DONDE NACEN LOS CEREZOS

CAMBIO DE PLANES

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Muchas gracias por todo

- Por cierto... ¿Dónde está él? - preguntó al darse cuenta de la ausencia del pelinegro - Creí que nos reuniríamos todos -

- Decidió quedarse - respondió Clyde - Por Tomoko, despertó recientemente y él quería cuidarla a pesar de mi insistencia -

- Necesitan hablar con él acerca de esto - hizo una pausa - Lo conocen, saben que a pesar de que todos estén de acuerdo en una decisión si él no lo está no se hará...-

- Yo hablaré con él - dijo Token - Lo convenceré de que entregar al príncipe, es la mejor opción -

- Esta bien... cuento con ustedes - la chica suspiró con pesadez - Me debo ir, Caos pidió que no tardara -

- Gracias Nichole - dijo el castaño

- Tengan cuidado - pidió

La chica corrió adentrándose a lo profundo del bosque, Jimmy, Token y Clyde la observaron hasta que su figura nuevamente se perdió entre los enormes árboles y su obscuridad.
Ahora tenían una misión aún más complicada pues convencer a Ginza no resultaba nada fácil, los tres regresaron por el sendero que llevaba a la aldea, tenían que hablar con él.

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Sorprendentemente le habían dado autorización de internarse al bosque a conseguir algunas plantas que ayudarían a  acelerar la cicatrización de las heridas de aquella mujer. El padre de Clyde, al no encontrar a su hijo o sus compañeros aceptó dicha propuesta confiando plenamente en rubio, se lo había ganado.

El príncipe aún era perseguido por la pequeña Jin quien no perdía de vista sus pasos. Tweek temió que lo siguiera y que ella se llegase a perder en lo profundo del bosque junto con él; y si eso pasaba estaban perdidos pues el rubio carecía completamente del sentido de orientación provocando que olvidase el camino de regreso. Por ello aceleró sus pasos escabulléndose entre las casas y la gente con el propósito de confundirla, y así lograr que ella perdiese su rastro; constantemente revisaba atrás y a los costados para ver si ella todavía seguía ahí, y cuando al fin lo logró regresó a su curso.

En la entrada de la aldea se quedó un buen rato analizando aquella situación, el bosque era un lugar mágico, misterioso e incluso engañoso. Era una experiencia desconocida para él, sería su primera vez en el bosque completamente sólo.

-... - una pequeña mano jalo sus ropas - ¿Qué haces? -

- ¡GHA! - Tweek se sobresaltó haciendo que la menor retrocediera un par de pasos - Creí que te había dejado atrás ¿Cómo diste conmigo? -

- No fue fácil, perdí tu silueta por unos segundos - confesó - Es muy fácil encontrarte, tu cabello me ayudó - el rubio suspiró con pesadez, tenía que pensar en una nueva idea para deshacerse de ella - ¿Qué haces? -

- ... - "todos los niños son curiosos" escuchó en su cabeza - Iba a salir por un par de cosas - explicó

- ¿Qué cosas? -

- ¡Ngh! Algunas plantas para tu hermana - respondió

- ¿Puedo ir contigo? - preguntó con emoción en sus ojos

- Mmm... ¡Agh! No creo que sea buena idea - Tweek quería un rato a solas y la idea de tener que cargar un niño consigo francamente no le agradaba - Es muy peligroso - argumentó usando la primera excusa que se le vino a la mente - Es un no, ahora regresa antes de que noten tu ausencia -