Nueve.

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«Capítulo nueve.»

Gabriela.

Terminé de bañarme y salí de la ducha, me puse ropa normal, asi cuando este en la casa de Valen me cambiaba allá, guardé todo en una mochila y cuando ya estaba abrigada empecé a bajar las escaleras.

— ¿A dónde vas?—Preguntó mi papá cuando me vio pasar por la sala de estar, giré los ojos y lo miré.

Estaba sentado en el sillón, mirando tele.

— Por ahí, vuelvo tarde.—Avisé e intenté seguir caminando, pero él volvió a hablar.

— ¿A quién le pediste permiso?—Preguntó en un tono algo molesto, no se quién se creía para venirme a reprochar eso, justo él.

— Nunca te importe ¿Qué te hace pensar que podes hacerte el buen papá ahora?—Como siempre que decía algo así de él, se quedó callado, ni me miró.

Y me dolió aun más que no me haya negado nada de lo que le dije.

Me dirigí a la puerta enojada y dolida, justo cuando estaba por salir me volvió a hablar.

— No vuelvas en mal estado porque no te dejo salir nunca más.—Dijo, no lo miré solo asenti con la cabeza.

Hoy no tenía ganas de estar de mal humor por él, no tenía ganas de discutir como siempre, hoy no.

Después de caminar como medía hora con cara de culo, llegué a la casa de Valentín, pude ver un auto negro estacionado afuera, lo que me hizo pensar que tenía visita y que capaz hoy estaba ocupado. Igualmente no lo iba a plantar otra vez, ya demasiado con lo que le hice el otro día.

Golpeé la puerta y metí las manos en los bolsillos de mi campera esperando a que me abra la puerta, hasta que lo hizo, pero no él.

Era la misma mujer del cuadro que tiene en la cocina, su mamá.

— Hola ¿Te puedo ayudar en algo?—Preguntó amable, y cuando sonrió pude ver el parecido a Valen que tenía.

— Hola soy Gabriela.—Me presenté.—Estaba buscando a Valentín ¿Está en...—No me dejó terminar que un gritó de emoción salió de su boca, me dio un beso y volvió a sonreír.

— ¿Sos la novia?—Preguntó haciendome pasar de un tirón para adentro, y al recibir todas las miradas de lo que yo suponía que eran los parientes de Valentin, sentí un calor en todo el cuerpo.

— Eh...—Murmure mirando a todos.

— Ma ¿Qué pasó?—La voz de Valen hizo que saliera de mi estado de shock, y cuando lo vi aparecer por mi campo visual me acerqué lento a él y lo abracé escondiendome.

Estaba nerviosa, y lo único que podía hacerme salir de ese estado era estar con Valen, al lado de él o aunque sea sentir su presencia.

— ¡Ay Valen tiene novia!—Escuché una voz femenina, lo apreté más a mi y largue un suspiro.

Seguramente que él estaba como un tomate.

— N-no es mi... mi —Tartamudeo nervioso, tragué saliva y me separé de él.

— No soy su novia.—Aclaré mirando disimuladamente a las cuatro personas que habían en la sala, juro que cuando entre creí haber visto el doble.—Soy su amiga.—Miré a Valen.

Estaba con las mejillas rojas y sus ojos azules parecían buscar una salida.

— Mala mía, mala mía.—Habló la misma voz femenina, era una chica, unos quince o catorce años tendría.

— Perdón.—Dijo la mamá de Valen acercándose a mi con una sonrisa cálida.—Soy Inés, la mamá de Valentín.

Le sonreí y repetí mi nombre.

Después de ese rato incómodo ya todo estaba más calmado, hasta Valentín y yo. Pasé un rato con su família era muy copada y unida, se notaba el amor que se tenían.

— Son unos pesados.—Dijo cuando cerró la puerta de su pieza, me reí y negué con la cabeza.

— Me caen bien.—Hablé sentandome en su cama y mirándolo, sonrió y él también repitió mi acción.—¿Listo?—Pregunté sabiendo las cejas y mirándolo.

— ¿Para qué?—Preguntó confundido.

— Para que te viole.—Me tiré arriba de él, tomandolo por sorpresa, quedando con todo mi cuerpo pegado al suyo.— ¿Qué? ¿Creiste que era mentira?

— Ay Gabi.—Se río avergonzado, apreté sus cachetes y dejé un beso en su nariz, poniéndolo colorado.

Me reí levemente y me pare, tampoco quería que le de un ataque de nervios.

— Veni, hay que buscarte ropa.—Hablé dandole la mano y haciendo que se pare conmigo.

Empezamos a buscar en su placard para ver si tenía algo para salir, y para mi suerte si lo tenía, o capaz que todo le quedaba muy bien.

— Veni.—Hablé cuando salió del baño ya vestido, sonreí cuando lo hizo tímidamente.

Llevé mis manos a su pelo y lo empecé a peinar para que quede más acomodado mientras él me miraba atentamente.

— ¿Qué?—Preguntó cuando mi vista no salió de él.

— Estas tan lindo.—Sonreí y acaricie su cara, largó una risita nervioso y de inmediato sus mejillas se tiñeron de rojo.

— Vos también.—Dijo sonriendo.

Una sensación extraña recorrió mi cuerpo hasta sentrarse en mi estómago, y no supe si fueron sus ojos cuando me miraron o si sus manos cuando fueron a mi cintura que me hizo actuar de tal forma.

Llevé mis manos a su nuca y lo acerqué más a mi cara, sintiendo como su aliento chocaba contra mis labios, tragué saliva, cuando estaba decidida y con la situación hasta las manos escuché como la puerta se abría.

Logrando que nos separamos rápidamente y que yo miré para ver quién era que nos había interrumpido.

— Ay perdón.—Dijo la mamá de Valen cerrando la puerta rápidamente.

Lo miré con la misma sensación rara en mi cuerpo y cuando me fijé en sus mejillas, estaban completamente rojas y pasaba sus manos nerviosamente por su pelo, desacomodandolo y volviendolo a acomodar.

— Ya van a ser las doce, hay que ir yendo.—Dije buscando nerviosa mi campera.

— T-toma.—Me la extendió, la agarré y sonreí.

— Gracias.—Murmure.—¿Vamos?—Lo miré, asintió poniendo sus manos en sus jeans y salimos de su pieza para ir a la joda.—¿Estas nervioso?—Pregunté cuando ya habíamos salido de su casa.

Me miró abriendo los ojos y tragó saliva.

— Por la joda.—Aclaré para que no crea que es por lo de recién.

— Ah...—Exclamó haciendo un ruido con su boca.—No se, creo que si.—Se río un poco y me miró.

— Veni, acercate.—Dije sin dejar de caminar, él hizo caso y pegó su costado con el mio haciendose el divertido.

Me reí y cuándo sentí su mano rozar la mía, la tomé, poniéndo su brazo encima de mis hombros y caminando así.

Me miró y yo sonreí.

— Tengo frío.

Fruncio el ceño, pero igualmente sonrió y se apego más a mi, apoyando su cabeza arriba de la mi.

Y así caminamos, hablando de cualquier cosa y riendo.

















Maratón 1 | 3
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Y bueeeno, sale ese maratón?

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