12

416 47 1
                                    

Es la tercer noche que Josh no llega al bosque, tampoco va a la escuela y me estoy preocupando, digamos, no que me preocupe sólo quiero saber qué es de él.

Apenas salí de la escuela y me dirigí a mi casa pero no entré. Ni siquiera a dejar mis útiles. Estaba decidido a ir a la casa de Josh para saber algo de él. Fui hasta mi hogar sólo para tomarlo como punto de partida y guiarme recordando el camino que habíamos llevado a cabo aquella vez que Josh me obligó a acompañarlo a su domicilio. Así que tratando de hacer memoria me guié por algunas casas que recordaba haber visto esa noche y después de unos cuantos minutos caminando llegué.

Nunca me había detenido a verla bien. La primera vez que estuve allí ni siquiera podía levantar la vista del piso por no querer ver Josh y la segunda vez era de noche.

Era una casa bastante bonita. Las paredes estaban pintadas de un blanco antiguo y en la entrada había un alero sostenido por columnas decoradas con piedras blancas y negras.

Me quedé bastantes segundos admirando la arquitectura de la morada. Tal vez deba admitir que era una excusa para no ir a tocar la puerta, pero en algún momento tenía que hacerlo, es decir, ya estaba allí.

Tomé aire y me impulsé hacia la entrada. Me quedé parado sin hacer nada un rato frente a la ella, mirando el timbre e intentando escuchar ruidos provenientes de adentro para asegurarme de que no llegaba en un mal momento. Pero del interior no parecía venir nada así que por fin me decidí por golpear la puerta que se encontraba cerrada frente a mi suavemente con mis nudillos.

Una parte de mi quería enserio ser atendido por Josh, pero otra parte deseaba que lo golpes hayan sido lo suficientemente bajos para que nadie en la casa se percatara y pudiera irme con la excusa del "lo intenté".

Pero fueron contados los segundos que tuve que mantenerme parado esperando sin señales cuando oí unos pasos arrastrarse seguido de un tintineo de llaves.

El ruido de la cerradura siendo destrabada aumentó mi nerviosismo provocando que mis manos comiencen a temblar exageradamente, por lo que las escondí tras de mi apretándolas juntas en un intento de calmar el movimiento.

Y la manija se bajó y la puerta comenzó a abrirse lentamente mientras yo sentía mi labio inferior imitar a mis manos y una gota de sudor deslizarse por mi frente.

Y allí estaba. Joshua. Quien cambió repentinamente tu semblante cansado con los parpados pesados a un rostro de sorpresa levantando un poco sus cejas.

-Tyler

-Josh- tragué duro saliva

-¿En que puedo ayudarte?- su tono de voz era ronco y parecía ser un tanto molesto.

-Sólo.. emm.. yo.. quería saber cómo estabas... es decir.. hace tres días no te veo en ningún lado y me preoc.. quería saber.. ¿Estás bien?- balbuceé.

-Estoy vivo ¿Algo más?- sus ojos volvieron a entrecerrarse en un gesto de pesadez.

-¿Estás molesto?

-¿Por qué lo hiciste?- habla rápido apenas termino mi pregunta.

-Yo... No lo sé- agacho la cabeza. En parte estaba arrepentido en realidad, pero no podía decirle que sólo quería generar escándalo porque se molestaría más de lo que estaba.

Suspira pesadamente y coloca sus dedos en su frente para terminar apretando la zona de sus párpados en señal de agotamiento.

-Perdónam...

-Mis padres van a matarme si tengo otra sanción en el colegio. No puedo volver allí porque lo primero que harían sería regañarme y llamarlos para comentarles de mis actitudes. Pero tampoco puedo estar aquí porque también se enfurecerían demasiado si se enteran que estoy faltando sin un justificado

-Josh yo...

-Josh nada Tyler

-Puedo intentar ayudarte con eso

-¿Qué vas a hacer? ¿Hablarás con mis padres para convencerlos de que no es malo o algo por el estilo cuando no hay forma de buscar una excusa que no me haga ver como un completo bueno para nada violento de mierda ante ellos?

-Josh

-No, Tyler. Vete y no vuelvas. Ya pensaré en algo. Mientras tanto no estorbes.- dijo para terminar cerrando la puerta en mi cara, dejándome con un vacío inmenso dentro de mí.

No sabía por qué sentía eso. No sabía por que me dolía que Josh esté sufriendo después de todo el sufrimiento que él me provocó a mi todos estos años.

Sólo no soportaba verlo así y haría lo que sea para arreglarlo.

Soy un completo imbécil.

_

Esa noche volví a ir al bosque en mi completa soledad.

Me dirigí a la cabaña y subí los peldaños hasta la habitación donde solíamos acostarnos a besarnos. Me recosté allí mirando hacia el techo. Me quedé varias horas pensando algo para hacer que pueda ayudar a Josh, la verdad no estaba capacitado para hacer muchas cosas.

Pensé que podría hablar con el director y convencerlo de que las actitudes de Josh eran completamente mi culpa, lo cual tiene un poco de verdad, pero lo exageraría inventando que yo siempre lo provoco o algo por el estilo para cargar con toda la culpa y que termine saliendo inocente. Aunque por más que yo tenga la culpa de que él me lastimara no saldría tan inocente al reaccionar de esa forma siempre ya que tuvo muchas denuncias de violencia. Además también había golpeado a Dallon así que esa idea no funcionaría.

También se me ocurrió decirle la verdad, no tan detallada, pero explicarle que Josh tenía un problema con su reacción ante ciertas cosas y no podía evitarlo. Le explicaría que estos días no estuvo asistiendo a clases debido al problema que tendría con sus padres si se enteran que tenía otra sanción.

Eso podría servir. Tal vez tenga algo de piedad de él y entienda. Podría tomar sus sanciones por él para darle tal vez un gusto al director quién sabe.

Y ahí fue cuando me di cuenta.

¿Qué mierda estoy haciendo? ¿Tomando la responsabilidad de los actos violentos de mi agresor? ¿Haciéndome cargo de las consecuencias que debería de recibir por haberme hecho bullying tantos años?

Algo andaba mal en mí. Pero sentía el impulso de hacerlo por más idiota que sea aquella acción.

Tal vez en el fondo en verdad lo entendía, y podía perdonar cualquier cosa que haya hecho, pero muy en el fondo, ya que no tenía idea por qué.

Why Are You Like That? [Joshler]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora