INSTINTO

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El sonoro crujido de las ramas acompañado de cuerpo impactando el suelo y una serie de quejidos resonaron en el bosque.

- Otra vez - le ordenó Ginza al pequeño rubio que aún se mantenía recostado en el suelo - ¡Levántate!- volvió a insistir recibiendo como respuesta una mirada desafiante del príncipe.

Tweek con la última pizca de energía que le quedaba se levantó, observó su objetivo y empezó a crear una nueva estrategia.
Comenzó a escalar el enorme árbol frente a él, cuidando en todo momento su agarre y la posición de sus pies. Un mal cálculo teniendo como resultado un paso en falso lo hizo caer nuevamente de espaldas de tan elevada altura.

- Mal - recalcó Ginza - Ya te repetí como se hace -

- ¡GHA! Esto es muy difícil - respondió frustradamente Tweek - De igual forma no entiendo para qué me sirve aprender esto -

- Son técnicas de escape, sirven para salvar tu vida en una situación peligrosa - le respondió - No siempre voy a llegar a salvarte, y aprendiendo esto te dará unos segundos de ventaja frente al enemigo -

- ... - Tweek se quedó callado en el suelo, recorriendo con sus dedos la herida todavía fresca producida en su rostro, recuerdos comenzaron a llegar, mismos que produjeron un suspiro pesado en sus labios.

- Te mostrare nuevamente como se hace - dijo con la intención de animarlo - Observa con atención -

Ginza escaló el árbol con gracia y agilidad. Sus piernas fuertes le daban el suficiente impulso para que sus brazos lograran sujetarse de la rama más cercana.

- Cuando tus pies no encuentren algo con que sujetarse, estos te servirán para atorarlos por un momento - dijo señalando las marcas plasmadas en los árboles producto del transcurso del tiempo - Te dará tiempo para sujetarte de algo- explicó - Debido a que tus piernas son cortas y tus brazos delgados y largos debería ser fácil para ti hacer esta clase de cosas -

-¿Fácil? ¡NGH! ¿Tú piensas que es fácil? - respondió - ¿Cuándo aprendiste a hacer esto?

- Es entrenamiento básico - se limitó a decir - De las primeras cosas que aprenden los niños para convertirse en ninjas

- ... - Tweek prefirió callar ante tal declaración - Entonces enséñame algo fácil - pidió

- ¿Algo como qué? -

- ¡Ack! A como usar esos objetos pequeños, metálicos y filosos - dijo sin pensar. El príncipe creía que por saber usar el arco y tener relativamente buena puntería podría dominar el arma.

- ... - una sonora risa se escuchó - ¿Te crees lo suficientemente capaz para dominar el arte de los shurikens?- siseó el ninja - No te dejes engañar, saber usar los shurikens requiere de mucha habilidad y tiempo, incluso a mi todavía se me dificulta -

- Se que puedo lograrlo - le desafió

- Muy bien - sonrió - Toma - Ginza comenzó a sacar algunos shurikens de su pantalón, se despojó de su gorro azul para atóralo con uno de esos objetos en un árbol - Intenta clavarlo aquí - le señaló su gorro - Aléjate un poco más - pidió

El príncipe acató sus órdenes, tomó un shuriken y observó aquella prenda azul; lo lanzó sin dejar de mirar el blanco. Al parecer su primer lanzamiento fue un fracaso pues terminó clavado en otro árbol.

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