Capitulo 43

3.1K 272 29
                                    

Mierda, decir que no estoy asustado en este momento es estar mintiendo, ¿que mierda le digo?, joder ¿como es que Leila logro acercarse a ella?, se supone que tiene a Sawyer joder, esto es una puta mierda. Por primera vez en mi vida estoy en territorio desconocido y no se que hacer.

Anastasia me mira seriamente desde su asiento, con sus brazos cruzados y una ceja alzada, en espera de una respuesta, pero mi mente simplemente esta en blanco.

-¿No me vas a responder? - Su voz es demandante y me atrevo atrevo a decir, que hasta algo intimidan te 

-De acuerdo, si conozco a esa mujer, ¿recuerdas, que cuando presente a Maddie, dije que me había acostado con algunas mujeres? - Ella asiente a mi pregunta sin decir palabras - Pues Leila, era una de ellas.

-¿Y el contrato? - Sus ojos azules no han dejado de mirarme, joder se ve tan malditamente caliente así enojada, que la quiero tomar aquí y ahora.

-Hice que cada una de ellas firmaran un acuerdo de confidencialidad, lo que significa que ninguna de ellas puede hablar con nadie sobre nuestros encuentros sexuales - Bueno, digo parte de la verdad ¿no?

- Bueno, esa chica no respeto mucho el contrato, ¿por que no me hiciste firmarlo a mi? - Su pregunta me sorprende por completo, ¿ella no necesita firmar ningún puto contrato?

El único papel que quiero que firme, es el que confirme que por fin va hacer la sra Grey, mi esposa, mi mujer. Sin pensarlo dos veces me paro de mi asiento y me acerco a ella y me arrodillo frente a ella.

-Bebé, si no te hice firmar ese contrato es porque tu eres diferente a todas ellas, lo que tuve con ella fue solo sexo, contigo es diferente. Te amo, estoy enamorado de ti y quiero que todo el mundo sepa que eres mía y que soy tuyo - Ella intenta ocultar una sonrisa ante mis palabras.

-Pero sigo enfadada contigo, no me hablaste de tus "noviecitas" y tus contratos de confidencialidad. - Ella se para de su asiento y yo la miro completamente fascinado desde mi lugar.

*Reproducir canción desde aquí* 

Me paro del piso y camino lentamente hacia ella, abrazándola por detrás, corro su cabello hacia  hacia un lado y comienzo a besar su cuello, provocando que leves y dulces gemidos se les escapen de sus labios.

-¿Sabes lo jodida mente excitante que te ves, cuando te enojas? - Pregunto en su oído, mientras mis manos masajea sus senos, por encima de su camisa.

Ella simplemente niega con la cabeza ante mi pregunta, sonrió como un idiota al escuchar sus gemidos, una de sus manos van directamente a mi miembro, que esta esperando ansioso por ella. De un solo movimiento la volteo y beso sus labios, como si mi vida dependiera de ella y técnicamente es cierto, la siento en mi escritorio tirando todos los papeles que tenia perfectamente ordenados en el.

Desabrocho su camisa lentamente, dejando ver sus hermosos senos vestido solamente con su sujetador negro de encaje, sonrió al ver que es de esos sujetadores que tienen el broche adelante, así que de un solo movimiento con mi mano desabrocho su sujetador. Levanto la mirada y me la encuentro a ella, mirándome con ojos lujuriosos, sus mejillas sonrojadas y su dientes mordiendo sensualmente sus labio inferior. Ella es una Diosa y es mía.

-Voy a follarte Anastasia, voy a follarte hasta que el edificio entero se aprenda nuestros nombres. 

Acerco mi rostro hacia uno de sus senos llevándolo a mi boca, para disfrutar de su exquisitez, Anastasia gime mientras jala de mi cabello, con mi mano le doy placer a otro de sus senos, sus gemidos se escuchan por toda mi oficina y me atrevo a decir que hasta en todo mi edificio. Me separo de ella, beso sus labios casta mente y con una sonrisa me arrodillo ante ella, por la sonrisa en su rostro, se que sabe lo que se viene.

Levanto su falda y quito sus bragas dejando a mi vista su feminidad, esperando ansiosamente por mi.  Mis dedos acarician suavemente su zona íntima, provocado que Anastasia suelte pequeña gemidos y gritos de placer. Ella está tan húmeda y preparada para mí, pero quiero más, quiero deleitarme con su sabor.

Tomándola por sorpresa, acerco mi rostro a un intimidad y mi boca se deleita con su dulce sabor, ella es un dulce afrodisíaco, sus manos van hacia mi nuca Jalandome más hacia ella. Mi lengua le da placer y la vez disfruta de ella. Siento como Ana se tensa, ella se recuesta en mi escritorio sin dejar de gemir, Ana está a punto de llegar a su orgasmo. Mi lengus hace movimiento circulares y en solo segundos Anastasia se corre en mi boca, dejándome probar de ella.

Me separo de ella rápidamente y desabrochó mi pantalón liberando mi miembro que está esperando feliz y ansioso por ella.  Sin darle tiempo a que se recupere por completo, hacerlo mi miembro a ella y me hundo dentro de su ser.

Nuestros gemidos se escuchan por toda mi oficina y estoy seguro, que incluso por toda mi oficina y no me importa eso, mis movimientos son rápidos y duros, pero sin ser brusco. Anastasia me mira desde su lugar, gimiendo de placer, con sus ojos brillando de lujuria, mis manos acarician sus senos. Sus paredes vaginales se contraen en señal de que está llegando a su orgasmo y a decir verdad, yo también.  Luego de unas cuantas embestidas ambos nos corremos gritando nuestros nombres.

-Voy a enojarme más seguido - Sus palabras me hacen sonreír.

-Bueno bebé, tú prefieres enojarte, yo prefiero tener sexo - Digo mientras veo como su pecho sube y baja a compás de su respiración agitada, gotas de sudor caen por su cuerpo.

Y sin pensarlo dos veces atacó nuevamente su boca, y así estamos por horas, disfrutando uno del otro como, solo nosotros sabemos.

***

- Me importa una mierda sus putas excusas, Leila se acercó a Anastasia y les dejé bien en claro que ninguna de mis sumisas tienen que acercarse va ella - Estoy en mi despacho, discutiendo lo que ocurrió esta tarde con Anastasia y Leila.

-Sr, yo... - Sawyer iba a hablar, pero yo no lo dejó.

-Tu nada, si quieres conservar tu empleó, más te vale que esto no se vuelva a repetir y eso va para todos ustedes - Hablo autoritariamente mirando de manera intimidante a mi equipo de seguridad.

Antes de que uno de ellos me responda mi celular suena, les hago una señal, para que se retiren. Contesto de inmediato al ver que es Anastasia.

-Hola bebé - Sonrió como un idiota, recordando lo que ocurrió en mi oficina

Mi sonrisa se borra por completo al escuchar los sollozos de Ana, me paro de la silla rápidamente, para ir en busca de Taylor y Sawyer.

-Bebé cálmate ¿Qué ocurre? - Estoy jodidamente desesperado.

-Christian mi abuelo, mi abuelo está en el hospital.







Escena del próximo capítulo

Tengo a Ana en mis brazos mientras llora en la tumba de la persona que más ama en el mundo y de la persona que más la amo. Odio verla así me siento impotente ante esta horrible situación, ella no merece esto.

***

-Anastasia por favor - Me acerco a ella, pero retrocede

Lágrimas recorren su rostro y siento algunas en el mío. Esto no puede estar pasando. Vuelvo hacer el intento de tocarla, pero ella vuelve a retroceder.

-¡NO ME TOQUES! - Su grito suena lleno de miedo y es hasta desgarrador.

-Yo no puedo estar con alguien así - niego con la cabeza ante sus palabras, no ella no me puede dejar. - Eres un monstruo, esto se acabó Christian, se acabó para siempre.

Veo como Anastasia quita su anillo de compromiso y me lo entrega, me da una última mirada y se va dejándome solo y completamente vacío en esta habitación. Una habitación que antes me daba placer, ahora me da pescadillas, ella me dejó, me dejó porque soy una mierda. Miro con odio mi habitación roja y con la ira recorriendo mi cuerpo comienzo a destruirlo todo. La perdí, perdí lo que más amo en la vida, por culpa de esta mierda.

Inocencia #PGreySteele2019Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ