Cap 26

1K 81 42
                                    

POV Hipo
Al abrir los ojos y no notar mi desorden de cuadernos encima, me preocupe.

Me levante rápidamente, viendo en todas las direcciones hasta que reconocí el lugar. Era una de las habitaciones vacias de la granja de Bob, la que antes solía utilizar cuando quería escapar... de todo.

Sacudí la cabeza un poco para aclararme; no sabía que hora era pero dudaba que fuera a llegar al colegio, o siquiera a casa, antes de que alguien notara mi ausencia.

Suspire un poco resignado, no podía lidiar con todo a la vez o sino terminaria de empeorarlo. Zoe tenía razón, una cosa a la vez, y de momento mi prioridad era Chimuelo.

Me levante y me dirigí a su establo, donde vi a Zoe con unas tazas de café.

-Miren quién desperto-dijo dandome un abrazo y pasandome una de las tazas-, pense que seguirias así un par de horas más.

-Perdón, ni note cuando me quede dormido. ¿Y Bob?

-Papá tenía una entrega de heno al otro lado del pueblo, pero ya no debe tardar.

-¿Cómo sigue Chimuelo?-tras un silencio um poco incomodo

Zoe tardó en contestar.

-Al menos ya no tiene espuma en la boca, pero sigue teniendo fuertes sacudidas-suspiró-. Reconosco el efecto que tienen la mayoria de plantas de la granja sobre los animales, lo que sea que haya sido esto fue externo.

-Luego investigaremos ¿Sí? De momento vamos con Chimuelo.

Nos acercamos un poco más a mi caballo para ver cómo estaba, pero los veterinarios nos detuvieron.

-Dejenlo descanzar-dijo uno de ellos-, lo anestesiamos para que no sintiera dolor, pero tenemos que llevarnoslo para poder darle mejor tratamiento

-Pero...

-Confía, hijo-dijo el otro poniendome una mano en el hombro-. Él saldra de esto, es fuerte como tu.

Mire a Zoe y luego al veterinario, esperando alguna otra respuesta, pero no me la dieron.

-Bien-dije entre dientes para mi.

Ellos se fueron por su carro, y para esperar el transporte que se llevaria a Chimuelo, dejandonos a Zoe y a mi miramdo a la puerta cerrada del establo.

-Ya una cosa solucionada-dijo con algo de optimismo Zoe-, ahora hay que lidiar con otro detallito.

-Papá-suspire entendiendo su idea.

-¿Cómo vas a explicar tu pequeña desaparición?

-No sé, pero probablemente ni lo ha notado-vi la hora; poco más del medio día-. Sera mejor que vaya a casa, algo se me ocurrirá en el camino.

-Cuidate-me dio un rápido abrazo-, te avisaremos de cualquier cosa que ocurra.

Asentí y salí del lugar, tomando algunas de mis cosas que estaban regadas por ahí en el camino.

Mientras caminaba, sentí el celular vibrar. Jack y Astrid habían escrito, diciendo que puede que hallan encontrado algo relacionado con Chimuelo, pero que era mejor en persona.

Me sorprendió que Jack se hubiera enterado tan rápido, pero principalmente me sorprendió que hubieran estado buscando algo.

Solo digo, no es algo que los afecte, pero se los agradezco.

Es bueno saber que tengo amigos de verdad.

El NuevoOnde histórias criam vida. Descubra agora