Luis aún no me ha dicho nada, y han pasado 13 horas, tendría que estar ya en casa
-¿No has dormido nada no?-dice pasandome un vaso de leche y el colacao-
-Pues no la verdad, pero da igual, hoy tengo el día libre
-Tranquila Honey, te llamará
-Echaba de menos hasta que me llamaras honey-digo esbozando una sonrisa nostálgica a la que me corresponde con un cálido abrazo-

Oigo mi móvil y voy corriendo a cogerlo dándome con la pata de la cama en el dedo meñique del pie

-¿Ya has llegado?
-Si, ¿que te pasa?
-Que eres subnormal y has tardado un montón en llamarme y he venido corriendo a coger el móvil y por poco no me rompo el dedo pequeño del pie
-Ey ey, respira que te me ahogas, he ido a buscar a la niña a casa de Paula y en fin, me ha entretenido, pensaba que estarías durmiendo perdona
-No pasa nada, me voy a dormir un poco que no he dormido una mierda
-Jo Aiti lo siento de verdad
-Que no pasa nada
-¿Ya te has enfadado?
-No
-Aitana...
-Déjame, ya se me pasará
-Te quiero mucho tonta, échate a dormir anda
-Te odio, es que eres idiota de verdad es que no me dejas ni enfadarme, coño si estoy enfadada no me digas te quiero
-Te quiero te quiero te quiero
-Me pones histérica de verdad que no puedo contigo
-A si que te pongo eh...
-La madre que te parió, te cuelgo

Me manda miles de besos muy sonoros y cuelgo con una sonrisa en la cara

-Em, ya ha llegado Luis, me voy a dormir un rato-digo volviendo a la cocina-comedor-
-Vuelvo a la hora de comer ¿vale? Tú descansa
-Gracias de verdad, haré la comida
-Gracias amorcito

Cepeda
-Aitana hija que solo tienes unas décimas de fiebre-le digo tapándola hasta arriba en el sofá-
-Que estoy muy mala papá
-Has salido a mi, igual de quejica
-Cuéntame que tal esta semana va
-Pues muy bien, tuvimos un encontronazo con el cabrón de su ex pero ya está todo arreglado, el resto de la semana genial, por las mañanas ella trabajaba y por las tardes pues de turisteo
-Joder que pesao el pavo ese, por lo demás pues genial, ¿está más gordita?
-La verdad que si, se va notando la barriguilla un poquito más
-La echo de menos

La miro a los ojos y los tiene brillantes, supongo que por la fiebre

-No sabes lo feliz que me hace escuchar eso cariño
-Es que no se, entre que estoy sensible, que te echaba de menos a ti y que aún queda una semana para que venga Aitana me hace pensar tantas cosas, me hace pensar en que no se que haría sin ti papá, que lo eres todo para mí, y es que le he cogido tantísimo cariño a Aitana, joder es que os necesito tanto
-Yo sí que no se que haría sin ti hija

Le doy un beso en la frente y la noto más caliente

-Uy, te ha subido la fiebre, igual estás delirando y todo. Duerme un rato a ver si te hace efecto el ibuprofeno cariño