¿Y si todo fuera un sueño?

Esa cosa especial

 Si le tuviera que poner nombre creo que se llamaría el botón del sueño. Se trata de una especie de activador en el cual tu subconsciente refleja en tus sueños historias tan reales e increíbles que bien podrían formar parte de uno de los mejores libros de historia y fantasía. Es algo que, ni siquiera con el paso del tiempo somos capaces de controlar, simplemente una noche te acuestas y ¡puf! de repente te ves inmerso en una aventura (puede durar más o menos tiempo, depende del tiempo que tarde tu cerebro en despertar) que eres capaz de recordar con bastante claridad al día siguiente. En el momento en que tienes el primer sueño, la magia ya está en ti.

Esa es la mayor parte de la "cosa especial". Supongo que esperarías algo más fascinante y esotérico, pero la forma en que yo veo la magia es un suerte de casualidades y hechos que ocurren a tu alrededor de forma extrañamente positiva. ¿No te ha ocurrido alguna vez que has estado en el sofá viendo la televisión aburrido porque no ponen nada interesante y de repente al cambiar de canal has encontrado algo muy interesante en lo que no habías reparado antes y un pensamiento fugaz ha recorrido tu mente planteándote si es cosa de magia? ¿Y cuando te encuentras dinero por la calle? Es un dinero

imprevisto que puede alegrarte el día. No es filosofía barata. Es otra forma de ver la vida.

Mi botón del sueño se activó hace ocho o nueve años. Pasaba una racha un poco mala y de repente un día me desperté después de un sueño muy vívido en que conseguía escapar de un villano que me quería matar. Decidí apuntarlo. Después de varios sueños, decidí vivirlos de verdad, así que decidí revivirlos en mi cuarto, cuando nadie me veía. Al principio fue difícil, porque me creía loca al estar hablando al aire, pero una vez te concentras, una especie de sensación extraña invade tu cuerpo y puedes vivir las cosas tan profundamente como si tuvieras a tus personajes delante. Y eso desembocó en otro fenómeno extraño: la transducción.

La transducción es el paso de la fantasía a la realidad a través se objetos y seres cotidianos. Tampoco tienes control sobre ellos, al menos no del todo. Es un fenómeno difícil de reconocer, porque se esconde en los detalles. El ejemplo más claro que yo he vivido fue hace cosa de un mes, cuando volvía a estar inmersa en el mundo de Dentro del Laberinto, concretamente en Dulce como un Durazno, de la increíble @AmaterazuHime. La mañana siguiente, me levanté temprano como todos los días para ir a hacer deporte, cuando esa sensación extraña de que te están observando recorrió mi cuerpo haciéndome girar... para ver que no había nadie. Al principio me puse un poco nerviosa, pero enseguida me concentré en lo que estaba haciendo, no sin antes pensar (como aquel que dice una tontería), que la lechuza blanca me estaba siguiendo tras enterarse de mi "botón del sueño" y de que me fascinaba tanto la historia de Jareth y Sarah. Sigo corriendo y veo una paloma blanca que vuela muy cerca de mí y se coloca en el suelo, a pocos metros de donde me encontraba. Lo lógico sería que la paloma se alejase cuando me viera llegar, pero no fue así. Permaneció quieta, mirándome hasta el punto que me puse enfrente, le sonreí y ella se me acercó un poco más. "Debo estar perdiendo la cabeza", me dije, así que seguí a lo mío. La paloma alzó el vuelo e iba de árbol en árbol siguiéndome hasta que paré para descansar. Una vez allí, en un claro de un parque, me senté en un banco y le di migas de pan, pero quedó en el árbol observando cada uno de mis movimientos. De vuelta a casa fue igual. Antes de entrar, fascinada

por aquella blanca paloma, le hice una reverencia y ella se fue a modo de despedida. Desde entonces la encuentro casi todos los días en un poste de la luz o entre los árboles cada vez que voy a hacer deporte.

Y hasta aquí llega mi explicación sobre esa cosa especial que todos llevamos dentro y que hay que saber encontrarla. Por lo tanto, ya sabes, antes de dormir, deja junto a ti una libreta y algo con lo que escribir, por si salta tu botón del sueño. Ten cuidado: Hay sueños que pueden no interesarte, que te pueden confundir. O por el contrario puede que tu mejor sueño te despierte a las tres de la mañana. Es duro, pero volver a dormir y apuntarlo a la mañana siguiente no sirve, ya que se te habrá olvidado o que ya no recuerdes gran parte. Y por lo de la transducción, sólo has de poner atención en los detalles, ya que la más mínima cosa puede darte una sorpresa.

Sin nada más que añadir, empieza la verdadera historia, porque "esa cosa especial" puede cambiar tu vida hasta el punto de plantearte si todo lo que tu concebías como el mundo real no es más que un sueño...