Capítulo 23

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"¿Qué crees tú por qué les está tomando tanto tiempo?" Verónica preguntó mientras se apoyaba en un codo, mirando a Jughead.

"Probablemente tuvo algo que ver con el gran ruido que escuchamos hace unas horas", se encogió de hombros, acostándose a su lado.

"¿Por qué no querías que nadie te acompañara?", Le preguntó ella. "Podrías haber muerto".

"Soy el líder", enfatizó Jughead. "No quiero que ninguna de mis Serpientes se lastime".

"¡Sigues diciendo que eres líder , pero también eres humano! Eres un hijo, un hermano, un amigo, eres un humano. Puedes salir herido, puedes morir", le recordó Verónica con tono exasperado.

"Lodge está preocupada por mí", Jughead imitó a Verónica con una voz exagerada.

Ella lo golpeó en el hombro. "No, no quiero que te mueras porque si mueres, no podré verte usar mi ropa". Verónica trajo el trato que habían hecho.

"¡Como si!" Él la miró de inmediato. "Tú eres la que va a tener que usar ropa de hombre. Y he decidido seguir vivo solo para verme ganando la apuesta".

"Mm, ya veremos", se acurrucó en una bola en el suelo. "Si tengo neumonía es tu culpa".

Jughead puso los ojos en blanco. "Y dices que yo soy el dramático. Sí, estás empapada, así que, sobrevivirás. Supéralo".

"Es fácil para ti decirlo, tienes puesta la ropa seca", se quejó Verónica. "Todavía estoy empapada".

De hecho era verdad. Jughead se había quitado la camisa para colgarla a la débil luz del sol que había secado parcialmente su camisa mojada después de las horas.

"Quítate la camisa", le dijo a Verónica después de quitarse la camisa.

"¿Has perdido la cabeza? ¿Qué estás haciendo?" Ella fue sorprendida por sus acciones. Ella no tenía idea de lo que él estaba planeando.

"Amigo, nada de eso", le frunció el ceño. "La señorita Princesa de aquí dijo que tenía frío, ¿no? Ahora le voy a dar a su alteza mi camisa. No quiero que alguien tan importante como usted contraiga una neumonía, o se vaya con mi humilde jefe de criado". Sus palabras goteaban sarcasmo.

Verónica suspiró, molesta. "Date la vuelta y no mires".

Jughead obedeció, pero no sin replicar. "Prefiero estar ciego que mirarte".

Después de cambiar, Verónica trató de colgar su ropa en la cuerda para secarse. Sin embargo, ella era demasiado corta para alcanzar la cuerda que Jughead había colgado por encima de la piscina.

"¿Necesitas ayuda, su alteza?" Jughead volvió la cabeza una vez que escuchó los pasos de Verónica.

Ella ignoró su sarcasmo y le entregó su ropa mojada. "Gracias, Torombolo".

Después de que ambos se acomodaron, se tendieron uno junto al otro, mirando la luz de la luna que brillaba desde arriba hasta que sus sueños se los llevaron.
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"¡Cállate Toni, los vas a despertar!"

Click.

"Eres más fuerte que yo, ¡cállate!"

Click. Click.

"¡Idiota, el sonido de tu cámara está encendido!"

"¡Pero al menos tengo un mejor ángulo que tú!"

"Chicas, cálmense. Son suficientes fotos".

Verónica abrió los ojos para ver la piel. Estuvo confundida por un momento antes de descubrir que había enterrado la cara en el pecho de Jughead y que se habían acurrucado mientras dormían.

Luego, levantó la vista y vio que Toni, Cheryl y la cara de FP miraban hacia ellos. Toni y Cheryl, con sus teléfonos fuera, parecían emocionadas como las escolares, mientras que FP parecía divertido.

Verónica inmediatamente se sonrojó y tiró del brazo de Jughead, desenredándose de él.
"Buenos días", ella trató de jugar.

"Nunca pensé que diría esto, pero tú y Hobo Prince son adorables ", dijo Cheryl.

"¿Te golpeaste la cabeza en el camino de entrada?" Verónica frunció el ceño, poniéndose de pie.

Jughead, que finalmente se despertó después del poderoso lanzamiento de Verónica de su brazo, se despertó desconcertado. "¿Qué está pasando? ¿Por qué tienes tus teléfonos fuera?"

Toni sonrió, mientras Cheryl repetía su línea de la firma brillantemente. "Mi teléfono se siente atraído por las escenas lindas".

Todavía con sueño, pero lleno de sarcasmo, Jughead respondió salvajemente. "Entonces esa debe ser la razón por la que tu teléfono siempre se te está escapando".

HISTORIA ORIGINAL DE avrylfire

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