VIII

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Chopper había terminado de sanar al oso blanco hace mucho, por lo que ahora se encontraba conversando con él en compañía de las dos hermanas que estaban bajo su cuidado. La oscuridad de la noche se hacía cada vez más presente, por lo que el pequeño reno le pidió al oso que se fuera a su hogar, para él era peligroso tener a sus protegidas ahí afuera, más aún porque las noches en ese bosque eran más oscuras que en otras partes del país y sería muy fácil que alguien se acercase a ellas sin que él no notara. 

—  Y si vuelves a sentir alguna molestia ya sabes a dónde venir, pero por favor no golpees más mi clínica de la forma en la que lo hiciste o de verdad que no te atenderé —  agregó el doctor con sus pequeños brazos cruzados en su pecho. 

—  Muchísimas gracias doctor Chopper, y no se preocupe, no lo volveré a hacer, lo prometo... Y si alguna vez está en peligro usted o las jovencitas, como forma de pago yo los ayudaré, sea quien sea el que trate de dañarlos — contestó el gran oso muy agradecido, y despidiéndose de todos emprendió el camino a su hogar, fuese donde fuese que quedara. Las chicas se despidieron de todos los seres, por lo que Nojiko había comenzado a llevar a Nami hacia dentro de la clínica, pero extraña voz las detuvo.

— ¡Oí! No veo ni mis manos, ¿¡cómo demonios vamos a llegar hasta las chicas!? — se escuchaba que alguien decía, pero la oscuridad ya más densa no dejaba ver de quien se trataba, hasta que de pronto alguien gritó. 

— ¡Choppeer! ¡Responde si me escuchas! — dejando paralizadas a las dos hermanas y al pequeño doctor. 

— ¡Es Luffy! — exclamó emocionada la pelinaranja en conjunto con Nojiko y el doctor.

Nami trató de mirar a través de la espesa noche pero fue en vano, no lograba ver absolutamente nada e iba a intentar gritarle para poder contestarle que estaban ahí pero de pronto apareció Anjana y le habló  con su diminuta vocecita. 

— Por favor señorita Nami, no grite o espantará a los demás, yo tengo una idea para que ellos puedan llegar bien hasta aquí — y tras decir aquello, comenzaron a encenderse pequeñas lucecitas por todo el lugar. 

— Qué... ¡Las luciérnagas! — susurró contenta Nojiko viendo cómo estas comenzaban a hacer un camino a través del bosque para guiar a los amigos del pequeño doctor.

— Así no tendrán problema en llegar hasta ustedes — comentó la pequeña hada revoloteando alrededor de las hermanas.

A la pelinaranja le llamó la atención que Anjana quisiese ayudar a Luffy, después de todo él era humano y a ellos no les agradaban, así que su curiosidad pudo más y preguntó.

— Hem... Anjana, ¿puedo preguntarte algo? ¿Por qué los ayudan si se supone que a ustedes no les gusta que los humanos invadan en su bosque? 

— Bueno, ellos son amigos suyos, del doctor Chopper y nuestro también... Verán, hace un tiempo atrás hubo un hombre malvado que venía a este lugar con la intención de matarnos, comernos e incluso vender nuestros pequeños cadáveres por parte... Él decía que nosotros no lo habíamos ayudado cuando él más lo necesito y esa era su venganza, pero un día cuando ese hombre trataba de incendiar todo el bosque y matar al doctor Chopper por tratar de defendernos, apareció Luffy junto a su hermano y unos cuantos amigos de ellos y lo rescataron, se llevaron al hombre muy lejos de aquí, lo encarcelaron en un lugar abandonado y se llevaron con ellos al doctor Chopper para asegurarse de que sus heridas sanaran bien — pero entonces el pequeño renito prosiguió.

— Esa vez muchos de los que vivían en este lugar murieron, incluso los seres que estaban en peligro de extinguirse pues... Desaparecieron. Pero la ayuda de ellos llegó justo a tiempo para salvar a todos los que quedábamos aquí e incluso se quedaron un par de días haciendo guardia de que nadie más viniese a pesar de que varios de ellos se venían agotadísimos y un poco heridos... Ayudaron en lo que más pudieron a pesar de que les dijimos que estaríamos bien y que prosiguieran con su viaje, no queríamos depender de ellos ni atrasarlos con sus cosas, pero la respuesta que nos dieron fue: "si alguna vez necesitan de nuestra ayuda, nosotros lo sabremos y estaremos aquí antes de que ustedes puedan darse cuenta". Recuerdo que Luffy me dijo que me haría el doctor más conocido en todo el mundo solo porque lo curé de todas las heridas que traía en el cuerpo... Y bueno, era obvio que no podrían saber si nosotros teníamos algún problema, después de todo ellos viajan por muchos lugares del mundo, pero esas palabras para todos aquí significaron un símbolo de paz y amistad... Así que es por eso que a ellos no se les teme ni mucho menos se les priva de nuestra ayuda — explicó el pequeño doctor, orgulloso de los amigos que todos ahí se habían hecho.

Mi querido guardiánWhere stories live. Discover now