¿Estoy escribiendo un libro?

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Me despierto con mucho calor
Cualquiera diría que estamos en pleno verano...

Abro los ojos un poco pero se me cierran. No me apetece levantarme. Además, esta cama es tan cómoda que no parece el camastro donde dormimos Frizz y yo.

Y ese olor a rosas recién cortadas... 

Abro los ojos

- Espera... ¿Rosas?
Me incorporo de un salto ¿Dónde demonios estoy?

No es la habitación donde me acosté anoche. Esta es mucho más grande.

Las paredes son ocre claro y el suelo es de terracota con alfombras en puntos estratégicos de la habitación. La pared que da al exterior tiene altos y estrechos ventanales a lo largo de la misma. En el centro hay dos puertas acristaladas que van desde el suelo a escasamente dos metros del techo y que dan lugar a un gran balcón con balaustrada.

La habitación irradia luz y alegría, salvo la parte donde se encuentra la cama, que permanece en penumbra porque las cortinas están corridas. Es el único área de la habitación con cortinas.

En la pared derecha (visto desde el balcón) hay una gran cama con dosel en tonos rosas oscuros y elegantes. La estructura es de caoba.

Junto a la misma hay una gran cómoda en tonos oscuros y sobrios a juego con la cama.

Encima de la cómoda está el ramo de rosas.

El resto de la habitación está decorada en tonos marrones, ocres y dorados.

En la pared opuesta a la exterior está la puerta, de caoba con unos pequeños adornos florales rojos y verdes en la esquina superior izquierda y en la esquina inferior derecha.

A la izquierda de la puerta, casi pegado a la pared, hay un gran armario estilo rococó con detalles dorados.

A la derecha de la puerta hay un tocador marrón oscuro con un gran espejo y cajonera. Los adornos de los cajones son ocre.

En el ala derecha de la habitación (visto desde la puerta) hay una gran alfombra con varios sofás blancos formando un cuadrado entorno una mesa de café blanca.

Los sofás están situados frente a ventanales.

La pared del fondo, tras los sillones, está repleta (de una esquina a otra) de estanterías con todo tipo de libros.

En resumen, podría pasarme toda la vida aquí y no echaría en falta nada. La habitación es tan grande que incluso se puede bailar.

-Es... preciosa...
Quien la ha decorado conoce mis gustos al más mínimo detalle.

Voy a vestirme y hablaré con Jareth.

Me dirijo al armario a por algo de ropa.

Lo abro

- ¡Jareth!

Esperaba encontrar otro tipo de ropa.

Solo hay vestidos pomposos y largos con zapatos de salón de diferentes colores. Todos son en tonos pastel.

No es mi estilo. Y él lo sabe.
- Era todo demasiado perfecto

 - Nunca estás conforme

Me habla desde atrás. Me giro en dirección a la voz, cuyo propietario se encuentra recostado en la puerta cruzado de brazos como si esperase un tren.

- Yo no he dicho eso

- Lo piensas

Ya viene con ganas de pelea. No cambiará nunca...

¿Y si todo fuera un sueño?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora